^¥/"LIL MEOW RAW".💣[/KT^M¥\]♠️

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— Eres muy guapo Kim. — susurró Suga por lo bajo viendo fijamente al chico dormido sobre su cama.

Desde su lugar podía ver a la perfección todo lo que conllevaba a ser Kim Taehyung.

— Creciste muy rápido Kim y eso pronto será un grave problema. — la voz de Suga salió lejana e indiferente pero aún así había algo que lo hacía sentir enfurecido, no con Taehyung sino con esos entes que lo lastimaron.

Al menos los había desaparecido de todos los mundos, pero algo no cuadraba.

— Tú no cuadras en la ecuación. — habló refiriéndose al chico sobre la cama, suspiró molesto y la habitación comenzó a iluminarse un poco, pronto sería de madrugada.

Suga no sabía cuánto tiempo había estado observando a Taehyung y calmando la furia que nacía en su interior, pero la poca iluminación del lugar le decía que llevaba más de lo que había pensado quedarse.

— O al menos no era el tiempo de que estuvieras en esa ecuación. — observó una vez más el rostro casi pálido de Taehyung. 

Su mirada gatuna analizó por completo a Kim, en un intento de buscar algo pero sin tocarlo, él necesitaba saber qué demonios le habían hecho las sombras.

Desde su lugar no lograba tener así sea un índice de lo ocurrido.

Negó y se dedicó a observar una vez más a lo que le pertenecía por derecho desde hace milenios.

La respiración de Taehyung estaba siendo lenta y suave, su rostro se contrajo adorablemente un poco y su nariz se movió como si tuviera picazón, Suga hizo una mueca en un intento por no sonreír. Le fue imposible.

Desde su muerte no ha podido sonreír genuinamente y menos a reído porque le nazca.

Suga en esos momentos no era más que un cascarón vacío. Sin sentimientos liberados y un corazón amargado y frío, pero algo le decía que pronto no seguiría así y eso de cierta manera lograba ponerlo inquieto.

Taehyung se removió al sentir una ventisca calar por su acaramelado cuerpo, Suga frunció su ceño al notar que el sueño de Taehyung sería molestado; con un vistazo, cerró la ventana sin siquiera moverse de su lado, justo a los pies de la cama de Taehyung.

Taehyung comenzó a abrir sus ojos lentamente y Suga lo observó, atento y serio para mostrar su verdadero rostro.

Suga sabía que Taehyung vio el rostro de SeokJin y él no podía darse el lujo de que Kim reconociera a su primo de esa manera.

Si eso sucedía, todo se iría a la misma mierda y aún, aún no era el momento.

— Seok.. Seokjin...— fue lo primero que  gimoteo Taehyung con voz rasposa y lejana. Suga, aunque no quería, sintió una pizca de celos al ver que lo primero que decía Taehyung era el nombre de SeokJin. Suga debió de repetir que Jin, era el primo de Taehyung. 

Taehyung miró el techo de su habitación y se quedó en silencio por completo ignorando todo a su alrededor.

— Estás despierto. — dijo Suga con vos ronca.

Taehyung no volteó a verlo.

— Mírame. — exigió bajo y reacio el demonio.

Una vez más Taehyung lo ignoró y Suga se irritó más de lo que ya estaba.

Suga se acercó a ver el rostro de Taehyung y se tensó en su lugar.

Taehyung tenía la mirada perdida, sus ojos estaban sin su color natural, su respiración errática y acelerada, él estaba sudoroso  y las manos apretando las sábanas, fue un jodido mal presagio.

Suga se subió sobre el cuerpo de Taehyung de manera fugaz, tomó las manos contrarias y las puso sobre su cabeza, sujetándolo con tan sólo una de sus manos deteniendo cualquier movimiento mal hecho por Taehyung que pudieran herirlo.

Las piernas de Suga a cada lado de Taehyung sujetaron con fuerza el cuerpo bajo él, con su otra mano tomó la mandíbula firme de Taehyung, la posicionó y fijó su mirada gatuna y helada sobre la del humano.

Suga respiro bajo y sopló, un escalofrío recorrió el cuerpo de Taehyung y se removió como si algo le quemará, gritó, pero el grito salió ahogado dejando tan sólo un pequeño jadeo, que sin mentir, encendió algo en el interior del demonio.

Suga comenzó a recitar algún conjuro en un idioma irreconocible para cualquiera, Taehyung comenzó a respirar de manera descontrolada y su cuerpo se removía de manera sobrenatural intentando alejar el cuerpo del contrario.

Suga al ser más fuerte lo detuvo y terminando de recitar esas palabras roncas, lejanas y demoníacas volvió a soplar sobre el rostro de Taehyung.

Taehyung se tranquilizó por completo y comenzó a respirar de manera normal, su cuerpo se relajó  y Suga le soltó los brazos pero sin bajarse del cuerpo fornido del menor.

Taehyung respiró y enfocó su mirada en la de Suga, sonrío tan sólo un poco y lo abrazó, haciendo que el contrario soltara un jadeo por el repentino toque.

Suga se quedó ahí, helado sin saber que hacer, Taehyung por el contrario se apegó más al cuerpo de Suga y comenzó a sollozar. Taehyung sollozó descontroladamente, gimoteó y al final lloró, lloró porque en esos momentos había sufrido un ataque de pánico.

El corazón casi inexistente de Suga se contrajo dolorosamente y sin saber cuándo y por qué motivo, correspondió el abrazo del menor.

Taehyung siguió llorando mientras Suga le acariciaba la espalda en un intento por consolarlo.

— Lo siento. — susurró Taehyung.

Suga no sabía por qué el menor se disculpaba pero no dijo nada.

— En serio lo siento. — repitió y Suga se limitó a abrazarlo aún más fuerte.

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