El universo parece inhóspito, pero en realidad, está tan lleno de vida como de misterio. Ésta es una historia de estrellas remotas, que como el sol naciente te iluminará una nueva forma de ver las cosas. Para adentrarte en ella, debes abrir tu mente y estar dispuesto a despojarla de todo aquello que consideras conocido, incluido tu cuerpo físico. Recuerda estas palabras, viajero, pues en esta odisea tu mente e imaginación serán los que recorran enormes distancias, mas allá del tiempo y del espacio.
En los confines del cosmos, entre el cúmulo de Virgo, transita una gran galaxia llamada Andrómeda, cuyos tonos rosas y orquídeas bailan sinuosamente hacia su brillante centro de amarillo cálido. En ella, entre los miles de millones de sistemas solares, se encuentra un sistema solar binario llamado Kentaur. Compuesto por siete planetas, gaseosos y rocosos, de los cuales destaca un gigante azul llamado Indicum, acompañado por sus cuatro satélites: Táugeta, Alcíone, Ceix y Egle. Sus paisajes y climas lo hacen parecer un oasis en medio del vasto mar cósmico, hogar de infinidad de biomas con flora y fauna tanto hermosa como peligrosa. En él, la civilización dominante que allí reside se hace llamar "Kalivan", nombre que en su lengua significa "luz que se filtra por las hojas de los árboles". Según su cosmogonía, Mahas, lo que consideran una consciencia universal, les dio ese nombre al crearlos de su luz cósmica que se quebró en miles de fragmentos al colisionar contra el primer árbol de Indicum, naciendo así los Kalivan. Brillantes maestros en el arte del combate y la guerra, y a la vez viviendo en armonía con la naturaleza única de Indicum, desarrollaron su civilización trabajando junto a ella y no enfrentándola. Creando arquitectura, costumbres, ciencia y conocimiento en donde el honor que le rinden se refleja en cada aspecto de su civilización, a la vez que la conectan con lo que ellos consideran la fuente de todo: El Gran Mahas.
Siendo sub-familia de la extensa especie Daemon, el tiempo y la evolución llevó a los Kalivan a dividirse en varias razas, adaptándose a cada rincón, cada bioma y ambiente de su planeta. Desde sus inicios, la raza original fue la Empyreal o ardientes: Caracterizados por ser daemons de fuego y afines a climas cálidos, inquemables, maestros de la metalurgia en su mayoría. Luego, entre las alturas aparecieron los Aerial o aéreos: Tímidos, etéreos, misteriosos y poco vistos que habitan las áreas más altas de Indicum, haciendo vida en las islas flotantes. Desde los témpanos surgían los Frigus o gélidos: Daemons afines a climas invernales, apacibles a las ventiscas y climas más hostiles. Desde las profundidades emergieron los Aqueus o marinos: Conocidos por habitar los inexplorados océanos del planeta, extensos, recónditos, llamados "La otra cara de Indicum". Y finalmente, germinando entre los suelos, los Terrene o terrestres: Especie ligada a la flora y la fauna, conocedores de la agricultura, medicina, y la vida bajo tierra. A pesar de ser diferentes en cuanto a razas, los Kalivan aprendieron a convivir en completa armonía. Comprendieron pues, hace milenios cuando pasaron a ser una civilización espacial, que los conflictos entre una misma especie apuntan a un comportamiento primitivo, ignorante e inconsciente. No es de sabios el destruirse a uno mismo, ni al mundo que te otorgó la oportunidad de ser parte de él.
En Indicum no existen países, el apoderarse de territorios por medio de la fuerza nunca fue un comportamiento nato en su naturaleza, en su lugar, un sistema de reinado fue lo que se desarrolló de manera colectiva, y delimitaciones de territorios en provincias. Compuesto principalmente por dos continentes enfrentados como un espejo, llamados Dytika y Naskiganta, siendo uno el equilibrio del otro, su contraparte complementaria. Unidos en el pasado, ahora solo forman dos mitades con un vago vestigio de lo que una vez fue su conexión, junto al masivo monte Colossus, pináculo del planeta. Desde el principio de la historia de los Kalivan, todavía sinedo una civilización joven, surgió de entre las masas una fémina misteriosa, quien les enseñó las bases de una sociedad. Su conocimiento del todo era desbordante, tanto, que al principio causaba temor, pensando que era una enviada de Mahas. Sin embargo, con el tiempo esta fémina cosechó la confianza, admiración y respeto de sus semejantes. Los Kalivan siguieron sus enseñanzas y órdenes, considerándola una fuerte líder, quienes décadas más tarde pasaron a llamarla "la primera reina". No fue sino mucho después que reveló su nombre, haciéndose llamar Ameyali Aerilyn, quien se casó con un poderoso guerrero que la protegió desde que empezó a impartir conocimiento, llamado Alister. Juntos, pasaron a ser los primeros reyes de Indicum, iniciando así el eterno legado de la familia Aerilyn. Fácilmente reconocibles porque los Empyreals nacidos bajo su escudo son los únicos capaces de respirar fuego celeste, supuestamente por una condición genética de la misma Ameyali. Pasaron así generaciones donde las princesas Aerilyn heredarían el trono para ser las siguientes reinas, y desposar al caballero que conquistara su corazón sin importar de donde venga.
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Eris: La Reina de Ópalo
Science FictionEris, una flameante Kalivan oriunda del planeta Indicum en las profundidades de la galaxia Andrómeda, es forzada a aventurarse en los vastos confines del universo, buscando restaurar la paz que le fue arrebatada al reino del cual ella es heredera. P...