SKYFALL, the maze runner

O2 » ❛ one every night ❜

CAPÍTULO DOS
Uno cada noche.

Era fácil cansarse de cortar y marcar papel, pero Calypso no se detuvo porque los otros tampoco lo hicieron. Dentro, Newt, cuatro chicos más y la otra chica que no se había presentado todavía, y que si le hablaban, tampoco la llamaban por su nombre, habían estado haciendo lo mismo durante horas.

Cortaban papel encerado, lo marcaban por sección y por día, como le explicaban, y al final, todos ponían el mismo día de ocho secciones diferentes, una encima de otra, hasta que se formaba una letra.

Eso fue todo lo que le explicaron: buscaban un código, y según había entendido, era el cambio lo que los impulsó a todos a tomar estrategias diferentes; antes solo comparaban una misma sección con el día anterior y sucesivamente. Habían estado allí dos años haciendo lo mismo hasta que llegaron dos personas antes de ella y todo cambió.

Ahora, ella también formaba parte de los enigmas que no podían resolver.

—Entiendo —asintió a Newt cuando salieron de la sala de los mapas—. Debe haber sido deprimente desde el principio estar aquí.

Habían empezado a andar hacia el lugar en el que estaría la cocina, Calypso se moría de hambre y no había comido nada desde que llegó; era una de las cosas que la hacía más humana, aunque no menos cyborg. Tenía partes del cuerpo duras por el metal, pero eran cosas que sabía cuando le entraba curiosidad de revisar en su sistema, no se veían a simple vista.

—Lo fue, la mayoría de nosotros éramos larchos llorones que no sabían qué hacer. Me gustaba el orden de las cosas cuando encontramos un equilibrio, ¿Pero ahora? Tommy tiene un plan que nos sacará de aquí, estoy seguro.

Se sentó en una de las bancas dentro del lugar, en la casa grande, no había nadie en la cocina excepto un chico de piel oscura que, a diferencia de los demás, tenía un overol marrón y una camiseta amarillenta.

—Sartén, ella es Calypso, llegó hoy —Newt la presentó.

El chico la miró con los ojos en grande, pero luego le dió una sonrisa de labios juntos en forma de saludo y le dió algo de sopa cuando le dijo que no había comido nada. Notó que sus ojos se movían a través de su cuello y en el costado de su rostro, luego se movió, yéndose al otro lado de la cocina a hacer alguna otra cosa.

Calypso le preguntó a Newt algo que le daba curiosidad saber.

—¿Cómo me veo?

Él parpadeó dos veces antes de contestar.

—Eres bonita, por supuesto.

—No, quiero decir, ¿Cómo me veo? No tengo registros de mi rostro, y solo conozco algunas cosas que me dice mi sistema. Si pudieras ser más exacto, lo agradecería.

—Oh. Hércules, es raro hablar así, suenas muy... robótica —se rascó el cuello con un dedo mientras la miraba atentamente. No parecía nervioso, más bien, parecía que estaba recapitulando por sí mismo los rasgos de Calypso—. Bueno, tienes los ojos como... como la miel, un café bastante claro, no sería algo que diría, pero tienes las pestañas muy oscuras y largas —su sistema lo anotó en su archivo rápidamente, al lado del color de cabello y de piel—, tu nariz es un poco cuadrada, se curva un poco después del tabique. Se te marca un poco la barbilla, y tú mandíbula está así —movió sus manos a su rostro, inclinando sus dedos de forma que se vió la forma ovalada de su rostro. Ella siguió anotando, asintiendo—. Y los labios... Son rosados, están algo rotos, pero la mayoría de aquí los termina teniendo descuidados, así que no importa, ¿No? Yo también los tengo así.

Ella le miró la boca para ver de lo que estaba hablando, luego estuvo de acuerdo, tenía algunas partes donde se notaba la piel con cáscara, a Newt parecía no importarle, así que no se arrancaba los pedazos muertos.