Mi Único Amor-Jenlisa-(G!P)

Capítulo 7

Se encontraba corriendo por los  pasillos de la escuela, no había podido ver a lisa desde el día anterior ya que lamentablemente por la mañana la rubia había tenido que resivir a sus padres luego de su llegada y no había podido irse junto a ella a la escuela. Todo le parecía extraño, dias atrás trataba de ocultar sus sentimientos hacia su amiga de la infancia por miedo a no ser correspondida y que su amistad terminará, pero eso quedó atrás, tal vez era hora de entregar por completo su corazón.

Como era de esperarse muchas chicas ya se encontraban observando el entrenamiento del equipo de básquet, lisa estaba conversando con jisoo por lo que aún no se había percatado de su presencia, decidió irse a sentar en una de las bancas que eran especialmente para el público. Desde allí pudo ver como lisa rebotaba el balón logrando así que este emitiera un sonido relajante.

-Mírala es un bombón.- estaba claro que ella nunca se acostumbraria a los repulsivos comentarios de parte del "club" de fans de lisa.

Tenían razón, lisa era como un delicioso y suave bombón que podía enloquecer a cualquiera, la pose que ponia cada vez que lanzaba el balón hacia la cesta demostraban sensualidad, sus marcados músculos que se ponían duros cada vez que realizaba el tiro podrían hacer babear hasta mas que una babosa.

-¿Quién es ella?.- jennie estaba tan sumida en sus pensamientos que aún no se había percatado de que la misma chica con la que había visto a lisa besándose se encontraba junto a la rubia.

-Alice, una de las porristas.- aclaró una pelinegra.- creo que es su novia.

-¿Por que lo dices?.

-Miralas, no es normal ese tipo de actos.

Y en definitiva, Alice había colocado la mano cerca del pecho de lisa donde con el dedo indice realizaba trazo tras trazo. Jennie no aguanto más, no quería seguir escuchándolas, no quería seguir viéndolas, rápidamente salió de allí, no sabia si tenia ganas de llorar o si simplemente quería encontrarse con algo donde podría descargar su ira. No corría, seria algo muy llamativo si salía corriendo sin rumbo alguno para que así resiviera miradas desagradables.

Unos fuertes brazos la detuvieron y la hicieron girar, ¿lisa?, no se suponía que estaba muy ocupada conversando a gusto. Tal párese que se había percatado de su huida.

-¿A donde vas nini?.- la tranquila voz de la más alta le hizo saber que, tal vez su escape había llamado un poco la atención.

-Eh...- que le diría, no sabia invertar buenas excusas.- sólo...sólo iba al baño.- mentalmente se reprendió.

-¿Estabas viendo el entrenamiento?.- la manera de hablar de lisa, como por arte de magia hacía que se tranquilizara un poco.- disculpa, no te vi.

-Si, no te preocupes no quise interrumpir tu conversación.- hizo el amago de irse pero nuevamente fue detenida.

-Solo estábamos hablando.

-Si, eso me quedo claro.

-¿Pasa algo?.- lalisa realmente la conocía muy bien.- Te noto molesta.

-Lice, ¿que es lo que sientes por mi?.- no quería sonar desesperada, pero realmente anhelaba una respuesta.

Quizás no era ni el momento ni el lugar indicado para tocar esa conversación, en su defensa no sabia que hacer, sentía que cada vez que alguien hacia un comentario o opinión con respecto al físico o manera de ser de lisa la incomodaba, aveces hasta cierto punto de irse de allí y llegar hasta un rincón a desahogar sus penas.

Ya no existía nada, aquellos estudiantes que corrían por el pasillo a quien sabe donde desaparecieron al ver el rostro de lisa, reflejaba ternura y un brillo sin igual que emanaban sus ojos, esos preciosos ojos color avellanas que le hacía perder la razón y extraviarse en un mundo de paz y calma.