Capítulo 2

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Hide se había duchado muy bien, incluso se rasuró para que no haya ningún vello. Había comprado una loción para el cuerpo, pero declinó el ponérsela encima ya que no le gustaba el estar todo pegajoso.

Desenredó su cabello rubio alborotado y solo vistió una camisa de botones que era de su mejor amigo, le quedaba un poco grande porque había perdido un par de libras con eso de trabajar como mensajero, que le estaba quitando las horas de sueño en las noches.

Esperaba no verse tan mal para gusto de Kaneki. Cepilló sus dientes y espero al susodicho en su cuarto, en la cama.

Una hora después, ya entrada en la madrugada. Kaneki apareció, con su camisa y pantalones hasta la rodillas de color negro como sus uñas y zapatos. Su máscara, que le causaba escalofríos a Hide, la llevaba puesta. Abrió la ventana de Hide y entró sin hacer ruido así como un ladrón.

Removió su máscara y miró a Hide recargado de la cabecera de la cama. Pero se encontraba dormido y nada más verlo así, le parecía tierno a Kaneki. El olor que desprendía su cuerpo era rico y suave. Adictivo. Le gustaba, así como el olor de su sangre, que es una historia para contar en otra ocasión.

Se acercó y se sentó a un lado de Hide y le acarició sus cabellos suaves. Hide se removió y sonrió cuando abrió los ojos un poco y diviso a Kaneki.

— neki' viniste -dijo suave y se estrujó sus ojos con los nudillos delicadamente para quitar el sueño-

— dije que te haría un bebé ¿cierto?

— sí -sonrojado-

Ambos se quedaron en esa misma posición y se miraron a los ojos unos segundos antes de acercar sus rostros y cerrar sus ojos cuando sus labios hicieron contacto. Fue a un ritmo lento y suave que pronto se tornó apasionado, cuando Kaneki introdujo su lengua en la cavidad bucal de Hide; sacándole un sonoro gemido de sorpresa.

A Kaneki le gustó lo que escuchó y cuando rompieron el beso, fue a besar el mentón y luego su cuello con ansias. Mordió, lamió y chupo en esa tierna carne del cuello y clavículas. Pedazos de carnes se tornaron rojizos y púrpuras por la presión que ejercían los labios de Kaneki. Hide continuo gimiendo y estrujando las sábanas y pantalones de Kaneki bajo sus finas manos hechas puños.

Hecho su cabeza hacia atrás para darle más espacio a Kaneki y jadeo buscando recuperar el aire. Sintió la calentura de la habitación subir, su espalda y frente sudar a medida que pasaban los minutos.

Kaneki desabotonó los primeros botones de la camisa para darle mejor acceso al pecho y botones rosados de su rubio-amigo. Dejo un camino de besos de sus clavículas hacia su pecho expuesto y mordió un poco fuerte para dejar una marca de dientes, Hide era suyo. Hide se quejó y removió la mano que estaba sosteniendo el pantalón de Kaneki para tirar de sus cabellos blancos en protesta.

— lo siento, hide -pronunció entre jadeos y respiraciones aceleradas-

Introdujo el botón rosado derecho de Hide en su boca. Chupo, lamió y tiro de ella con sus dientes mientras deslizabas sus pálidas manos por los muslos suaves de Hide; acariciándolos. Los apretó hasta que estuvo seguro que dejarían marcas y siguió hacia arriba hasta acunar el miembro de Hide en una mano mientras la otra le acariciaba el costado para relajarlo.

— ¡ahhh! -cerró sus ojos con fuerza y tiro de su cabeza hacia atrás otra vez; golpeándose con el cabecero de la cama- ¡ouch!

— ¿estás bien? -preguntó preocupado y vio al rubio asentir-

Kaneki dejó salir dos de sus extremidades rojas e hizo que estas sirvieran de almohada entre la cabeza de Hide y la cabecera antes de continuar con su faena. Movió su boca hacia el otro botón rosado y le hizo lo mismo que con la otra hasta dejarla hinchada y mordisqueada.

Se alejó un poco del cuerpo de Hide y se excitó con la escena que se presentaba ante sus ojos. El pecho subía y bajaba, su respiración era errática, mejillas rojas, cabello pegado a su frente por el sudor, camisa desabotonada y desalineada. Todo eso se reproducía una y otra vez en la mente de nuestro querido ghoul. Movió sus mano alrededor del miembro del rubio suavemente y lento al principio antes de comenzar a mover su mano rápidamente; sin llegar a fracturar.

— ¡k-kaneki...¡ ¡ngh! -soltaba gemidos, uno más alto que el otro hasta que se corrió en la mano de su amigo- l-lo siento -sus ojos se aguaron-

Kaneki le sonrió y lamió la semilla que había derramado su rubio en su mano antes de tomarle del mentón y besarlo lentamente, pero con pasión.

Hide se enderezó y llevó sus manos hacia el pecho de Kaneki -a través de su camisa negra- y le acarició hasta bajar a su entrepierna. Ahí apretó, ingenuamente, y Kaneki gruñó y sus dos extremidades rojas se enrollaron en la cintura del rubio posesivamente.

— ¿Kaneki? ¿Lo hice bien? -Kaneki a penas y pudo asentir cuando sintió otro apretón y luego una caricia en su miembro por su pantalón-

Maldijo en su mente y jadeó contra los labios suaves de Hide antes de alejarse y ayudar al rubio a sacar su miembro de sus pantalones -y ropa interior-  para poner su mano sobre la del rubio y ayudarlo a deslizar la mano de arriba a bajo; como quería.

Kaneki gimió y cerró los ojos ante la sensación que sentía. Hide se dejó guiar y al ver el rostro de Kaneki y las caras que hacia de placer, le hizo sonrojar e incitó a inclinar su cuerpo y acercar su rostro hacia el miembro de Kaneki. Este último abrió los ojos de sobremanera y su mirada se oscureció ante la excitación que Hide le brindaba. Dejo libre la mano de Hide y sostuvo los cabellos rubios de este antes de hacer un poco de presión para que Hide metiera su miembro en su boca, cosa que hizo rápidamente.

La calidad de su boca envolvió el miembro de Kaneki, y sus finos labios se deslizaban por el miembro y venas lentamente; de arriba a bajo. Uso un poco sus dientes para hacer fricción y escuchó a Kaneki gemir su nombre entre jadeos. El mismo Hide gimió cuando sintió la punta de unas de las extremidades rojas de Kaneki, deslizarse por su entrada.

Dolía un poco

Eso causó vibraciones por el miembro de Kaneki hasta su base, sintió la longitud moverse dentro de su boca y el cómo Kaneki hacia puños con su cabello que lo hicieron quejarse antes de sentir un cálido líquido llenar su boca y recorrer su garganta cuando lo tragó.

¡ Hasta la próxima ! 🕰

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