¿Cómo hacer un bebé?

Capítulo 9

Ya Hide se encontraba en su último mes. Habían encontrado una vivienda, cómoda y en una zona alejada y entrada al bosque. Sorprendidamente Tsukiyama, Nishiki, Yomo y la novia de Nishiki, Kimi; ayudaron en la mudanza. Kimi ayudó a Hide a instalar cosas que habían comprado para el bebé en su respectivo cuarto.

— ¿Cómo saldrá el bebé? -preguntó Kimi y vio a Hide a los ojos- ¿se parecerá a Kaneki-kun o a ti? -sonrió al ver a Hide sonrojarse-

— espero que a los dos -susurró-

Sintió unos brazos rodearle su abultada barriga y sonrió apenado al ver que era Kaneki.

— ¡Kaneki! -se escuchó la voz de Nishiki resonar en la otra habitación- Tsukiyama no está ayudando en nada -se quejo-

El susodicho solo rodó los ojos y se dedicó a limpiar alrededor de la casa. Kimi salió de la habitación para ir a donde se encontraba su pareja. Así pasaron las horas hasta que llegó entrada en la noche, en donde nuestro Hide dejo salir un suspiro pesado de sus finos labios.

— ¿tanto te irás? -preguntó algo desanimado-

— volveré pronto, además, Yomo, Tsukiyama estarán conmigo -le besó los labios- Kimi se quedará contigo, y si necesitas algo dile a Nishiki-sempai

Hide vio su reflejo en esos ojos grises que tanto le fascinaban. Sonrojado y algo apenado, llevó sus manos temblorosas hacia el rostro de Kaneki, quien tomó una de sus muñecas para besar el dorso de la mano y nudillos de esta.

— volveré por ti, y el bebé -dejó ir la mano de Hide con suavidad-

— eso espero -hizo un pequeño mohín-

Kaneki vistió su distinguido pantalón negro al igual que su calzado y camisa del mismo color. Lo único que lo delataba era su cabello blanco y piel pálida. Ya con su máscara en mano, se despidió de Hide con un beso en su frente.

— procura comer, y no agitarte -le advirtió-

— sí, sí -Hide le siguió hasta la puerta de entrada para verle ir-

Kimi y Nishiki se quedaron atrás, viendo el intercambio de palabras. Tsukiyama ya había terminado con lo que estaba haciendo afuera al igual que Yomo adentro. Con sus dos camaradas siguiéndoles, Hide vio cómo sus espaldas ya no eran visible a sus ojos. Cerró la puerta y dejó que Nishiki le ayudara a sentarse mientras Kimi le preparaba una taza de café negro con los cubitos aquellos.

Unos días pasaron, y no olvidemos que la última interacción que tuvo con Hinami, Kaneki no estuvo muy contento ¿Por qué? Ni el sabía con claridad. No se pudieron encontrar para comprarle los libros a Kaneki para su cumpleaños que se avecinaba ¿Será que el bebé nacerá el mismo día en el que su padre nació? Hide sonrió feliz mientras se acariciaba la barriga. Unas pataditas le avisaron que el bebé estaba alerta.

Bebió de su tasa de café al igual que lo hacían sus dos acompañantes. Esperaba encontrarse con Hinami mañana en la tarde. Sí, Kaneki había aceptado a regañadientes dejarlo ver a Hinami. Claro, con la condición de que Hinami sea la que lo visite por obvias razones.

La tarde paso normal, se despidió de Nishiki y Kimi para él irse a duchar e ir directo a la cama. Se le hacía difícil el caminar, más de lo normal. Había notado a Kaneki más sobre protector con el y hay que mencionar también que Kaneki le dejaba saber que rico o dulce olía en los últimos días.

Con un suspiro, dejó que Morfeo se lo llevara a la tierra de los sueños.

A la mañana siguiente, se baño, cepillo sus dientes y vistió con un hoodie de color amarillo, el cual le quedaba un size más grande, pero se sentía cómodo así. Unos joggers de color gris y unos botines marrones para cubrirlo del frío. Se coloco una bufanda alrededor de su cuello, un beanie para cubrir su cabeza y guantes para alejar el frío de sus manos. Salió fuera de la casa y dejo la puerta sin seguro para cuando Kimi viniera en la tarde por si el no llegaba a tiempo.