Clavado con chinchetas

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Cuando termino de colocar las cosas y de tomarme una Tónica (no me gusta la Coca Cola), me siento en la cama y saco los álbumes de fotos. Es la primera vez que los abro desde... desde eso.

Agarro el corcho que mi madre me ha comprado para poner mis cosas y empiezo a seleccionar fotografías. La mayoría ni las miro. Como un autómata, las ojeo muy por encima y me quedo con las que más me  gustan

Llevo ya bastantes fotos, cuando llega una que me para el corazón. No tengo muchas de cuando estuve en el hospital. Ahora soy capaz de verme desde otra perspectiva, y sólo veo una chica sin autoestima y con la absurda idea de que, si resulta agradable de mirar, podrá ser más feliz...

FLASHBACK

-¡Trágate la pastilla, Alessa!- me grita la enfermera. Cuando consigue metermela en la boca, la escupo lo más lejos que puedo. Me tienen harta. Me obligan a comer todo lo que me ponen en el plato, y los muy cabrones me ponen suficiente como para alimentar a tres malditas ballenas durante cuatro años. Me pesan a diario y varias veces al día y a mí me duele cuando me dicen que he subido de peso. Se alegran como si fuera una gran noticia. No me entienden. No se enteran de que a mí me gusta estar así.

-Hoy,  como castigo, te comes más ración.- me dice la muy retrasada.

-¡Cómetela tú, que con los michelines que tienes, se nota que te gusta comer!

Cierro los ojos y oigo el portazo. De repente recuerdo todos los insultos que tuve que escuchar: "morsa", "foca", "monstruo deforme"...

Y ahora yo le estoy haciendo lo mismo a otra persona. ¡¿En qué me estoy convirtiendo?!
Necesito salir de esa situación. Necesito salir inmediatamente.

Decido tomar una foto para inmortalizar ese momento; el momento en el que me doy cuenta de que tengo que cambiar. Cojo la Nikon de mi madre y espero a ver la luz del flash. No me importa (por primera vez en mucho tiempo) cómo salgo en la foto. Me importa lo que significa.

Voy a desafiar a la bulimia, y la voy a ganar.

PRESENTE

Regreso de mis recuerdos y pongo la foto en el corcho. Ese momento ahora también está clavado allí, al igual que es como si me lo hubieran clavado con chinchetas al corazón.

Me encantaría que me dijerais que parte de la vida de Alessa o que parte de cómo es queréis ver de manera más especial.
Me haríais un gran favor y así vosotros también podéis participar en la creación de la historia.
Si tenéis alguna crítica, no dudéis en comentar y hacérmelo saber.
Os doy las gracias por adelantado :3

Nadie dijo que fuera fácilDonde viven las historias. Descúbrelo ahora