Capítulo 14

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~ELLA~

Al despertarme no hay rastro de Tayler. Supongo que se iría pronto.
Me preparo para ir a clase, voy a la parada del autobús y allí le mando un mensaje a Tayler de buenos días.

Las clases transcurren como siempre, es decir, que me pasó la mayor parte del tiempo hablando con Maeve. Le conté lo bien que lo pase ayer con Tayler y ella me contó como le iba con Adam. Me alegro muchísimo de que por fin haya encontrado a alguien así. Maeve siempre ha estado con tíos que no le llegan ni a la suela del zapato, con completos retrasados que solo le han hecho daño. Adam es diferente, es un buen chico.

- Te apetece venir a casa a almorzar y pasar la tarde -me pregunta Maeve cuando salimos del instituto.
- No me lo digas dos veces -le digo y saco el teléfono para llamar a mi madre a quien como siempre le da igual lo que haga con mi puta vida.

Caminamos hacia Sac que, como siempre, viene a recoger a Maeve y me saluda.
Él está parado al lado del coche esperando, como de costumbre, con su sonrisa perfecta, su pelo despeinado y sus brillantes ojos verdes posados en nosotras.

- Hola -nos dice Sac cuando nos paramos a su lado
- Hoy Maddie viene con nosotros. La he invitado -le dice Maeve rápido sin darme tiempo a saludarlo yo.
- Bien, pues vamos.

En el coche, en lo que Maeve y Sac hablan, aprovecho para mirar si Tayler me ya mandado algún mensaje pero no, ni siquiera ha visto el que yo le mande esta mañana. Me estoy empezando a preocupar.
Bueno, mejor mantengo la calma puede ser que esté muy ocupado. Quiero pensar que es eso y no que le haya pasado algo.

Sac encuentra mis ojos en el espejo retrovisor.
- Maddie, ¿estás bien? -me pregunta Sac- De repente te noto apagada.
- Si si, estaba pensando. -le miento y le muestro una falsa sonrisa.
Me sorprende lo bien que me conoce Sac como para notar mi cambio de humor. Aunque a pesar de ello la sonrisa falsa parece haber colado.
Miro a Maeve que está al lado mía mirándome fijamente. Por como me mira se que nada más llegar le voy a tener que dar explicaciones. Ella me conoce mejor, con ella no coló.

El resto del camino se ponen a bromear con adoptarme.
- Imagínatelo. Serías nuestra hermana, vivirías con nosotros y yo tendría a alguien que me apoyara en las discusiones con los dos cavernícolas que tengo por hermanos. -dice Maeve con ilusión como si eso pudiera llegar a pasar de verdad.
- Y ¿quién te ha dicho que se pondría de tu parte? -le suelta Sac.
- Esta claro que se pondría del lado de quien tiene razón, ósea yo. -le dice ella haciéndose el pelo hacia detrás con una sonrisa burlona.
- Es verdad. Se me había olvidado por completo. -dice él sarcásticamente- Siempre se me olvida que mi hermanita es la persona que toma las mejores deducciones del mundo por eso a estado con tanto crack -dice él y los tres nos hachamos a reír. Maeve le da un golpecito en el hombro.
- ¡Aaah! -grita Sac exageradamente- loca que estoy conduciendo. -intents decir serio pero es incapaz.

Siempre me ha gustado como se lleva esta familia. Son siempre así, siempre de bromas hasta con sus padres. Se cuidan y se quieren entre todos.
- Fuera coñas, te quedaría bien nuestro apellido. -me dice Sac- "Madison Thomson" suena bien.
- Sí -dice Maeve alargando la i- Suena a vieja loca rodeada de gatos.
- Lo que yo decía, a mujer feliz. -se ríe Sac.
- Ya, mejor me quedo con el mío. -digo yo.
- O con el de Tayler -suelta Maeve y a mi de repente me dan ganas de estrangularla como Homer Simpson a Bart.
Sac se queda callado, traga saliva pero responde rápido:
- Uuuh ¿quien es ese tal Tayler?
- Es un amigo -le digo porque todavía no estoy preparada para decir la palabra "novio" por primera vez. Esta todo empezando.
-Yaaa, yo no lo llamaría amigo -dice Maeve.
- ¿Es el tío ese que vino el otro día a recogerte? -me pregunta Sac recordándome ese maravilloso día.
- Sí - digo yo bajándome del coche al llegar. Menos mal que ya ha terminado la conversación. Me incomoda hablar de mi vida privada o será que no estoy acostumbrada a eso de tener "novio".

Entramos en la casa de los Thomson y como siempre huele a deliciosa comida. Caminamos hasta el salón donde se encuentra Alec en el sofá y por la sonrisita que tiene intuyo que está hablando con alguien especial. Desde aquí veo a los padres de Maeve,Jane y Make, cocinando.
-Hola Maddie -me saludan al unísono.
- Holaaa -digo muy feliz de verles.

Me acerco por detrás del sofá a Alec que está tan concentrado en el móvil que no se da dado cuenta ni de que hemos llegado.
- ¿Quien es ella? -le preguntó bajito.
- ¿Cómo sabes que es un ella? - pregunta ocultando la pantalla del móvil.
- Que yo sepa tú no eres gay ¿o si? -me mira serio- La sonrisa te delata amigo. -él sonríe otra vez.
- Chicos a la mesa -nos llama Jane.

Como siempre la señora Thomson se sale cocinando, es la mejor.
- Lo siento, debería haber avisado con antelación de que venía. -me disculpo.
- No te disculpes, para nosotros siempre es un placer que estés aquí -me dice Jane tan simpática como siempre.
- Claro, además pronto serás una más de la familia -bromea Mike- ¿Ya has decidido a cual de los gemelos quieres?
- Es una difícil decisión. -le sigo la broma.
-  Si la verdad que decidir cuál de estos es menos idiota para estar con él es difícil, están muy igualados -Maeve se burla.
- Shhh... Que la espantas -Mike le hace señales de que se calle.
- Tranquilo que si no se ha ido ya, no creo que lo haga ahora.
- Tienes razón.
- Pues como siempre. -presume Maeve y todo nos echamos a reír.
- Ahora creo que la broma se nos ha ido de las manos. -le dice Mike a Maeve.
- Bueno, por si acaso me la llevo. Es mejor prevenir que curar. -dice Maeve y nos vamos las dos a su habitación.

Me empuja dentro de la habitación y cierra la puerta rápido.
- Explícame que ha pasado en el coche. -me ordena.
- Mi madre -miento- como siempre.
- A mi no me engañas. A lo de tú madre ya estás más que acostumbrada, no te afecta tanto.
- Me impresiona que todavía te acuerdes de lo del coche. Tienes muy buena memoria.
- No intentes cambiar de tema alabándome, yo ya sé que soy la puta ama. -bromea- Fue por él ¿verdad? -dice ya en tono serio.
- Si -confieso agachando la cabeza.
- ¿Qué hizo ese gilipollas? Dime para que vaya y le parta las piernas. -lo dice en broma pero ambas sabemos que en el fondo está dispuesta a ir a por Tayler, si él me hubiera hecho daño. Maeve siempre me ha defendido igual que yo a ella.
- No ha hecho nada, es solo que no me ha contestado al mensaje que le mande esta mañana y me preocupa que le haya pasado algo. Siempre es él quien me peta el móvil a mensajes y hoy ni siquiera ha mirado el que yo le mande, me preocupa. Se que está en problemas y me da mucho miedo que le hagan daño.
- Joder ¡qué bonito! -coge un pañuelo y se suena exageradamente. Y nos echamos a reír.
- ¿Y si le ha pasado algo grave? -me cuesta respirar- yo no yo no... podría soportarlo -se me escapa una lagrima.
- Él estará bien. -dice ella mientras me abraza- Tal vez esté muy ocupado.
- Quiero pensar que es eso pero algo me dice que no es así.
- Trata de ser positiva -averiguaremos que está pasando

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