Draco.
Sería mentira si digiera que tan pronto como vi a la niña no me congele.
Verla solo convertía todo esto en una terrible realidad. Realidad, para la que no estaba preparado.
Sus pisadas hicieron un pequeño eco en la sala y mi mirada de inmediato cayo en Hermione, quien me veía de la misma forma que yo a ella. Estaba aterrorizada y preocupada.
Las pisadas se sintieron más cerca y un pequeño — Hola— muy bajo se escuchó.
Ambos giramos al tiempo y nos hincamos de forma automática a la altura de la niña. Ella no sonrió tímidamente. Hermione relajo su mirada lo mejor que pudo y le dio una sonrisa tan dulce, que casi hace que olvidara el reciente shock.
— Hola, nena— su voz salió tan temblorosa y baja, que daría a entender que en cualquier momento se rompería en frente de la niña.
Trague con algo de fuerza y hable— Hola, pequeña— mi voz salió mucho más baja de lo que pretendí. — Soy Draco, y ella es Hermione— me gire a verle mientras nos presentaba— ¿Tú cómo te llamas? — centre mi vista de nuevo en ella.
La niña bajo la mirada y se mordió el labio nerviosa. Hermione le tomo de la mano y le alzo el rostro con cuidado con su mano libre.
— Isabella — fue lo que salió de su pequeña boca—...Me llamo Isabella.
Tan pronto salimos de la oficina Isabella corrió hacia donde estaba Angella.
— ¡Me voy Angella! — grito entusiasmada.
— Así es mi niña— se puso a la altura de Isabella y la abrazo —Prométeme que vendrás a visitarme pronto— sonrió y limpio una lágrima que había comenzado a resbalar por su rostro.
— Sip— rompió el abrazo y se acomodó de nuevo a nuestro lado — ponto vendré.
La mujer se levantó y nos guio hasta la salida donde nuevamente nos recordó que en los próximos meses tendríamos visitas sorpresa para ver el cuidado de Isabella, también nos recordó que en una semana tendríamos que ir al registro para hacer formal la adopción y darle nuestros apellidos a la pequeña, cosa que nos sacó de base nuevamente, nadie había dicho ese pequeño detalle, ¡definitivamente Dumbledore me debía una muy buena explicación!
— Gracias por tus sugerencias y recordatorios, estoy segura que no olvidaremos nada— agradeció Hermione de la forma menos fría que pudo, Angella le dio un abrazo, le deseo suerte y repitió el mismo gesto conmigo.
Antes de irnos note que no había ninguna maleta en la recepción, así que me voltee de nuevo a la señora — ¿Dónde están las cosas de Isabella?
— ¡Oh!, eso— rio nerviosa — Como supusimos que no necesitaba esas cosas viejas, las donamos a otros niños, ¿Por qué para que tener algo viejo cuando vas a empezar algo nuevo?
Me quede sin palabras, ahora aparte de aclarar la trampa de Shacklebolt, tendríamos que comprar todo el mobiliario que necesita una niña de dos años, ¡¿de dónde demonios vamos a sacar el dinero?!
— Oh, gracias, no sabíamos que habían donado esas cosas. En fin, nos veremos pronto Angella, gracias por todo— se despidió la castaña nuevamente y tomo a Isabella en brazos para así poder irnos.
— Hasta luego— tratando de encontrarle una lógica a lo que había pasado en la última hora.
Subimos al auto y antes de que arrancáramos Hermione se pasó para la parte de atrás y comenzó a acomodar a Isabella en el sillón.
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Un Contrato En Pañales
FanfictionSinopsis Ella llegara a sus vidas casi como un error. Bella es una niña de seis años que por asares del destino y una que otra maniobra de chantaje, será adoptada por Draco y Hermione. En un principio ninguno de los dos está preparado física ni ment...