Holmes "La Venganza de la Cazadora" [Libro 2]

Capítulo 25

Extinción. ¿Qué significa esa palabra? En biología y ecología, la extinción es la desaparición de todos los miembros de una especie. Se considera extinta a una especie a partir del instante en que muere el último individuo de ésta.

Siempre he pensado que siendo el último miembro de mi especie, ésta estaba destinada a desaparecer una vez llegara mi muerte. No es una certeza que me complazca pero no se puede evitar. Después de todo, yo soy la única que queda, la última. Tal vez sea una ley natural, no todo puede vivir para siempre. Nacemos, crecemos, nos reproducimos y, finalmente, morimos. En mi caso sobreviví a mi hijo. Algo que a mi parecer ningún padre tendría que hacer. Mi persona más amada, mi familia, mi hijo, mis amigos, mi especie. He visto como todos morían llegando a su inevitable final. ¿Ya ha llegado mi hora? Si es así lo aceptaré con gusto. Pero me llevaré conmigo a cuántos más mejor. Hay muchas personas que deben vivir muchos años después de mi partida. La nueva generación.

Para Megara las dos presencias trastocan por completo sus planes. Ni Alice podría haber predicho la intrusión de esos dos seres. El plan contra Aro se hace añicos ante sus propios ojos. Sus piernas tiemblan y por un instante flaquea ante la idea de enfrentarse a ellos. La sangre hierve ante semejante escena.

Los pasos resuenan y retumban en los oídos de la castaña. El tacto de esa piel sobre la mano de la muchacha provoca un deseo de apartarla de inmediato. Es fina pero puede sentir las suaves y diminutas escamas que recorren todo su cuerpo. Ese ser es como un enorme reptil humanoide. Pero no lo parece. Sus escamas son delgadas y tan perfectamente matizadas que no se distingue apenas de la piel humana. Son serpientes con piel de ratones.

Rémulo y Michael, ambos miembros de una especie que por lo general no se mezcla con las demás, no interactúan. Tanto es su aislamiento que Megara solo conoce de ellos por viejas historias que le contaba su madre. Ahora que dos individuos están frente a ella, no sabe qué hacer. Todo está puesto para que finalmente ella vea la muerte.

--- Pequeña y adorable Holmes, realmente es increíble lo difícil que ha resultado acabar contigo. Siempre has sido una gran escapista, pero parece que ya no puedes huir más. O quizá ya no lo deseas.

--- El pasado siempre vuelve y llega un momento en que debes plantarle cara --responde--. Supongo que ya no hay más caminos, ¿verdad? Es mejor terminar con esto. Estoy cansada.

--- Has vivido más que la mayoría. Tus ojos han visto el alzamiento de la humanidad desde que solo eran simples insectos hasta volverse como grandes gigantes --comenta sonriente Michael--. Pero el mundo cambia, ¿verdad Rémulo?

Su mano se acerca y roza los tirabuzones de la castaña. Su cabello es blanco como la nieve y sus ojos muestran unos segundos párpados que hacen que una piel ligeramente translúcida proteja los globos oculares. La tonalidad de sus iris es de un verde lima intenso, casi brillante y poco natural.

--- Incluso el imperio más brillante está destinado a caer --comenta su compañero llamado Rémulo--. ¿No crees que ya es hora de volverte cenizas Holmes?

Megara aprieta los puños y siente como su cuerpo tiembla. ¿Así se sentían sus víctimas al verla? Nunca había experimentado un miedo tan atroz.

--- ¿Qué queréis? --susurra.

Sabe que no debe dejar que los demás vean el temor en su cuerpo pero no puede ocultarlo. Después de romper todas las cadenas y, finalmente, encontrar algo por lo que vivir, va a morir.

--- Acabar con un ciclo. El mundo estará mejor sin los Alas Negras. ¿No lo ha estado durante estos siglos? Tu desaparición no cambiará nada --asegura.

--- Os equivocáis --habla Edward--. Lo cambiará todo.

El vampiro despierta el interés de las dos criaturas y ambos se giran hacia él. Megara tiembla. Si ha de morir que así sea pero que no dañen a sus amigos. La sola idea es insoportable.