cap 3

75 4 0
                                    

La joven camarera traía el fino plato del señor Brief , ella  sabía cómo tratar a sus clientes y siempre fue muy Cortés con todos ellos .

Esa era una  gran ventaja para su futuro  , ya que cuando abriera su restaurante tendría muy buena experiencia con los clientes y para su sorpresa  este hombre misterioso  era totalmente diferente a los demás .

Regularmente jamas  se involucraba en la vida de las personas  a las cuales atendía y  esa era la regla de oro  , pero este  había sido  especial . Además esa situación tan embarazosa la dejó muy pensativa , sea lo que fuese no le dio mucha importancia al asunto y solo haría su trabajo .

Para algo le daban un sueldo pensó  , se dirigió a la mesa depósito el plato ante el y con gran facilidad destapó la botella de  vino , tomo una de esas alargadas copas y lentamente le sirvió el líquido dentro de ese elegante basó .

Le acomodo los cubiertos , dio una reverencia y se fue a continuar sus labores .

Luego de acabar con todo , fue a unos de los casilleros en donde se encontraba su ropa , se quitó el uniforme y se fue .

Ya era muy tarde , pero estaba acostumbrada  a  ese horario , era parte de su rutina y siempre estaba muy preparada  para lo que sea .Bueno ese día no , hacia demasiado frío y el viento soplaba de aquí para allá .

El clima estaba empeorando aún más  y para completar se había olvidado su bolso en el casillero , tubo que correr para poder ir tras sus cosas , no fue tan fácil ir de nuevo hacia su lugar de partida , pero valió la pena por obtener sus documentos y dinero para ir en el tren.

Ya dispuesta a lo que sea , le faltaban unos cuantos metros para llegar a la estación de trenes , cuando sin previo aviso comenzó a llover a cántaros y la pobre   tubo que correr de nuevo lo más rápido  posible , asta el punto de llegar al límite de lo  que sus pobres delgadas piernas podrían soportar  , solo  para  poder llegar a un techo y no quedar totalmente empapada .

Era imposible imaginar que ella estaba pasando por estos acontecimientos inesperados , supuso que era parte de la obra de la naturaleza y aún a si se molestó con su mala suerte , ya que se corrió una maratón  completa solo para poder encontrar un techo a donde quedar .

Asta que al fin pudo observar un local de ropa que contenía un pequeño techo de madera artesanal en la entrada , pudo ubicarse sin problema en ese espacio y sin más se sentó en uno de los  escalones de ese gran edificio .

Bueno era una tienda de ropa para gente con buen gusto en la moda y con mucho dinero , era notable decir que el gran local tenía un amplio espacio para  poder atender muchos clientes .

En la vidriera se veían los grandes maniquíes que estaban adornados con finos atuendos , los cuales jamás podría comprar  con el dinero que ganaba en un año en ambos trabajos y era un hecho que tampoco era su estilo husar vestidos de marca o lo que fuera .

La lluvia seguía cayendo en las grandes calles , los autos iban a toda velocidad y las personas  caminaban a toda marcha con sus voluminosos paraguas .

Todo allí era otro mundo , otro lugar y otra era , alguien como ella no pertenecía ahí ..muchas veces fue víctima de personas que la juzgaban por ser de una clase inferior .

Pero no le importaba lo que todos pensaran de ella , solo se enfocaba en lo que realmente le apetecía y era ese sueño que desde niña le fue incorporado .

Cuando las gotas de lluvia comenzaban a ser más grandes , pan se inundaba en sus pensamientos y en su gran capacidad de imaginación , en donde ella  se ilustraba como  la gran dueña de un fino restaurante ... En donde todos sin importar la clase que pertenecían eran  bienvenidos a degustar su comida.

La camarera y el empresario despistado Donde viven las historias. Descúbrelo ahora