XXII

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— ¡Oh!

— Muevete más.

— Creí... Creí que no pasaría nada hoy — habló con dificultad mientras subía y bajaba por la extensión del Alfa — no debí, no debí confiar en ti.

— Lo estás disfrutando cariño.

— Eso no es de lo que hablo...

— Actúa ahora y arrepientete luego — Kouga salió de Miroku, lo acomodó en la cama e inició con el vaivén pero esta vez fue lento y tortuoso para el Omega.

— ¡Iaj! No seas así~ — rogó — por favor...

— ¿Dejarás de hablar?

— ¿Ahora no existe la libertad de expresióoo...? — le dió una fuerte estocada — ¡Oh! E... está bien.

— ¿Lo harás entonces?

— Solo sigueeee~.

— Así me gusta.

Rápidamente aceleró sus movimientos haciendo de Miroku un lío de Gemidos, la habitación estaba llena de gemidos, jadeos y gruñidos. El sonido de las estocadas ahora rápidas y rudas se podía escuchar por toda la casa, Kouga era muy bueno haciéndolo, pensaba el omega.

Así el Alfa siguió con su trabajo, Miroku recordó vagamente cómo fue que llegaron nuevamente a esa situación.

— El amor de mi vida se casó. Mi omega. Mi Inu.

— Kouga, deberías dejar de tomar.

— Es la última vez que lo hago...

— Deja ya de tomar, él ya no es un omega libre, podrás encontrar a uno mejor.

— ¡No hay omega mejor! El es mi vida, mi cielo, mi mundo entero, mi toooodo... ¡Oh, Pulgoooso!

Eso causó un ligero punzón en Miroku, el omega extraído no sabía porqué sintió aquello, el Alfa desastroso que estaba delante suyo; y que se había hecho su amigo; no le gustaba.

— Ya vámonos, te llevaré a tu casa.

— Dejame ahogarme en mi desgracia.

— Claro que no — tiró fuertemente de su brazo, depósito el dinero de la cuenta; que ya había pedido con anterioridad— Quédese con el cambió.

— Déjame, Miroku.

— Ya cállate y vamos.

El para nada débil Omega, llevó arrastras al Alfa y lo llevó a su casa. Sacó las llaves y se adentraron a la vivienda, subió con cuidado las escaleras y lo acostó en su cama, le sacó los zapatos y cuando estaba dispuesto a irse el otro tiró fuertemente de su brazo y empezó a besarlo. Miroku sentía que estaba en el cielo cada vez que el Caliente Alfa le besaba, intentó resistirse pero el placer y la lujuria pudieron más.

— ¡Ah~!

Ahora se encontraba disfrutando del tan exquisito orgasmo mientras el Alfa seguía dando estocadas buscando el suyo propio. Después de unos minutos lo logró, llenando el interior del omega en del líquido blanquecino.

— ¡Gh!

— Voy a arrepentirme de esto cuando despierte mañana — dijo mientras Kouga se acomodaba para dormir junto a él, abrazandolo.

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— Ni de joda me acuesto contigo, te vas a dormir aunque sea con el perro.

— No.

— Te me acercas y te corto el Mini Sessh.

Lanzó una almohada que el otro atrapó fácilmente.

— No es como que yo quiera acostarme contigo.

— ¡Menos mal! — le tiró una almohada en la cara — así podrás dormir más que feliz en el piso.

— InuYasha.

— Te jodes, no quiero verte.

Le lanzó una cobija.

— InuYasha...

— Ya tienes tu juego completo, ahora te largas...

Sesshomaru ya irritado, rápidamente se lanzó sobre su pequeño hermano y lo atrapó con su cuerpo sobre la cama y cogiendo ambos manos con las propias.

— Hm.

—Déjame... desgraciado.

— Eso te pasa por bocazas.

— Que me sueltes, Imbécil.

— No quiero ni tengo pensado Acostarme contigo, así que cálmate, no pienso dormir tampoco en esta habitación, no te adelantes a los hechos solo venía a decirte eso — se separó del menor y se dirigió a la puerta.

— Idiota.

— Si quieres que te haga mío, solo dilo.

— ¡Largate!

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Ok ok, estoy sumamente avergonzada por lo que escribí del KouMiro(?)

Waaaaa. Tragame tierra. [Un año después sigo sin poder mirar este capítulo porque #vergüenza, soy muy tímidapa estas cosas]

En fin, lo siento si no hay Eso para el SesshInu, pero vamos, InuYasha está cabreado con Sesshomaru, ¿No esperan que se entregue...o sí?

Eso no sería razonable, además de que es un omega difícil 🤣

Bueno, hasta aquí mi reporte Joaquín.

Comenten que les pareció D:

si no les gustó prometo ya no hacerlo :D

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