(Pedidos cerrados)
Apartados dedicados a chicas especiales con enfermedades y dificultades en su vida, one-shots para chicas con cáncer, deformidades, otras enfermedades, chicas que no se sienten bellas. 🌼
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(Bien, aquí tenemos a nuestra viajera mudita con unos adornitos muy chulis en el pelo :3 ¿La hice bien?)
Vuelta a lo mismo que la anterior chica mudita:
- diálogos en cursiva son los pensamientos de la chica.
- diálogos entre comillas es hablar en lenguaje de signos.
¡Espero que os guste!
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- Ailany, voy a ir al pueblo - indicó Gowther saliendo de la cueva con su chubasquero amarillo (es adorable) - Quédate aquí hasta que vuelva.
La chica salió corriendo de la cueva detrás de él negando con fuerza y los puños apretados.
- ¿No? Ah, entiendo... no te gusta que te deje sola. Lo dije por que descansaras, llevamos todo el día caminando.
Ella hizo un gesto con una mano indicando que se encontraba bien y dio una sonrisa. Gowther se transformó, apareciendo su cabello más corto y verde, y se peinó hacia atrás, bajo la atenta mirada de Ailany. A ella le gustaba más siendo pelirrosa, pero era algo que no podía permitirse pensar mucho mientras que estaba con ese muñeco metiche y fisgón de mentes. Era su secreto... junto con que le gustaba. No es fácil encontrar en el mundo a una persona que no piense que una chica humana muda es inútil para un viaje. Además, ¿Cómo no se va a hacer de querer, si incluso se puso el nombre de Alan porque era el nombre masculino más parecido al suyo?
Gowther hizo un movimiento con la cabeza y ambos se marcharon hacia el pueblo más cercano, esta vez caminando sin prisa.
- Tengo que comprar algo de comida para ti, tal vez una capucha también te vendría bien, o algo que te abrigue más... y puede que un libro.
Ella sonrió. Gowther siempre quería mirar libros y podía pasar un largo rato decidiendo, lo que hacía que tardase en volver a su hogar, y le hacía preocupar. Llegaron casi al anochecer al pueblo, y compró rápidamente algo de comida mientras él iba a una pequeña librería. Ojalá se diese prisa eligiendo un libro y no tuviese que entrar a elegirlo ella antes de hacer enfadar al librero por no poder cerrar.
Al final, Gowther salió pronto de la tienda, a la vez que el librero, mirando sus dos nuevos libros. Ailany se acercó, y él le mostró sus presas de la biblioteca.
- Mira, un libro nuevo de lenguaje de signos, lo he hojeado y hay muchas cosas que incluso tú desconoces - dijo teniéndoselo.
Ella lo tomó, acariciando la tapa. Al abrir el índice, vio ciertas expresiones que no sabía decirlas en su idioma, lo que la hizo emocionar. Abrió una página de "significado de las expresiones" y buscó una. Luego imitó el movimiento del libro con las manos.
