Destino

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Yuri había hecho muchas cosas en el pasado y cada una de ellas me habían lastimado de una manera significativa y aún así supe cómo superarlo e incluso perdonarlo pero esta vez había llegado muy lejos. El que se haya llevado lejos y sin darme una noticia sobre Alik era una cosa pero el ocultarme la existencia y sobre todo tener el descaro de hacer pasar por hija de otro a Mia había sido el colmo.

Por primera vez en mi vida estaba realmente furioso y lo único que quería era salir de ese lugar, sin saber exactamente a dónde me dirigía, solo camine mientras que trataba de calmar mis ideas y después de un rato de reflexionar lo único que quería era que Yuri Plisetsky pagará de una vez por todas todo el daño que me ha hecho.

Me dirigí a un despacho de abogados y puse en marcha una demanda contra él y según lo que me explicaron los abogados, tenía la posibilidad de ganar debido a las acciones que Yuri había cometido. Sin dudarlo un poco continúe con esto teniendo la seguridad de que lo lograría.

Casi después de una semana de esto regreso Mila de la casa de sus padres y esta vez algo se veía diferente de lo habitual ya que al aterrizar su vuelo inmediatamente quiso hablar conmigo de un asunto, según ella muy importante, así que nos dirigimos a la casa.

—¿De qué es lo que quieres hablar?— pregunte preocupado.

—En realidad...no se como decirte esto— dijo ansiosa.

—Si no te importa...necesito decirte algo primero— la interrumpí de inmediato.

—De acuerdo...entonces te escucho primero— respondió tranquila.

—Mila...no es fácil decirte esto pero...mientras tu no estabas me entere que...la bebé de Yuri y Jean en realidad es también hija de Yuri y yo— explique intranquilo de su reacción.

Ella me miró con unos ojos llenos de sorpresa, pero para mi la sorpresa era que no se veía furiosa o triste.

—Se que te engañe y me siento mal por ello...pero ni siquiera yo sabía que Mia es mi hija— me disculpe rápidamente.

—¿Qué planeas hacer?— pregunto indiferente.

—Por ahora...planeo pelear por la custodia de mis hijos— dije decidido.

—¡¿Se los quitaras?!— respondió sorprendida.

Al decir esto, su voz cambió totalmente de una voz normal a una llena de enojo y decepción.

—No puedes hacer eso Otabek...ellos aun son unos niños y necesitan de su madre— dijo enojada de mi actitud.

—¿Por qué pareces más molesta por eso que por lo que te hice?— pregunté extrañado.

—¡Porque ya sabia de eso!...¿crees en serio que nunca me daría cuenta?— confesó irritada.

Me quede congelado al escuchar eso, si ella lo sabía entonces ¿por qué quiso continuar con lo nuestro?. Solo me quede callado mientras ella continuaba hablando

—Yo lo supe desde un principio...pero aun así continúe con nuestra boda porque estaba obsesionada con estar contigo que inclusive decidí dejarlo pasar y aun así nunca pude ganarme tu amor...es por eso que me sentí intimidada con la llegada de Yuri porque sabía que no había nada con lo que mantenerte conmigo— explicó sería.

—Entonces ¿tu sabias que Mia era mi hija?— pregunté intrigado y molesto.

—No desde un principio pero haciendo los cálculos de su edad era más que obvio...de hecho no sabia cuando te darías cuenta de ello...— dijo molesta.

—Eso es de lo que quería hablar contigo...será mejor que nos separemos...al estar lejos de ti y escuchar todo esto me hizo darme cuenta que ya te supere...— pidió más tranquila.

La Primera VezDonde viven las historias. Descúbrelo ahora