La Primera Vez

¿Por Qué Ahora?

Por fin había conocido a mi hijo, después de cuatro años estaba conmigo y lo único que quería era compensar el tiempo perdido. Alik quería ir al zoológico y Yuri me dejaría llevarlo por un rato pero aun asi tenia la curiosidad de saber el porqué regreso y que es lo que había sucedido durante el tiempo que pasamos separados así que lo invite para que fuera con nosotros.

Tomamos un taxi para ir más rápido, durante el camino Alik se quedó dormido y gracias a eso pudimos hablar lo cual hizo que toda la estabilidad en mi vida se perdiera pero eso lo entendería hasta después. Comenzamos a hablar de la ocasión en que nos vimos por última vez y de cómo se había sentido el haberme visto besándome con Mila en la biblioteca.

Me hizo pensar en que es lo que hubiera ocurrido sin en vez de conformarme o pensar que solo se molestaría por un tiempo, tal vez hubiera evitado que se fuera a Rusia o simplemente hubiera tenido noticias de mi hijo y eso realmente me hizo sentir culpable pero todo cambió con lo que siguió contando.

Cosas como en que daría en adopción a nuestro hijo y después como Alik se había ganado su corazón me hicieron sentir un poco extraño ya que no estaba acostumbrado a ver como Yuri hablaba de sus sentimientos, ni siquiera lo hacia cuando estábamos mas relacionados y sobre todo cuando empezó a decir que había sido un gran error el haberme dejado provocó que comenzaran a despertar los sentimientos que tenía por él.

Para cambiar el tema le pregunté el porqué había regresado pero no me respondió me dijo que era un secreto pero ya no quise insistir para evitar otra respuesta vergonzosa, era como si el Otabek de hace cuatro años se hiciera presente al sonrojarse y apenarse de la cosas que me decía Yuri y él siempre diciendo las cosas directamente me hizo sentir nostálgico.

Al bajar del taxi nos dirigimos hacia la entrada y en ese momento Mila me llamó por teléfono, le hubiera contestado pero me distrajo ver a Yuri actuar de una manera que nunca había visto, lo había visto llorar, enojarse y sobre todo portarse de una manera apasionada y lujuriosa pero no en su faceta de madre.

—¿Quien te llamo?— preguntó sujetando la mano de Alik.

—No importa, mejor hay que entrar— respondí restando importancia, después lo arreglaría con ella.

Mencionó antes de entrar que nunca había estado antes en un zoológico así que esto lo emocionaba mucho fue entonces que decidí que haría que se sintiera feliz como una forma de disculparme de la actitud que tuve con él cuando estábamos en el restaurante.

Comenzamos con el recorrido y era como si estuviera acompañado de dos niños, ambos estaban tan emocionados con los animales, lo entiendo de Alik ya que es un bebé pero había algo diferente en Yuri era como si hubiera esperado que alguien estuviera a su lado, en ese momento entendí porque nunca tuvo buena relación con sus padres, ellos nunca se tomaron la molestia de dedicar tiempo para su hijo. Tal vez por eso Yuri era una buena madre ya que no quería que Alik pasara por lo mismo.

Al ver cómo cuidaba de nuestro hijo, cómo lo trataba con amor y sobre todo verlo tan felices a ambos hizo que sintiera una gran paz y una calidez en mi corazón, era como si tuviera a la familia que siempre desee cuando empezaba a pensar en sentar cabeza e hizo que me olvidara de todo durante el tiempo que estuvimos juntos.

Nos detuvimos en la zona de restaurantes para comer algo y descansar un poco, continuamos con nuestra plática pero estaba decidido a portarme como un adulto y no como un adolescente.

—¿En qué trabajas ahora?— preguntó bebiendo de su vaso.

—Pues ahora soy administrador en la empresa de mi padre, ganó suficiente como para mantenerme y pues ahora que voy a casarme con Mila será suficiente para ambos...¿y tu?— continúe la conversación tratando de saber más de él.

—Termine la carrera de administración ya que era la más fácil para que pudiera cuidar de Alik y ahora mis padres dijeron que heredare la empresa así que acepte— respondió indiferente como si fuera cualquier cosa.

—Creí que no querías nada que ver con tu familia— mencione ya que lo recordé repentinamente.

—Si pero lo hice pensando en nuestro hijo, quiero que tenga un patrimonio y quiero que vea a su madre orgullosamente— dijo con una sonrisa acariciando la cabeza de nuestro hijo.

Al escuchar eso algo dentro de mi retumbo y me hizo pensar que tal vez no era necesario que yo hubiera estado presente ya que estuvo muy bien sin mi, entonces no entendía por qué regresó.

—Antes mencionaste que Alik no creería lo que le dijiste sobre mi ¿a que te referías?— pregunté tratando de calmar esta sensación.

—Pues cuando empezó a comprender de lo que le hablaba siempre le contaba sobre ti, le decía cómo eras el más inteligente de nuestra clase, siempre eras amable con todo mundo además de ser una de la mejores personas que he conocido— dijo avergonzado mirando hacia Alik.

—Creí que nunca me mencionaste— dije un poco nervioso.

—Aunque hayamos terminado mal sentí que no era necesario que Alik odiara a su padre, siempre estuviste presente en mi al momento de tomar buenas decisiones para su bienestar...en sí lo único que le hacía falta era conocerte— dijo animado y feliz.

Escuchar eso me hizo sentir especial y al ver como me miraba con esos ojos verdes y brillantes, bebía un poco de té delicadamente y me sonreía mientras acariciaba el cabello de nuestro angelito me hizo darme cuenta que en verdad ya no era el mismo y sobre todo me di cuenta de que lo seguía amando como la primera vez que lo conocí.

—Ammm...¿por cierto porque le pusiste ese nombre?— le pregunté sin saber cómo continuar con la conversación.

—Ya te lo había dicho, siempre estuviste presente al momento de tomar decisiones para su bien...después de la semana que estuve con él aun seguía sin nombre así que se me vino a la mente Alik y si te das cuenta se parece a tu apellido...me recordaba a ti en todo y dije que sería un buen nombre— respondió tranquilo sin saber qué es lo que provocaría en mí aquellas palabras.

—Creo que es tiempo de regresar...ya es tarde— dije sin ganas de seguir hablando del tema ya que despertaba muchas cosas en mí.

Antes de que nos fuéramos Yuri quiso que tomáramos una foto de recuerdo así que se lo pedimos a un fotógrafo. En la foto salimos los tres y parecíamos como una verdadera familia fue un momento realmente lindo y grandioso, salimos a buscar un taxi para que regresáramos y mientras esperábamos continuamos hablando.

—Ojala pudiéramos hacer esto siempre...me gustaría que Alik tuviera la familia que yo nunca tuve...— dijo tímido sin querer mirarme.

De repente otra llamada de mi futura esposa hizo que volviera a la realidad, pensé seriamente en que no podía hacerle lo mismo a Mila como cuando éramos estudiantes, ahora somos adultos y simplemente no podía dejarla. Así que respondí, quería que nos viéramos en mi casa ya que quería pasar la noche conmigo y acepte.

—Lo siento...¿que me decías?— pregunte volviendo a tomar el curso de la conversación.

—Se que ya no servirá de nada decírtelo ahora pero...te amo y por eso te apoyare con tu nueva vida con Mila y hablo en serio— respondió decidido aunque su rostro demostraba lo contrario.

¿Por qué ahora? no entiendo porque hasta este momento decidió declararse y esta vez no podía simplemente alejarme como antes, teníamos un hijo y de alguna manera siempre estaría presente en mi vida.

—Si quieres puedes llevar a Alik contigo para que comience a conocer a Mila, solo cuidalo muy bien...a y también quedate con la foto para que comiencen los recuerdos con tu hijo— propuso en el momento en que llegó el taxi.

No quise quedarme más tiempo y hablar con él porque sentía que podía cometer un gran error así que me despedí y me marché a casa.