Superior Deku

El Festival Cultural y las Sombras del Pasado

El ambiente en la U.A. estaba comenzando a cambiar. Después de días llenos de tensión y emociones, la noticia del próximo festival cultural comenzó a difundirse por los pasillos, trayendo consigo un aire de anticipación y emoción. Sin embargo, para Izuku Midoriya, esos sentimientos se mezclaban con la confusión y la incertidumbre que había estado enfrentando desde su regreso.

La jornada de clases transcurrió con relativa normalidad. Aizawa había dado las instrucciones para el día, manteniendo la clase enfocada en sus estudios y entrenamientos. A pesar de la aparente rutina, Izuku podía sentir que algo estaba cambiando en el aire, como si una nueva etapa estuviera a punto de comenzar. Sin embargo, aún no podía sacudirse la sensación de que las sombras de los días pasados seguían acechándolo.

Al final de la clase, mientras todos comenzaban a recoger sus cosas, Tenya Iida se acercó a Izuku, con la misma formalidad y seriedad que siempre lo caracterizaban.

 —Midoriya-kun, ¿tienes un momento? Hay algo de lo que me gustaría hablar contigo.

Izuku, todavía recuperándose de la intensidad de los últimos días, asintió, notando la preocupación en los ojos de su amigo.

 —Claro, Iida. ¿De qué se trata?

Ambos comenzaron a caminar juntos hacia los dormitorios, alejándose del bullicio del aula. A medida que avanzaban por los pasillos de la U.A., Iida comenzó a hablar, su tono serio pero cargado de una emoción contenida.

 —El festival cultural se está acercando, Midoriya-kun. A pesar de todo lo que ha sucedido recientemente, la academia ha decidido seguir adelante con los planes. Es un evento importante, no solo para los estudiantes, sino también para la comunidad. Una oportunidad para mostrar lo que hemos aprendido, para demostrar que, incluso en tiempos difíciles, podemos unirnos y celebrar nuestras habilidades y talentos.

Izuku escuchó en silencio, sintiendo una mezcla de emociones. El festival cultural había sido un evento que esperaba con ansias en años anteriores, pero ahora, con todo lo que había sucedido, parecía casi trivial en comparación con los desafíos que había enfrentado.

 —Entiendo... Es bueno que la U.A. continúe con el festival, pero no estoy seguro de estar listo para algo así. Mi mente sigue ocupada con todo lo que ha pasado.

Iida asintió comprensivo, sabiendo que las heridas emocionales de Izuku aún estaban frescas.

 —Es comprensible, Midoriya-kun. Todos hemos pasado por momentos difíciles, pero creo que este festival podría ser una oportunidad para que te reconectes con nosotros, con tus compañeros. Podría ser un momento de distracción, algo positivo en medio de tanta oscuridad.

Mientras continuaban caminando, Izuku sintió el peso de las palabras de Iida. Había algo más que debía decirle, algo que había estado guardando desde su regreso. Sabía que necesitaba compartirlo con alguien en quien confiaba, y no había nadie mejor que Iida para escuchar.

 —Iida... hay algo que debo contarte. Algo que me ha estado carcomiendo por dentro.

Iida se detuvo, notando el cambio en el tono de Izuku. Se giró para mirarlo directamente, su expresión reflejando la seriedad del momento.

—¿De qué se trata, Midoriya-kun?

Izuku tomó una respiración profunda, sabiendo que las palabras que estaba a punto de decir serían dolorosas, pero también necesarias.

 —Es sobre Uraraka. Algo sucedió... algo que cambió todo. Antes de desaparecer por una semana, vi algo que... no puedo olvidar. La vi... con Bakugo. Estaban juntos, de una manera que no esperaba... Hiceron cosas que nunca pensé ver. Me sentí traicionado, destrozado. Por eso me alejé, por eso no he podido mirarla a los ojos desde entonces.