películas.

5.3K 423 222
                                    

Jisung adoraba pasar enteras sus tardes libres viendo películas. Él era del tipo de chico que le gustaba una buena película de acción, o de mafia con personas rudas de protagonistas.

Nada de terror o romance.

Cualquier largo metraje le gustaba por lo general. El mero hecho de ver una película le encantaba, pero había una condición para el joven coreano. Nada de acompañantes.

Si alguien quería ver una película con Jisung tenía que estar a cierta distancia de él y mantenerse en completo silencio, sino se cumplían esos requisitos, Jisung no volvía a ver una película con esa persona o directamente se iba sin terminar de verla.

En una ocasión Haechan quiso ver "mi vecino Totoro" con Jisung. El mayor no dejaba de reír y comentar lo tontas que eran las situaciones. El menor quería darle una bofetada para ver si se callaba, pero se contuvo y se mantuvo callado hasta el final.

Jisung no volvió a ver ninguna película con Haechan otra vez.

También le ocurrió una vez con Jaemin, quien intentó ver "el padrino" con el menor, pero al hacer una leve señal de acercamiento hacia el hombro de Jisung, este se retiró sin más y se encerró en su habitación.

Más tarde, Jisung pasó caminando junto a la tele, se dio cuenta que Renjun había ocupado su lugar y este sí dejó que Jaemin apoyara la cabeza en él.

Imposible para mí.
Se dijo en sus adentros.

Y así se mantuvo por largo tiempo. Nadie veía películas con el menor debido a sus estúpidas manías.

Pero llegó una tarde en la que Chenle, su mejor amigo, estaba viendo "Lalaland" por probablemente décima vez.

Nada más empezar la película el chino ya estaba cantando "another day of sun" entre susurros emocionado y feliz, cuando de repente alguien se sienta a su lado, hundiendo el sofá en su aciento.

-Nunca he visto Lalaland.- escuchó decir de la característica voz gruesa de su menor.

-Entonces quédate, no te has perdido de nada. Es muy preciosa...- le dijo Lele con los ojos chicos debido a la sonrisa que tenía plantada.

-Me quedaré, aunque no es mi estilo.- le respondió el menor.

Y tenía razón, no era de su estilo, pero debía de admitir que la escenografía, el guíon, los visuales y la música, eran maravillosos.

Los colores de la ropa, los lugares, las frases profundas y las tontas, las canciones pegadizas y lo más importante, las pequeñas risas emocionadas del chino que se escuchaban de fondo, hicieron que la película fuera mucho mejor.

Cerca de final, Jisung estaba tan inmerso en el drama, que no fue hasta que escuchó una respiración atolondrada, que se dio cuenta que Chenle estaba llorando.

Eran lágrimas gruesas, pero increíblemente, el chino lloraba con una sonrisa en la cara.

Preocupado, Jisung se acercó al chino y le preguntó entre susurros si se encontraba bien. Este le respondió que se acercaba la parte más triste, y volvió a respirar ruidosamente a causa de sus lágrimas.

Jisung no entendía qué tenía esa película para hacer que su mejor amigo llorara así, pero no le importó en ese entonces. Solo se acercó un poco más a Lele y lo abrazó contra sí. Le acarició el cabello mientras lo tendía entre sus brazos y el chino correspondió a su abrazo pegándose a su torso.

Chenle tenía razón, esa parte era muy triste, pero de alguna manera, Jisung estaba feliz con ese final.

Los créditos pasaron y la pantalla de la tele estaba oscurecida, pero ninguno de los dos pareció notarlo, solo estaban abrazándose y Jisung pegó su lado derecho del rostro en el cabello de Lele.

🌷Jichen drabbles🌷Donde viven las historias. Descúbrelo ahora