Cuando tomaba una ducha, Jaeden se introdujo en la habitación de huéspedes, la que ahora se había convertido en mi habitación por unos cuantos días.
Aprovecho el momento en el que mi música estaba en lo más alto para buscar entre mis cosas sin que lo pudiera escuchar.
Encontró la crema que solía usar y sin dudarlo la tomó.
Colocó unas cuantas gotas de salsa picante y lo revolvió con una cuchara hasta que no se notara ningún rastro de lo que le había echado a la crema.
Se aseguro de haberle puesto la tapa correctamente y la devolvió al lugar de donde la tomó.
Recogió la salsa y la cuchara y salió de la habitación a esperar a que probablemente le gritara por lo que había hecho.
Termine mi ducha y salí del baño ya con la ropa puesta, cepille mi cabello el cuál era un fiasco y después frote la crema en mi rostro.
-Oh, mierda- mi cara comenzaba a arder
Me acerque a la crema la cuál tenía un olor extraño. Fui rápidamente al baño a lavarme la cara y quitarme cualquier rastro de crema que hubiera, pero aún así mi cara seguía ardiendo.
Seque mi rostro y volví a la habitación, me miré al espejo y mi cara se veía muy roja. Mire el frasco de crema y acerque mi nariz, sabía que conocía el olor que estaba mezclado con el de la crema.
-Jaeden- hable lo suficientemente alto para que él pudiera escucharme
-¿Si?- se asomo por la puerta
-Ven aquí- dije -¿A que huele esto?-
-¿A crema?- dijo cuándo lo acerco a su nariz -¿Que te paso en la cara?-
Quité su mano de mi mejilla molesta -Sabes muy bien lo que le paso-
-Yo se que no- negó
-Jaeden mi cara sigue ardiendo, maldita sea- Jaeden no pudo aguantar más su risa
-Te dije que me vengaría por lo de las cejas-
-Si pero mierda, las cejas a ti no te ardían, mira mi cara Jaeden- dije frustrada
-Nadie te va a ver, estamos en cuarentena, ¿no fue eso lo que dijiste linda?-
-Agh Jaeden no-
-Mira el lado bueno-
-¿Cuál lado bueno, que tiene de bueno tener la cara roja?-
-Ahora cuando te avergüences porque te digo algo, no veré que te pusiste roja porque tu cara ya es roja- se burló
-Jaeden esto no es gracioso-
-Para mi si, pero no te preocupes, roja, verde, azul, rosa, del color que sea tu rostro te seguiré queriendo-
-Te odio- lo miré
-Me amas- corrigió Jaeden acercando sus labios hacia los míos.
-Ven, tomare una foto- dijo Jaeden al separarnos
-Nooo, para que quieres una foto de mi con la cara completamente roja-
-Sería bueno recordar tu cara roja, además Wyatt quería ver que te haría como venganza-
-No quiero recordar este momento-
-¿Porque no?, yo quiero recordar todos los momentos que pase contigo-
-Aw, te quiero besar- sonreí
-Pues no te quedes con las ganas hermosa- acaricio mi mejilla
-Aún arde- aleje su mano
-¿Ya estamos a mano?- estiro su mano para que yo la estrechara
-Pues discúlpame pero no, esto no se va a quedar así-
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