Frank me esperaba en la entrada del centro comercial con una sonrisa, me dediqué a observarlo como si fuera un cuadro renacentista mientras me acercaba, cada detalle: su cabello revuelto, sus tatuajes, su ropa, su sonrisa... traté de memorizarlo lo mejor que podía; llegando a mi casa iba a pintarlo, porque esa imagen que estaba memorizando sería posiblemente la última después de ese día.
― ¿Cómo estás?, te ves decaído― colocó su mano sobre mi hombro, quise sonreírle, pero tenía un enorme nudo en el estómago que me haría vomitar en cualquier momento.
―Estoy bien ―entramos en silencio, sentí la incomodidad y ansiedad de mi parte. Era como si tuviera las palabras atoradas en la garganta, ni siquiera podía formular un inicio, ¿qué debía decirle?, ¿"Frank, yo soy Claudia y casi te parchas a una morra con pito" y correr?, ¿qué demonios debía decir?
―Am... ¿crees que en aquella tienda encuentre algo bueno? ― preguntó con timidez, ahí noté que mi preocupación estaba callando su usual torrente de palabras.
―Claro ― en parte me estaba pensando aguantar a revelarle la verdad, digo, tomando en cuenta que Andy me había dado un espectro de tres días para confesarle mi pequeño error, ¿para qué adelantar lo inevitable?, podía decírselo luego... y empeorar el grado de reacción.
Entramos en un H&M, me resultó extraño sabiendo que era Frank quien iba a buscar algo en la tienda, pues en ese tipo de lugares compraba los outfits para Claudia, así que deduje que Frank tenía en mente algo demasiado serio para la cena que quería. No podía decirle luego, tenía que ser antes de esa cita. Me senté fuera de los vestidores para esperarlo, de cuando en cuando salía con un conjunto de ropa que le quedaba maravilloso y me preguntaba:
― ¿Crees que le guste?― y yo pensaba; "¿Gustarle?, te va a querer coger". Pero me limitaba a responder que se veía bien y ya.
―Ya me desesperaste, Gerard, ven, vamos a buscarte algo a ti para que te animes ― fue en el décimo quinto outfit que se hartó de mi desánimo y me jaló a ver la ropa de niño e-boy. ―Escoge algo, yo te lo compro.
―Estás loco, vinimos aquí por ti ― me golpeó el hombro con el puño ― ¡Auch!
―Escoge, no sé qué te haya pasado hoy, pero estás más emo que de costumbre, y si no quieres decirme está bien, pero yo vine a pasar un buen rato contigo y no cooperas, así que escoge algo de aquí, ¡y no!, de otro lado de la tienda no, porque cuando estaba buscando algo para mí te imaginé usando ropa de e-boy y supongo que te verías bien goth y asombroso, así que toma algo y lleva tu gordo trasero a los vestidores, ¿sí?, no estoy preguntando.
―Oye, mi trasero no es gordo ― hablé bajito, él sonrió con esa inocencia que tanto odiaba.
―Ya sé, pero si no te hablo feo no me haces caso ―se acercó a mi rostro ―Tienes un buen trasero ― hizo una mueca de diversión y esperó a que tomara algo. Mi yo interior me dijo que tomara la decisión de decirle la verdad, pero tomé una manga larga de rayas grande y un pants con cadenas.
Frank también tomó otro outfit para entrar conmigo al vestidor, cada quien se metió a uno distinto pero contiguo al otro. Estaba subiéndome el pants cuando la cortina del vestidor se abrió bruscamente.
― ¡A ver!
― ¡Ay, cabrón! ―me subí rápido el pants y lo vi ―Oye, así no se invade la privacidad, sonso ― dejé de fruncir las cejas cuando noté que me veía. Lo que resalto no es que me estuviera viendo, sino que no me veía como la gente ve a otra gente.
―Wow.
― ¿Wow? ―arqueé una ceja, él sonrió y me vio directo a los ojos. Era diferente, digo, ya había visto ese tipo de mirada antes, pero claramente no conmigo. Estaba tan extrañado que sólo reaccioné cuando ya casi tenía sus labios encima de los míos; alcancé a empujarlo por el pecho, sintiendo que mi pulso aumentaba la velocidad un doscientos por ciento. Frank me vio sorprendido un microsegundo, pero después se llenó de vergüenza. Ninguno dijo nada, él salió del vestidor y yo me apresuré a cambiarme con mi ropa normal, salí sin esperarlo y tomé un taxi a mi casa. Él tampoco me llamó.
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tacones |frerard
Fiksi PenggemarGerard descarga Tinder, pero su propósito no es ligar.