Salía con dirección a la cafetería, mis pasos eran tranquilos, tenía mucho tiempo antes de llegar.
Quería despejar mi mente un momento, supongo que me sentía un poco presionado por los estudios ,a veces, la ansiedad innegable me dejaba sin saber qué hacer.
Irónicamente cada vez que posaba mi mirada al firmamento las etéreas nubes se volvían melancólicas al igual que el azul del cielo,ese azul que te pide a gritos que llores, aquel azul que cada vez que lo observo , me pregunto ¿Por qué?, pregunta irrelevante y sofisticada, utilizándolo como excusa de mis delirios.
¿cambio climático?
Afortunadamente, gracias a la cafetería, el dinero no me hace falta estos días, eso es un peso menos a mis problemas y lo agradezco enormemente.
Tylor es realmente de gran ayuda, aunque a veces siento que lo agobio con mis constantes quejas y problemas. Cómo solo faltan algunos días para que sea un psicólogo legalmente, me he atrevido a contarle mí día a día, a pedido de él mismo. El realmente sabe que decir, sin embargo me he acostumbrado demasiado a sus consejos, y a veces realmente siento que me hace demasiada falta, tanto en mi semana como en mi día a día. Por eso últimamente me he abstenido bastante.
Al igual que muchas veces tiendo a enojarme por cosas realmente sin importancia alguna, soy una persona demasiado orgullosa para poder aceptar mis errores, Ty me lo ha dejado en claro en muchas de nuestras tantas charlas. El sugirió la idea de tener charlas semanales para así no poder perdernos de nada. Sin embargo las charlas semanales ahora se han vuelto mensuales, por la universidad, el trabajo, realmente ya no tenemos tiempo. Pero aun así estoy realmente agradecido con Ty por llegar a soportarme en muchos de esos casos.
Elevé mi vista al cielo nuevamente y noté que el sol se había ocultado, aun así el día sigue teniendo un poco de luz, la brisa choca con mi rostro en un ambiente dulce y relajante. Sentí algo extraño en mi pecho, un sentimiento de cálidez y presión algo inefable, algo que aún no logro saber de dónde proviene sin embargo, cuando se aleja lentamente de mi cuerpo me deja una sensación amarga en el pecho y en la garganta haciendo que todo se vuelva aburrido, tan aburrido que sólo quiero dejarlo todo.
Estaba tan sumido en mis pensamiento que cuando mi mente volvió en sí, me había dado cuenta de que estaba parado justo en frente de la cafetería.
¿Hace cuanto había llegado?
Entre al lugar y salude a mis compañeros como se debe, hoy no tenía ganas de trabajar, así que solo cumpliría con mis deberes sin más, así podría ir a casa rápido.
Me dirigí a los camerinos del lugar, para cambiar mi ropa por el uniforme, que por cierto me ha empezado agradar notablemente. El uniforme constaba simplemente de una polo blanco ligero con el logo de la cafetería y unos pantalones jean azules. Los que se encargaban de preparar las bebidas llevaban un delantal, guantes y una gorrita para que el cabello no se escape y cause una sorpresa desagradable en los clientes. Esos eran los de la cocina. Sin embargo, lo que estaban en la barra solo llevaban delantal y guantes, los de la barra preparaban bebidas básicas que no requería de muchos ingredientes a diferencia de los que estaban en la cocina de la cafetería, más que una cocina era un lugar exclusivamente para las bebidas exóticas. Requería mayor concentración, trabajo, e ingredientes, es por eso, que utilizaban esa área que era más extensa.
El uniforme era cómodo y vintage, no entiendo como no le puse un poco más de atención, era relajante y juvenil, ya que la mayoría de los empleados tenían mi edad o menos, en pocas palabras eran jóvenes.
Caminé por el pasillo en camino a las mesas de los clientes, cuando un desagradable olor se hizo presente.
sí, era el victoria's secret de mi compañera.
-Hola, buenas noches.-Saludó la simpática morena, mostrando los dientes en una enorme sonrisa.
-Hola, buenas noches, lo siento, pero debo ir por los clientes, hoy hay muchísimos.- Salí rápido antes de decir algo inapropiado y vomitar en el proceso.
Estaba tan concentrado en salir de aquella situación, que no noté cuando alguien venia en la dirección contraria a la mía siendo inevitable que chocáramos.
Mierda
De todas las personas en la cafetería tenía que chocar con quien probablemente me cortaría la paga o despediría por esto. Me tensé un poco al ver ese rostro inexpresivo que no hace más que aumentar mi irritación y colmar mi cordura.
-Si vuelve a pasar, la próxima vez no dudare en despedirte.- Genial.
-Sí, lo que digas.- ¿por qué soy así?
-Cortarte la paga no te vendría tan mal.- Dios, ayúdame.
- ¡Lo siento! ¿Estas bien?, ¿Te duele algo?, ¡Ven que te limpio la ropa!
-Ya déjame y vuelve a trabajar.
Bufé y fui por los clientes. Me acerqué a una de las mesas, donde se encontraba una bonita chica de ojos grandes y sonrisa cálida, su piel nívea parecía suave a simple vista, y su cabello rubio caía por sus hombros. Vaya que era muy linda.
-Buenas noches ¿Qué desea ordenar?- Sonreí lo más amigable posible, quien sabe la vuelvo a ver y la invito a salir.
.Si, hmn, un Caramel Frapuccino por favor.- Excelente elección.
-Enseguida.- Sonreí aún más, me dolerá en el rostro después.
Después de un par de minutos entregué el pedido a la joven y me retiré. La observé a lo lejos, tomaba tranquilamente mientras hacía algo en su teléfono. Voltee a otra dirección y me encontré con Levi observándola fijamente, no lo culpo es una chica muy bella pero, con esa expresión neutra la espantaría. Sacudí un poco la cabeza para evitar esos pensamientos, no quería que me dé un ataque de risa imaginando la situación.
Muy tarde
Me reí de la nada, muchos voltearon a verme y entre ellos la cara de ''Te voy a despedir, compórtate.'' de Levi, me disculpé y fui por un vaso de agua, tenía que contrólarme.
Ya eran alrededor de las 10:30pm. Salí para seguir tomando órdenes, pero, curiosamente no había nadie.
Me tensé al pensar en lo que estaría pasando como en la última vez. Salí y me encontré con un túmulo de gente, estaba sudando frío, extrañamente tenía miedo y mi piel se erizó. Observé donde todos tenían la atención y en efecto. Tragué duro.
Era la bonita chica de hace unas horas, yacía tendida en el suelo, su piel blanca resaltaba los golpes por todo su cuerpo.
Dijeron que la estrangularon, ¿Cómo es posible que nadie se haya dado cuenta?- Necesito respirar.
Lo único que pude hacer era entrar en la cafetería y calmarme un poco, todo era tan extraño, me estaba alterando. Sentí un fuerte dolor en la cabeza, la migraña había regresado y todo comenzó a dar vueltas, vi a Levi venir hacia mí, me asusté un poco pero todo estaba tan borroso y no podía pensar con claridad.
Luego todo se volvió negro.
°
°
°
°
¡Hola!... bueno quería interactuar un poquito aquí, ciertamente estos primeros capítulos serán algo cortos. esta historia es una colaboración(? es algo inusual pero, el perfil me pertenece tanto como a la segunda autora. Decidimos colaborar por que solo quisimos y ya :U.
pensabámos poner una nota antes pero sinceramente no sabíamos que poner ;_;
cualquier duda solo pregunten(? jsjsjs
por cierto soy lali y la segunda autora es Ali, solo para que lo tengan un poquito claro.
Los JOvenciTOS tendrán más interacción tranquis y por favor sean pacientes con el "papapa" :D
sin más tomen awa y quiéranse mucho.
gracias por leer <3 :"U
Lali~
ESTÁS LEYENDO
TU ETÉREA MIRADA
De Todo''Aunque no vaya al cielo, si estoy contigo me sentiré en el.'' Dijo Gabriel con la mirada hacia el firmamento y con el corazón fuera del cuerpo, fuera del alma, pues este ya no era suyo. Su corazón al igual que él mismo, cayeron por la misma mirada...