2 Semanas

Capítulo IX

Día 9: Ser más fuerte

Orihime se despertó temprano, tal vez demasiado, el sol aún no salía, ilusionada por ¿el beso de Ulquiorra?, caminaba cómo flotando entre las nubes, se metió a bañar tarareando canciones que sólo ella entendía, cuando se levantó el arrancar, quien tocó la puerta del baño, al no recibir respuesta se metió y se llevó una sorpresa, a Inoue cantando dulcemente en el agua, por un segundo no reaccionó, se quedó inmóvil viéndola, cuando optó por salir, la chica lo atrapó.

- ¡¡Ha, ha, ha!!, jo... joven Ulquiorra... ¿qué... qué hace aquí? - dijo la mujer

El arrancar estaba de espaldas a punto de salir, pero al ser sorprendido decidió contestar.

- Toque la puerta, nadie respondió, así que entre... - respondió a la de ojos grises

- Bueno, yo ya terminé... ya puede bañarse, yo me voy... a...a vestir... en mi cuarto - le comento la sonrojada chica

Apenas envuelta en una toalla la pelirroja camino junto al ojiverde para salir.

- Eres muy distraída para ser tan bonita... - dijo el pelinegro cuando la mujer salía de ahí, eso la abrumo se sonrojo igual que una cereza

El caballero sonrió, se dio media vuelta y se dispuso a bañarse, la apenada chica se puso un sencillo vestido casual, no saldrían a pasear ni a comer, sólo a entrenar, así que algo cómodo era suficiente. Se dirigía a la cocina cuando la interceptó el espada.

- Deja que yo lo haga... - reprochó el ojiverde

- Pero usted ya hace tanto por mí... - dijo sonrojada la mujer

- Ya te lo había dicho, lo hago porque quiero, además no sabes mucho de cocina... - dijo el pelinegro

En algún punto fue agradable su amable atención y en otro fue un poco ofensivo su comentario. El arrancar preparó un desayuno ligero pan francés con una ensalada de frutas y té verde, sus brillantes ojos esmeralda la cautivaban, su suave loción inquietante, sencillamente le gustaba estar cerca de aquel frío caballero, pero "¿sólo por atracción física?, ¿sentía algo más que una amistad por el joven Ulquiorra?" , pensó mientras comía, hasta que el pelinegro interrumpió su idea.

- Vamos, tienes que practicar... - dijo serio el hollow, que ya se transformaba

- Si joven Ulquiorra... - contestó la de ojos grises

Ambos partieron hacia ese lugar de penumbra, está vez no empezó con su cola sino con las arpas de sus manos, pese a lo agresivo de sus ataques Inoue de a poco fue deteniendo los golpes, después el ojiverde uso sus piernas y sus alas, haciendo retroceder a la pelirroja, sin embargo el espada no cedió, continuaba atajando el escudo de la chica, en un momento con las garras de la mano rompió la barrera, cayendo la mujer, esta cerró sus ojos.

- Joven Kurosaki... - dijo la de ojos grises

El hollow sin moverse la miró ahogado su coraje, aún con su mano extendida para que ella pudiera levantarse, pero cuando la pelirroja abre sus ojos y observa el gesto del espada, se da cuenta de su error.

- ¡¡Aquí no está Kurosaki Ichigo!!, ¡si yo fuera un enemigo de verdad hubieras muerto sola!, ¡realmente creíste que iba a hacerte daño!, ¡¡entonces mentiste mujer!!, ¡mentiste cuando dijiste que no me temes! - dijo con rabia el arrancar