𝐎𝐍𝐄 𝐒𝐇𝐎𝐓𝐒||The Walking Dead

someone good with a bad heart pt.5

SOMEONE GOOD WITH A BAD HEART

Hora de la muerte...

Hora de la muerte...

Hora de la muerte...

Hora de la muerte... 8:17

-Cuatro cirugías, cuatro muertes y el día apenas empieza. -comentó George, cerrando su casillero.

Alexa bufó cansada, pues aquello era verdad. Ella había asistido a Burke en un reemplazo de válvula, la cual fue una de esas cuatro cirugías . Así que sí, fue participe del descenso de una de esas cuatro personas.

Recogió una manzana y se dispuso a disfrutarla mientras Meredith y Cristina se colocaban el unirforme.

-Hablé con el encargado de la morgue. -comentó, con la boca llena.

-¿El que tiene una ceja? -cuestionó Mer, estirando sus medias hasta sus pantorrillas.

-No, el que tiene algo en los dientes. Y dijo que las muertes en cirugía vienen entre tres y siete. Dice que morirán tres antes de la noche. -reveló.

-¡oh! Está bien, ya que el experto lo dijo...-espetó Cristina, con su particular sarcasmo.

-Está en la morgue, él sabe cosas sobre la muerte. -recalcó Alexandra, con un toque misterioso en sus palabras.

Luego de oir una leve charla en la que Meredith se quejaba porque George no le hablaba, Alexa sintió que alguien tocaba su hombro, por lo que se vio obligada a voltear. Karev estaba ahí.

-¿Qué? -preguntó amable; no obstante, seguía furiosa con él.

-¿Te saliste a escondidas anoche? -

-Si, yo... No podía dormir. -mintió.

Bailey ingresó a los vestuarios.

-Vamos. A urgencias. Hubo varios descensos. Tenemos que salvar una vida. -

[•••]

-Taquicardia sinusal, fiebre leve, oximetria de pulso: 75.- indicó Karev, frente a la computadora mientras que Alexandra se concentraba en oir los pulmones del azabache.

Tras ser notificados con una alerta de Negan, la rubia no dudó en correr a atenderlo, peleando un poco en Alex durante el camino; sin embargo, al ser ambos encargados del caso, no tuvo otra más que cooperar por el bien del paciente.

-En tus pulmones oigo estertores. - comentó Alexa, preocupada.

-Si... Como si los atravesara un tren. -acotó Negan, con su respiración acelerada.

Al quitó las ojivas de sus orejas.

-¿El dolor es fuerte? -cuestionó la rubia.

-No lo sé... Cinco o seis cuando respiro. -

-Siete u ocho cuando no quiere impresionar a su doctor. -agregó Karev, cínico. Alexandra se abstuvo de golpearlo, y rodeó la camilla, yendo hacia el monitor.