Sakura
Mis uñas se incrustan en su espalda con cada embestida que me propina, él me derrite y hace que vuele a la deriva, perdida en la intemperie en un mar de placer. Su falo llenando mi interior, bombeando con dureza y cuando me voltea, y choca contra mis glúteos mientras se mueve una y otra vez, sonrió, y la calma por lo que me hace falta aparece, momentáneamente.
Vestidos salimos de aquella casa con paredes de cristales y caminamos a la orilla de la playa, nos recostamos en la manta observando el cielo lleno de estrellas y nuestras manos se entrelazan.
- ¿Crees que Sasuke ahora es una estrella? -Él pregunta.
Pensar en ello a pesar de los meses que han pasado sigue haciendo que una opresión se situé en mi pecho. Lo cause, mi cuerpo y mi alma están rodeados de muerte.
Lo dejamos en el hospital, Naruto lo arrastro hasta dejarlo a pocos metros de la puerta, nos marchamos, yo conducía y el rubio se perdió mientras veía por la ventana, impávido. Y yo, viendo como todo llegaba a su final, decidí hacer lo que tuve que realizar desde que llegue a Konoha, entregar la información y reclamar el dinero.
Huimos con el fantasma de Sasuke, su presencia en cada palabra y acción. El dinero que conseguí fue suficiente para viajar a otro país. Después de llamar a mis padres y amenazar con contar todos los negocios sucios que tenían, conseguimos otra vida.
¿Perdone a Naruto por lo que hizo?
Culpar a Naruto por algo que yo cause, jamas fue una opción.
¿Me perdono a mi misma?
No creo que exista perdón para todas las muertes que cargo en mi espalda. Acusándome a diario, señalándome y haciendo que me odie. Ensombreciendo cada día más y más mi alma. Mi último recuerdo que atesoro de él, es aquella vez que nos besamos, esa noche que me ofreció algo llamado libertad.
El día en que todo se rompió actúe por puro instinto con el deseo egoísta de que él me amara, y ahora mis pedazos sangran, y me desgarro cada día un poquito más. Entonces recuerdo, que soy todo lo que tiene Naruto, y le debo, le debo todo lo que le fue arrebatado por mi culpa.
Naruto
Cuando Ino me envió la fotografía de Sasuke por whatsapp, no pude entender que fue lo que sentí ¿Alivio, enojo y nostalgia? ¿Cual es la palabra para englobar todos esos sentimientos?
Ella duerme, su espalda desnuda cubierta por las sabanas. Es mía, completamente mía, ni siquiera tiene un celular para comunicarse, tiene una laptop en la que a veces escribe cuentos infantiles, pero por las repercusiones que teme las redes sociales no existen para ella, o es lo que he visto cuando reviso su computador. Soy su todo y ella el mio. Estoy bien con esto. Ella existe, y eso me llena.
Me alivia, y calma.
Es como si nunca se hubiera marchado, como si todo lo demás nunca hubiera existido, y un fin de semana próximo la llevare a saludar a mis padres. Ellos estarán felices de que Sakura sea parte de mi vida; desde que la vi, yo sabia que ella seria mi esposa y el anillo en su dedo es la muestra de que esto es real.
Mantengo mis ojos en el celular, su número esta en la pantalla, salgo de la habitación y paso por el salón para llegar a los sofás con vista al mar. Presiono llamar. Un tono tras otro y luego silencio.
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Inolvidable (Finalizada)
FanficMi total agradecimiento a @Annette-san quien se encargo de realizar la portada, separador y banner para está historia ♡ Sakura dejo Japón cuando tenía 12 años, una reciente invitación al reencuentro con sus antiguos amigos de infancia no deja de dar...