Capítulo 48

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La idea de pedirle a sus padres un auto rondaba en su cabeza desde que dejó el colegio y ninguno de sus amigos, e inclusive su prima, decidieron ir con él. Esos tres individuos al parecer tenían cosas más importante que hacer que pasar un poco más de tiempo con él, por lo que le quedo regresar a su casa sólo.

Tenía dos opciones, ir al centro comercial sólo o regresar a su casa para estar sólo, al final en los dos estaba sólo.

Volvamos a casa, el lobo anunció repentinamente levantando sus orejas como si percibirá algo.

Jimin dudo un momento en regresar a su hogar para aburrirse sólo, pero en parte tampoco quería andar solitario por las calles. Además, el clima estaba repentinamente nublándose, como si fuera a llover, apenas hace unas horas estaba despejado. El clima era tan cambiante.

Para tranquilidad del lobo, comenzó a avanzar hasta la parada de autobús, su casa no se encontraba tan lejos ni cerca, pero con la clara señal de que llovería no correría el riesgo de caminar para llegar todo empapado. Lo menos que quería era pescar un resfriado.

Al ingresar al autobús, este se hallaba semi-lleno, casi al instante en que el vehículo se puso en marcha comenzó a llover, aumentando a los pocos minutos.

Ver las gotas de lluvia caer por la ventana cerrada le produjo ciertos recuerdos no tan gratos para él, el sentimiento de añoranza oprimió su pecho.

Un día lluvioso como este, él discutió con Taehyung.

Un día lluvioso como este, se le declaró Taehyung.

Un día lluvioso como este, rompió el corazón de Taehyung.

En conclusión, ya no le gustaba los días lluviosos porque muy posiblemente terminaría recordando la expresión destrozada que Taehyung le dio.

Volver al pasado era lo que cualquiera deseaba para corregir sus errores, y Jimin era una de esas personas, retroceder el tiempo y evitar sus actos. Pero por muy extraño que parezca, ahora comprendía que gracias a esos errores él pudo descubrir sus verdaderos sentimientos. Quizás si nada de eso hubiera sucedido, él muy probablemente aún estaría aferrado a la idea de que Jungkook era quien le gustaba.

Lastima que para descubrirlos tuvo que lastimar los sentimientos de Taehyung.

Ya llegamos, su lobo ladro emocionado.

Jimin pestañeo algo desorientado, viendo a través de la ventana empañada la parada en donde debía bajar, al percatarse que el autobús cerraba sus puertas grito para avisar al conductor que bajaría. Entre riñas del conductor por andar perdido en las nubes, bajo, disculpándose hasta que las puertas se cerraron y el autobús avanzará.

"¿Y ahora?" Se preguntó a sí mismo, la lluvia parecía no disminuir y aún le quedaba tres cuadras para llegar a casa. Si esperaba a que la lluvia se detuviera corría el riesgo de quedarse horas, y si corría hasta casa llegaría todo mojado y temblando de frío.

Un suspiro desanimado escapo de sus labios, la idea de quedarse ahí hasta congelarse el trasero no le gustaba, y la idea de llegar a su casa todo mojado tampoco, pero al menos en la última alternativa sería minutos en los que se congelaría.

Aferró sus manos en las correas de su mochila y giro en dirección a su casa dispuesto a tomar impulso para correr, sin embargo, no logró dar ni un paso en cuanto un cuerpo frío impacto contra él y lo aprisiono rodeando su cintura con fuerza.

La tensión en su cuerpo se extendió produciéndole escalofríos, no solo por el frío que comenzó a calar en su piel al sentir sus prendas humedecer poco a poco, sino por tener a un completo desconocido abrazándolo.

No es ¡CIERTO! ||VMIN||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora