Mi Pasado Obscuro

capítulo X

Trataba de encontrar las palabras correctas para rechazar esa salida pero no las encontraba así que decidí recurrir a mi mejor amiga.

- oye puedes decirle a Sam que venga un momento.

- claro Tamy- dijo con una gran sonrisa

Ví como Magui salía y me quedé hundida en mis pensamientos, como podía explicarle que mi vida no es como la de otras chicas, cómo podría contarle todo lo que un día viví como?

- me llamaste Tamara ?- pregunto  llevándose una paleta a la boca

- su amiga necesito de tu ayuda- dije con calma 

- que es lo que sucede ?- pregunto un poco curiosa

- nada grave solo que el señor Josh me invitó a una cita y el muy imbécil no tomo un no por respuesta- dije con el señor frucido

- ve total nada pierdes tal vez el sea el hombre que buscas- encojiendose de hombros

- no lo creo yo busco un caballero no un troglodita que no deja que tome mis decisiones propias- dije con el ceño fruncido

- tal vez lo hizo por qué las dos veces que te ha invitado a salir tú lo has rechazado, date la oportunidad y si no funciona pues ahí está Samuel, que pensándolo bien no está mal- dijo tomando un alfiler 

- tranquila Sam necesitas bajar un poco tus hormonas o terminarás cojiendo con el intendente de nuestro edificio- dije conteniendo la risa

- hay que asco, está bien que sea un poco ninfómana pero no es para tanto- dijo riendo 

- está bien lo siento- dije riendo y tratando de tranquilizarme- no se me siento insegura siento que no soy una mujer qué valga la pena- dije bajando la mirada

- mira tú vales mucho, eres fuerte y tenaz y cualquiera que opine lo contrario le meteré mi pie por atrás- dijo lanzando una patada al aire

- gracias amiga eres genial te quiero- dije sonriendo 

- lo sé soy única - dijo mientras ponía su mano en el pecho- ahora hay que seguir trabajando que aunque Kate no quiera no debemos perder tiempo- dijo levantándose

Pasaron las horas y seguia mi trabajo, sola completamente en el silencio de aquel taller caí en cuánta que no había dicho día ni hora en que saldríamos y una luz de esperanza llegaba a mi, tal vez lo olvidaría y si era así me alegraba, hasta que el sonar de mi celular me saco de mis pensamientos, ví la pantalla y era un mensaje de texto de un número desconocido pensé en ignorarlo pero me gano la curiosidad.

* Soy el amor de tu vida linda así que guarda el número que fue muy difícil conseguir el tuyo
Enviado 5:25 pm
Visto   5:30 pm

* Basta de bromas quién es usted

Visto  5:31 pm 

* Ya te dije soy el amor de tu vida, solo que tú aún no te das cuenta

Visto 5:31 pm

* Al carajo dígame quién es si no quiere que ahorita mismo lo bloqueé

Visto 5:32 pm

* Jaja soy Josh te veo mañana a las 8:00 pm

Visto 5:32 pm

* Está bien que opción me queda

Visto 5:33 pm

* Ese tono no me gusta podrías mostrarte un poco más feliz?

Visto 5:33 pm

* Está bien Yupi!!! Lo veo mañana señor Peterson

Visto 5:34

- rayos aparte de hermosa eres bromista, justo como me gustan, te dejo te veré mañana paso por ti a tu casa , ya que también tengo tu dirección

Visto 5:34

Rayos no supe cómo diablos había conseguido la dirección, solo me quedé en silencio no sabía si mandarle un mensaje preguntándole como la obtuvo aunque ya sospechaba quien era la culpable.

(....)

Al fin llegamos a casa mi amiga cómo de costumbre se tiró en el sillón y comenzó a quejarse de los clientes que asta por un simple centavo reclamaban.

- esas personas que solo por un centavo se molestan, me llenan el hígado de piedritas- dijo extendiendo los brazos en el respaldo del sofá

- tranquila solo no los tomes en cuenta- dije mientras cocinaba

- para ti es fácil pero con mi temperamento olvídalo les arrancaría la lengua para que dejarán de hablar- levantando levemente la cabeza y suspirando 

- ya mira te prepare unos huevos para la cena no hemos ido a hacer la despensa- dije mientras llevaba dos platos en las manos

- es cierto iremos ahorita mismo quieres ?- dijo levantándose

- ya es tarde me da un poco de miedo sabes ???- dije mientras ponía los platos en la mesa

- vamos Tamy no creo que el maldito se atreva a atacarte si estás juntos mi- dijo mientras se sentaba frente a mi

- mm esta bien- llevándome un trozo de comida a la boca

Comimos tranquilamente y el reloj marcaba las 8:30 así que limpiamos y salimos de apartamento rumbo al supermercado en donde nos adentramos en los pasillos buscando lo que comeríamos en la semana, no sé por qué pero me sentía un poco intranquila pero no quería demostrárselo a mi mejor amiga.

- que te pasa Tamara ?- pregunto

- nada solo apresuremos esto quieres- dije mientras empujaba el carrito

- si está bien pero estas un poco rara- del hotel frunciendo el ceño

- no me hagas caso, sabes que suelo ser muy nerviosa- encojiendome de hombros 

- lo sé, yo en tu lugar jamás saldría de casa- dijo mientras caminaba

Compramos lo necesario y decidimos regresar lo más pronto posible a casa.

(.....)

Al querer meter la llave en la rendija la puerta se abrió sola entramos y estaba en total obscuridad, Sam movía con el dedo arriba y abajo el interruptor pero no había señal asta que encendió la lámpara del celular y nos llevamos una gran sorpresa.

- Tamara qué pasó aquí?- dijo abriendo los ojos

- no lo se intenta prender nuevamente la bombilla- dije desesperada

- no enciende!!!, Carajo!!-Grito Sam

- es demaciado extraño todo esto- dije con voz temblorosa

- lo se, enciende la lámpara junto al sofá- dijo señalando con su dedo índice mientras ella recorría la casa

- si- asentí y me dirijo hacia la lámpara y se iluminó un poco aquella sala la cual estaba echa un desastre

- o por dios!!!- grito desde la cosina con la cara llena de una gran sorpresa

Yo me encontraba viendo cómo
Los muebles estaban totalmente destrozados incluyendo las bombillas, las fotos colgadas en la pared estaba por el suelo totalmente quebradas y al escuchar el grito de mi amiga no dude en correr hacia donde ella estaba, por lo que pude ver unas letras enormes pintadas en la pared.

Morirás Tamara

-Pero  que demonios es todo esto- dijo Sam llevándose las manos a la cabeza

- yo...yo sé quién es....nunca podré escapar de el- mis lágrimas comenzaron a caer por mis mejillas y caí de rodillas al suelo

- tranquila Tamara no pasará nada, ese monstruo jamás te pondrá una mano encima

Podía escuchar la voz de mi amiga pero nada de lo que dijera me tranquilizaba, sabía que la única manera de terminar con todo esto sería que yo muriera.