Una llegada inesperada

Mi Radar Fallo

María José despierta – escuchaba a lo lejos – ya termino todo, ¿Recuerdas a que venias?

Supongo que me hicieron esa pregunta para traerme de vuelta a la realidad, cuando levanté un poco a cabeza, tenía sangre a lado de mi boca o donde antes estuvo mi boca, no me dolía nada, solo hice una pregunta y la que me interesaba más: ¿Tenía muchas piedras?, el doctor solo se rio y me dijo: “No creo que tengas dolor en un buen rato”. Llegaron dos camilleros y me cambiaron de camilla para llevarme a la entrada, escuché que el doctor dijo que mandaran a traer a mi familiar; cuando vi entrar a mi mamá sentí una paz enorme.

Cuando ya pueda pararse y sienta que ya no esta anestesiada puede irse – dijo el enfermero enseguida que me estaba quitando el catéter – Respira hondo.

Cuando dijo eso me reí y en mi cabeza le contesté: “Estoy anestesiada no siento nada, tu quítalo”, no sentía dolor alguno, así que me pare como si nada que hasta me sorprendí y le dije a mi mamá ya vámonos estoy bien, me cambie, camine como si nada; mi mamá pregunto si podía comer algo porque ya tenia que estaba en ayuno, a lo cual dijeron dieta blanda, si puede una gelatina ahorita mejor y algún jugo eso le ayudara.

Llegamos al hotel donde nos quedaríamos, en ese momento, lo único que quería era comer, así que destapé la gelatina y fue lo mejor que había probado, para que entiendan el sabor tan rico que le encontre a esa gelatina, imagínense por un momento que estan comiendo su comida preferida con una coca cola a lado.

Como toda buena mexicana tenia que subir a mi estado que había logrado una más, respecto a mi operación cuando de repente me llega una notificación de Classroom donde la profesora subió las calificaciones del extraordinario, lo cual en ese momento la realidad volvió a mí, revise y bueno me quede en 69, para pasar tienes que sacar un 70, estaba triste pero siendo sincera mis amigos se habían rifado, ellos habían casi pasado mi examen me quede a uno, les avise a mis amiguitos que ya había salido de la operación, le mande mensaje a Sofia y a Karla diciéndoles que todo salió bien, estaba mensajeándome con ellos cuando me llego el mensaje de Grecia, en ese momento olvide todos mis otros chats.

G: ¿Como sigues?

MJ: Pues acabo de salir de la operación sigo viva.

Hablamos de nuestras familias, de como se realiza la CPRE, lo que sentía después de la operación, lo cual creo que la anestesia ya estaba pasando, empezaba a sentir un calor en la parte de la espalda y la garganta me empezaba a arder, intente no darle importancia, hablamos de nuestra dieta tan espectacular que se tiene, aunque ya podía comer aun no puedo comer de todo ya que aun no me quitan la vesícula, pero al menos ya no tendría el dolor en la espalda; cuando de la nada hubo un mensaje que me hizo sentirme tan bien.

G: Nunca pensé decirlo, pero te extraño.

MJ: JAJAJAJA vez te hacia falta yo en tu vida para que fueras feliz – sentí nerviosismo al escribirle eso, pero la anestesia me ayudaba.

G: La neta que si ☹

MJ: A ver cuando te vuelvo a ver, ni creas que te desaparecerás.

G: No pensaba hacerlo – añadió el Emoji de ojos de huevo – Es más fácil que desaparezcas tú.

MJ: Mas te vale, vamos por un helado, tengo antojo, y no me desapareceré, estoy cerca puedo escaparme para venir a verte.

G: Me abandonaras cuando regreses a tu escuela – En serio no se si estaba mal por tanto días sin comer o era en serio que ¿esta chica me estaba coqueteando?

MJ: Tengo que regresar a terminar mi pinshi carrera, pero puedo regresar a verte.

G: Conste, me tengo que mantener viva hasta que regreses – bueno ahora sí creo que está coqueteándome.