Una llegada inesperada

No Todos Provocan Lo Mismo

Cuatro meses antes de que sucediera el primer encuentro con Grecia, estaba conociendo a una chica y la mencione anteriormente es Sofia, cuando comencé a hablar con ella en Facebook sentí una conexión fuerte y considero que no con todos se da esa conexión a la primera; recuerdo la primera llamada aclaro nunca la había visto en persona así que se podría decir que no se tiene tanta confianza con una extraña a la primera pero esa llamada duro una hora y treinta y tres minutos, reí mucho después de tanto tiempo con una persona y siendo una persona el motivo; para ser sincera he estado soltera por siete meses y entre más tiempo estoy sola menos quiero una relación. El punto es que cuando conocí a Grecia, Sofía aun estaba en mi vida y se preocupaba mucho por mí, es una mujer ocupada, ya tiene su carrera termina así que ya trabaja, pero joder es la tipo de chica que vas buscando por la vida porque sabes que puedes tener algo estable con esa persona, que sabes que no te fallaría porque entiende perfectamente lo que es que te jodan el corazón cuando estás dando todo, es esa chica que cuando miras el meme de mujer soltera, responsable y ha superado a su ex, te voy a encontrar, pues si, la estás viendo a ella.

No culpo a nadie de lo que me pasa, siempre he tenido la certeza que el corazón no se manda y menos cuando llega una chica que no necesita presentación para decirte no intento conquistarte, pero terminaras siendo mía y lo confirme con su mensaje.
G: Saliendo del hospital le dije a mi amigo, la chica de mi lado me gusto. – Bueno aquí es donde a comprobé que si te da un mini infarto porque la persona que te gusta dijo que le gustas.

MJ: ¿Por qué no me dijiste oye me gustas?

G: Tampoco soy tan aventada, además creo que te tire las suficientes indirectas, yo solo tiro el anzuelo discreto.

MJ: ¿Y no notaste que yo te estaba tirando la onda?

G: Realmente no Jajaja.

Ella seguía en el hospital por lo visto se iba a quedar más días de lo planeado, me dejo de contestar así que supuse que se quedó dormida, más tarde le escribí.

MJ: ¿Cómo sigues bb?

G: Buenas tardes, Grecia no puede contestarte en estos momentos, soy su mamá – Me puse nerviosa, se imaginan que la mamá de la que te gusta te responda, sabiendo que arriba de ese mensaje hay otros mensajes que te comprometen, vaya impresión que ya dejé.

MJ: Pero ella ¿está bien?

G: Si, le están realizando unos estudios, dependiendo de los resultados le dirán si se va de alta o se tendrá que quedar más tiempo.

MJ: Esta bien, muchas gracias, que tenga buena noche.

No se si nunca les ha pasado que conocen a alguien y aunque no llevan tanto tiempo tratándose en serio te importa, te preocupa, quieres saber de ella, porque a mi me estaba pasando. A la mañana siguiente me escribió, diciéndome que se quedaría mas tiempo ya que la pancreatitis estaba muy avanzada, así que tenían que realizarle la CPRE con algo de urgencia, ya que estaba peligrando su vida; he recibido malas noticias pero son pocas las que me afectan realmente, así que en todo ese tiempo que estuvo en el hospital no hubo día que no le preguntaba como seguía, como se sentía, no podía estar cerca de ella físicamente pero en serio quería que notara que no la dejaría sola y se lo demostré los ocho días que estuvo en ese hospital, realmente no se como demostrar tanto mi afecto hacia alguien que me importa, porque hace mucho deje de hacerlo; después de un corazón roto las personas cambiamos para bien o para mal, el daño esta hecho, así que en mi caso deje de demostrar lo mucho que alguien puede importarme o puede gustarme, creo que la forma de demostrarle a alguien lo mucho que te importa es dedicándole tiempo, seamos sinceros si estas en la escuela, los recreos, horas libres son para poder desayunar, estar con amigos, terminar tareas, etc. Y que tú le des ese tiempo a alguien, sinceramente si no lo ve como la demostración mas grande, que se joda, te mereces a alguien que pueda entender que no se necesita siempre presumir a alguien, que no solo es besos, sexo, salidas juntos.

Subió un estado Grecia donde decía si alguien podría ir a cuidarla, así que me decidí ir, le mande un mensaje llegando a Villahermosa.

MJ: Dile a tu mamá que yo te cuidare.

G: En serio, ¿estás jugando verdad?

MJ: Te mandare una foto, ¿me das su número para que pueda acordar con ella?

G: Ahorita te lo mando.

La habían pasado a un cuarto donde el familiar o el acompañante se puede quedar toda la noche, cuando la vi mi corazón se aceleró, sabiendo que me gusta que le gusto, realmente no creía poder aguantar estar toda la noche sin darle al menos un beso.

MJ: ¿Entonces venirte a cuidar es esto?, estar sentada toda la noche verte dormir?

G: No entra nadie.

MJ: Segura que nadie – Me acerque a ella, y note que su respiración aumento, aunque siendo realista la mía estaba igual.

G: No, nadie, además no se escucha nada.

Note que ya no tenia el suero, que suerte, no habrá nada que estorbe pensé, me acerque lo suficiente para quedar a centímetros de sus labios, no me había alejado así que tome valor para besarla, la sorpresa me la lleve yo cuando sentí sus labios contra los míos, eran tan cálidos y tan suaves, tienes unos labios tan lindos, cuando nos separamos apenas sonreímos, aunque mi cuerpo me pedía más, había esperado tanto tiempo para tenerla de nuevo cerca, además sabía que también ella lo quería, no me lo decía pero la mirada delatan a todos y su mirada me decía te estas tardando. La bese con mas fuerza a lo cual ella me seguía el ritmo, mis manos buscaron sus caderas al ritmo de los besos iban subiendo mis manos a sus pechos, sentí su respiración en mi cuello y eso hizo que se me erizara la piel, necesitaba tenerla, seria una crueldad que me dejara o que parara en ese momento, lo bueno de todo es que ella tenia bata y bueno por normas del hospital no puedes llevar nada de bajo, así que no fue demasiado difícil, les juro que era hermosa no solo por la cara, sino todo de ella.
No quería parar necesitaba hacerla mía, baje mis besos de su cuello hasta sus clavículas, su respiración aumentaba cada vez más, al llegar a la altura de sus pechos la mire, y con su mirada era de no pares ahora, llegue a su abdomen y note que arqueaba la espalda, decidí hacerla sufrir un poco ya que volví a subir pero con su mano tomo mi cabello y me llevo hacia abajo; ojala hubiera cierto todo lo que mi mente se creo en ese momento de leer ese estado, la realidad es que no podía ir a verla, el hospital corría riesgo de estar infectado y mi sistema inmune no ayuda, así que era un sueño poder estar una noche a solas con ella.