Capítulo 17.

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Quedaban pocos días para navidad, la boda estaba planeada por completo por mi madre y Monica, debido a las complicaciones que había tenido en este último tiempo ellas se habían encargado de todo, Leandro no dejaba que saliera de casa, siempre estaba cuidándome de todo, ni siquiera me dejaba subir o bajar escaleras, nuestra habitación ahora se encontraba en la primera planta ya que esta podría bríndame más acceso a toda la casa desde allí.

Leandro había dejado el trabajo por unos días, mientras era la boda y nos mudábamos a una casa más grande, según él la casa en la que vivíamos no era suficientemente grande para tener una familia, sus ideas me hacían gracia porque siempre había pensado en que todo esto ya era mucho, pero para él no.

Señorita Calipso –Murmuró Amy interrumpiendo mis pensamientos, elevé un poco el rostro dedicándole una leve sonrisa.- Su madre y la señora Monica, la están esperando en el salón con tu vestido –Agradecí mientras me levantaba de la cama con suma delicadeza, salí de la habitación junto a Amy para ir juntas hasta el salón, una vez allí me dispuse a hablar.-

Mamá, Monica –Me acerqué a ambas dándoles un abrazo a la par, cuando me separé guíe mis ojos hasta la caja que reposaba sobre el sillón, la caja era bastante grande, de color hueso y justo en el centro reposaba un moño blanco.-

Adelante, hemos seguido todas tus indicaciones, esperamos que te guste mucho –Dijo mi madre, caminé un poco más hasta llegar al sillón, cuando llegué allí me senté a un lado de la caja desenredando el moño que la adornaba y por ultimo quitar la tapa, retiré unos cuantos papeles, en cuanto terminé mis ojos se abrieron, era un vestido de corte de sirena y elegante, era bastante exagerado para mi gusto pero igual me encantaba, era de mi total agrado, cuando lo vi mis ojos se llenaron de lágrimas, no podía creer que después de tantas adversidades por fin en unos días Leandro y yo seríamos uno.- ¿Y bien? –Murmuró mi madre.-

¡Me encanta! –Di un pequeño chillido.- ¡Lo amo! –Volví a gritar mientras ellas reían.-

¿Me amas? –La voz de Leandro se hizo presente en el salón, en un rápido movimiento puse la tapa sobre la caja apoyando mi codo sobre esta.- ¿Qué esconden?

No puedes ver a la novia con el vestido de novia –Gruñí.-

Pero no lo tienes puesto, mi amor –Leandro se acercó lo suficiente dejando un beso en mis labios.- Solo quería decirte que tengo todo listo para la luna de miel, nos iremos después de la boda y pasaremos solos las fiestas decembrinas.

Está bien mi amor, muchas gracias –Correspondí el beso.- Ya puedes irte –Dije entre risas.-

Me voy, pero vive con la idea de que echaste a tu prometido y de su propia casa –Todas soltamos unas cuentas risas mientras Leandro se retiraba dejándonos nuevamente solas.-

El resto de la mañana estuvo tranquila, mi madre y Monica se habían ido nuevamente, esta vez tenía que conseguir unos zapatos y el velo, primero querían asegurarse de que el vestido me gustara realmente y después vendrían los accesorios.

Las cosas con Camillo habían cambiado, ahora cada vez que venía su actitud era diferente, era más amable y cero grosero, de hecho para nuestra boda había pedido una invitación extra, Leandro me había comentado que este salía con una chica que trabajaba en el bar, me alegraba que este por fin hubiese encontrado alguien que lo quisiera de verdad y lo hiciera cambiar de opinión con respecto a mí, los sentimientos de él se habían confundido y malinterpretado.

Mi bebé estaba complemente sano, siempre salía bien en los controles, cada día crecía más, su tamaño había aumentado como un melón, Leandro y yo reíamos a carcajadas en las noches cuando comparábamos las posibles formas o tamaños que tendría nuestro bebé en estos momentos.

Nuestra primera revisión juntos fue hace unos días, aún recuerdo la cara de Leandro intentando no llorar, era demasiado chistoso porque todos estaban dentro de la sala, la doctora nos había pedido que fuesen pocas personas y fue literal toda nuestra familia, la sala estaba por reventar y todos nos miraban graciosos. Definitivamente Leandro no aguantó más cuando escuchó los latidos del bebé y rompió en llanto sentenciándose a la burla de sus hermanos y familia por el resto de su vida, sin duda alguna el pertenecer a esta familia ha hecho que mi vida cambie, las cosas van mejor, mi vida va mejor, disfruto de los pequeños y grandes detalles y sobre todo guardo comparto junto a mi amor, el placer de ser padres, prometidos, amantes y mejores amigos, no cabe duda que llegar a esta familia ha sido lo mejor que me pasó, mi madre y Luciano comparten los mismos sentimientos, por fin encajamos en un lugar y somos amados.

María & Alessandro= Best Mistake.


MIS AMORESSSS, perdón por estar tan perdida, ya casi llegamos al fin de esta maravillosa historia, el capítulo de hoy estuvo cortito pero el próximo les compenso.

Mafia Italiana.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora