Linaje Mikaelson

Capitulo 5: Reyes en Nueva Orleans.

(KLAUS POV)

Camino tranquilo por las calles de Nueva Orleans ya puedo ver la puerta del cementerio. Todos estuvieron de acuerdo en que yo viniera solo a buscar a esa nueva reina, creo que no fue solo que yo fuera su líder, Davina y Marcel lucían asustados y ni hablar de los otros, las pocas veces que han habido brujas tan poderosas todo ha terminado en un desastre con cuerpos despedazados y muertes innecesarias.

Me adentro en el cementerio hacia un lugar en el que solo le es permitido estar a las brujas, donde descansan solamente sus antepasados.

A mi llegada veo un grupo de hombres lobo y brujas reunidos cerca al altar donde una ves sacrificaron a mi hija, esfumo el pensamiento y el deseo de matarlos a todos y comienzo con lo que mejor se me da: "La intimidación"

-¡¿Dónde esta ella?!- todos me miran muy serenos- ¡¿Dónde está vuestra nueva reina y sus dos perritos falderos??- preguntó refiriéndome a Cassie y a su representante.

Todos se quedan en silencio, en lo más alejado veo al que solía ser su alfa, Jackson, el comienza a acercarse lentamente mientras todos abren paso en el camino en señal de respeto, luego Cassie se se une a el y juntos caminan hacia mi.

-Jackson, Cassie- digo embolsando mi mas falsa y maliciosa sonrisa- nos esperaba este recibimiento.
-El señor McQueen estaba esperándolo- Jackson habla y después se inclina haciendo una reverencia, lo mismo hace la brujita.
-Síganos, por favor- la chica, Cassie habla y me guía nuevamente a travez de la multitud, a medida que caso cada bruja, cada hombre lobo inclinan su cabeza y hacen una reverencia.

Llegamos a un pequeño huerto en el cementerio, ahí un hombre de traje dándome la espalda mientras mira una gran diamante que esta conectado a unas Esmeralda y perlas por un diamante.

-Pueden, retirarse- su voz es fría y arrogante, pero con autoridad y sin protestar, la bruja y el lobo abandonan el huerto- Niklaus Mikaelson, supongo- se voltea y me mira a la cara, su mirada es peor que su voz, es arrogante y narcisista, y a la vez segura y intimidante- ¿Puedo saber a que se debe su incomoda presencia?
-Nathaniel McQueen- digo con la misma arrogancia que su voz posee, su expresión cambia, ahora es una mirada asesina- Esperaba encontrar a la autora de todo esto, y poder tomar decisiones sobre lo que exactamente esta haciendo en mi ciudad, pero es un gusto conocer a uno de sus lacayos.
-Sr. Mikaelson- dice el sonriendo, sacándome completamente de mis casillas- poseo la autoridad suficiente como para tomar esas decisiones en cuanto yo considere necesarias. Ella ha insistido en que era mejor hablar como personas civilizadas, en vez de empezar una masacre y derramar sangre innecesaria, de igual forma mi objetivo es paz no guerra- hace una pausa- pero mi autoridad me permite cambiar de objetivo en una suspiro. ¿que hace usted aquí exactamente ?

Es muy arrogante y confiado, voy a hacer que eso cambie.

-Debe estar muy seguro de su poder para desafiarme de esa forma- la expresión de el es divertida eso me enoja mas- no mantendré conversaciones de ningún tipo con un segundo al mando, se lo dejaré claro. Esta es mi ciudad, aquí la gente vive y muere según mi voluntad, no dejare que una estupida niñita y su perro vengan a destruir lo que he logrado componer en estos años- la expresión de el cambio, esta muy serio, si así es mejor, que baje esos humos- no sabe usted cuantas personas han intentado derrotarme, pero pregúnteme cuantas han salido con vida, ustedes no saben en que se esta metiendo, deberían tener mas respeto.
-Por supuesto que los se, cree que un hombre declara la guerra al diablo sin saber que tan preparado esta su ejército. Usted es quien debería respetar Sr. Mikaelson- me mira y ahora solo pienso perfecto que sería dejar al aquelarre sin brujo- es usted quien no sabe nada de nosotros... y si, me atrevo a preguntarle ¿Cuantos de ellos siguen vivos?- estoy a punto de responderle pero ese bastardo hace que me cabree aun mas, no me doy cuenta que dos brujas han entrado al lugar, Cassie y otra que no distingo- espérese, no responda, yo conozco la repuesta y podría incluso hacerle una lista de las personas que según usted deberían estar muertas, entre ellos todavía están las personas que sacrificaron a su pequeña hija...
-No se atreva- le advierto antes de que cometa el peor error de toda su vida.
-...Hope, cierto?- y con solo decir la primera palabra me abalanzó sobre el, pero las brujas me detienen lanzando un hechizo que me hace caer al piso con un dolor interminable- descuide, porque sus metas y las mías no son tan diferentes como usted cree, yo y la señorita McQueen, mi hermana!, hemos venido con un solo objetivo, venganza- me sorprendo al escuchar que hable de la chica como su pariente, parece que las brujas también se sorprenden, porque detienen el hechizo- le propongo un trato, ayúdeme a conseguir lo que quiero ya cambio pondré a todas las brujas a sus pies.