Frustrado; Ross Lynch

Capítulo 16

Al llegar a la reunión, donde Riker y Robert iban a ser el centro de atención. Decidí usar ropa demasiado formal, que definitivamente no es mi estilo. Al parecer toda la reunión se transmitiría en un canal de televisión.

Y eso es lo que me aterra.
Pero por suerte, sé que ____________ nunca vería aquel canal, a menos eso creo.

Aún así, eso no quita el hecho de que no este hecho un manojo de nervios.

Tuve que dejarla durmiendo, no pude despedirme pero le dejé una nota y le pedí el desayuno por delivery para que no tuviese problemas con ello. Le dije que volvería a eso de la una de la tarde o dos, y que por favor, me esperase para salir a donde se le dé la gana.

–¿Puedes concentrarte?- me pregunta Riker en un tono de disgusto, dándome un codazo en mi estómago– Robert llegará en un par de minutos y tu solo piensas en las musarañas.

Suspiro.
Tomo entre mis manos la taza de café que esta en frente mío y bebo de ella.

En la madrugada, cuando la bonita se quedó dormida me encargué de escribirle a Germán todo lo que había pasado. Que se está quedando en mi cabaña y que habíamos ido al parque de diversiones, por supuesto, también me encargué de ocultar mis sentimientos.

Cosa para nada inusual.

Pero para mi mala suerte, los mensajes ni siquiera le llegaron a Germán en ese momento, ni tampoco hoy a eso de las seis, o hasta ahora. Debe estar durmiendo como el jodido Morfeo.

Por más que me cueste un poco admitirlo, no puedo controlar mis nervios al no haber recibido las indicaciones de Germán.

Otro codazo de Riker me hace volver a la realidad, observo como todos en aquella pequeña reunión, se levantan, mientras miran al lado izquierdo.

Es Robert.
El padre de _____________.

Puedo sentir como la rabia se apodera de mi cuerpo al verlo, tan fresco, sin una pizca de culpa. Podrá engañar a todo el mundo pero sé muy bien que él mató a nuestro padre.

–Contrólate, las cosas ya pasaron.

Susurra Riker en mi oído.
Haciéndome molestar aún más.
¿Acaso no le importa que ese maldito hombre haya matado a nuestro padre?

–Buenos días a todos- saluda él con una sonrisa de oreja a oreja, respirando tranquilidad. Lo observo hasta que se sienta al lado de Riker– Riker Lynch- suspira– Te pareces tanto a tu padre.

Tenso la mandíbula.
Todos nos sentamos.
La reunión comenzaría en menos de cinco minutos e iniciarían a hablar cosas que realmente no tengo ni la menor idea, pero lo único es que sé...

–¿Cómo está su hija señor Robert?

Pregunta una entrevistadora desde lo lejos, provocando una mirada amenazadora por parte de él.

–No he venido aquí para hablar de mi familia- dice levantándose, llamando la atención de todos– Pero ahora que lo mencionas, quería aclarar ese tema, mi hija, _____________ nunca ha consumido drogas, esas imágenes son borrosas, como si fuesen editadas, además, es una de las mejores estudiantes en su escuela, no esta bajo algún tipo de sustancias ilegales, todo ha sido una confusión y pido que los medios se retracten y pidan disculpas por ello, ya que mi hija es menor de edad, y esta muy afectada por esos comentarios.

Me sujeto de la silla para no pararme a discutir con él.
Era obvio que lo negaría.
Pero claro, respecto al asunto que botó a ______________ de su casa, y que le dió un buen golpe no dice nada.

–¿Cómo está ella?

Pregunta otro, a lo lejos.

–Tratando de sobrellevar esa mentira repugnante- sonríe– Su madre y yo estamos ayudándola con eso, suponemos que en unos meses olvidará todo, ya saben como son los adolescentes.

Jodido mentiroso.

–¿Está seguro de que se trata de solo una mentira?- interrumpe la misma periodista de la primera pregunta– Las imágenes parecen muy reales, y además, ¿no se supone que su hija debería estar ahora con usted?

Bajo la mirada.
Pero que incómodo es todo esto.

–¿Para qué querían que la traiga conmigo?- ríe de manera cínica– ¿Para que la atacaran con sus preguntas? Por favor, solo es una niña.

–Señor Robert, disculpe, ya tenemos que iniciar con la reunión.

-

Luego de tres largas horas hablando de cosas que ni siquiera me importaban más que a Riker, la reunión acabó, y de hecho, acabó bastante bien para Riker y la compañía de mi padre.

Había conseguido obtener cinco inversionistas más, mientras que Robert solo dos, la noticia de _____________ no estaba haciendo nada más que traerle una mala reputación.

–Te felicito Lynch- escucho a Robert dirigirse a Riker, volteo de inmediato– Es grandioso que sobre lleves todo esto mejor de lo que lo hacía tu padre.

–Agradecería bastante que no mencione a mi padre- le dice él, mirándolo a los ojos. Bien Riker – Y gracias, hago mi mejor esfuerzo, ¿cómo está ______________? Es una pena que se sienta mal ante toda esta falsedad.

Golpe bajo.
Puedo ver la expresión de Robert cambiar de inmediato. Su sonrisa ahora parece una mueca.

–Como dices, es una pena- le da una palmada en el hombro– Pero no hay nada que los Thomas no podamos solucionar, en fin, nos veremos en una próxima oportunidad.

Le extiende la mano.
Riker la toma.
Maldito imbécil.

–Hasta luego Robert.

Se despide mi hermano.
Volteo la cara cuando noto que Robert acaba de mirarme.

No quiero una charla hipócrita con él solo para quedar como una persona respetuosa. Si hablo con él o veo una vez más su maldita sonrisa cínica me encargaría de golpearlo hasta que deje de respirar.

-

"Me alegra que la reunión haya sido un éxito, sigue actuando como lo estas haciendo con ____________. Para rematar a Robert, llévala al centro de la ciudad hoy mismo, ve encubierto como siempre. Me encargaré de tomarle unas fotos con aquellos moretones para exponerlas, Robert podrá con tanto, te veo allí a las 6:00pm Lynch, no me decepciones"

Bufo.
Observo el reloj que tengo en la muñeca, son las 3:25pm, se me hizo tarde ya que la jodida reunión duró más de lo planeado.

Y lo peor de todo esto es que he tratado de mantener la calma desde hace mucho rato pero se me hace imposible. _____________ ha podido enterarse que soy hijo de Mark Lynch desde hace un buen rato.

Lo que llevaría mi plan a la basura.
Y también todas mis oportunidades de tener algo firme con ella.

Al llegar a la cabaña, entro, con el corazón latiendo a mil, camino lo más rápido que puedo hacia la habitación donde dormimos, y allí es donde la encuentro.

Esta recostada en la cama con los brazos y piernas abiertas. Frunzo el ceño.

–¿____________?
Pregunto, acercándome a ella.

–Te estuve esperando desde hace mucho- me responde, sentándose en la cama. Suspiro de alivio– ¿Dónde estabas? En esa nota que dejaste me dijiste que ibas a venir dos horas antes a esta.

–Estaba haciendo unas cosas en mi trabajo, linda- trato de tocar su rostro pero ella no me lo permite– ¿Qué sucede?

–Tu ex es Khali, ¿verdad?

Frunzo el ceño.
¿Cómo sabe eso?
Recuerdo haberle platicado de ella pero jamás mencioné su nombre antes.

–¿Qué?

Es lo único que sale de mis labios.
Observo a ____________ abrir la mesita de luz y sacar una carta de la primera gaveta. Una carta que jamás había visto.

–¿De donde sacaste esto?

Pregunto a penas me la entrega.
Khali jamás me ha escrito cartas, jamás.

–La encontré debajo de la puerta cuando desperté, creo que estaba buscándote- me mira con odio, estoy por decirle algo pero ella me interrumpe– ¿Te sigue gustando?