【La emoción de las compras】
Observaba aburrido como Sam y Alan se despedían de Blaise mientras se encontraba sosteniendo la mano de Kyle unos metros más alejados. Estaba emocionado por salir junto a Kyle y los demás, pero lentamente, se estaba desesperando. Realmente quería salir pronto.
—¿Qué es lo primero que buscaremos?
Volteo a Kyle para pensar unos momentos.
—No lo sé en realidad, pero, ¿Me ayudarás con todo eso? No sé que cosas se necesitan realmente para ir a la clase más que hojas y un boli.
—Bueno, necesitaras más que eso.
—¿Es real eso de que todos se visten igual en las escuelas de ciudad?
—Bueno, eso varía según el instituto en el que vayas, ellos suelen ser exigentes con su uniforme.
Observaron a Sam y Alan acercarse.
—¿Ya nos vamos? ¿Qué haremos primero? ¿Podemos...?
—Ya, ya, tranquilo Keanu. Estamos en camino, relájate, no queda tan lejos. —Sam lo pensó unos momentos antes de decidir que es lo primero que harían. —Supongo que primero vamos a buscar las cosas para la escuela, es lo más simple y en lo que menos tardaremos. Luego tendrás todo el tiempo que necesites para observar la ropa y escoger cual es la que más te guste.
—De acuerdo.
Los cuatro se dirigieron a distintas tiendas comprando distintos tipos de materiales escolares. Aunque ninguno de los tres se imagino ver a Keanu tan emocionado por cosas tan simples como los lapiceros decorados. Podían ver como es que sus ojos brillaban asombrados al prender las luces que algunos de estos traían.
Cuando finalizaron, siguieron con las tiendas de ropa. Algo que también emociono a Keanu de forma increíble. Nuevamente recorrió el lugar emocionado, tomando distintas prendas que llamaban su atención, teniendo todo en sus brazos, moviéndose tan rápido que los demás tuvieron que correr tras él con la intención de detenerlo.
—¡Keanu, no puedes tomar todo eso!
—¿¡Sabes acaso si te entran!?
Kyle ignoró los gritos de los mayores y se detuvo, observo a Keanu y se dio cuenta que corría en un especie de circulo por lo que se adelanto a correr y posicionarse donde sabría que éste iría. Y cuando así fue, lo atrapó entre sus brazos, tanto como pudo dada la cantidad de ropa que el menor traía entre sus brazos.
—¡Quítate Kyle, hay mas cosas que quiero tomar!
Sujetó con más fuerza, mordiendo su labio se inclinó hacía atrás, levantando a Keanu en el proceso. No dejaría que escape tan fácil. Y aunque no aseguraba su método fuera eficiente, no tuvo que preocuparse mucho más, puesto que Alan y Sam habían llegado.
El Alfa tomó a Keanu por detrás y sin soltarlo, lo cargó. Sam y él se encargaron de tomar toda la ropa.
—Keanu, escucha, si quieres comprar todo, primero debes probar la ropa. Puede verse linda pero no sabes si la usaras luego. Te dejaré comprar la ropa que quieras luego de probártela. ¿De acuerdo?
A regañadientes, el Sigma aceptó. Podían sentir su mal humor desde la distancia. Su aroma inclusive empezaba a esparcirse denotando molestia.
Se acercaron a uno de los tantos espacios de vestidores, Alan dejó a Keanu dentro y luego Sam le pasó una de las prendas cerrando con la pesada tela que los separaba.
Los tres se sentaron en los suaves sillones frente al vestidor en el que se encontraba Keanu, junto a toda la ropa que el chico había querido comprar. Una joven chica se acercó a ellos finalmente, observando la gran cantidad de ropa que tenían con ellos.
—¿Necesitan ayuda?
—Descuide, solo esperamos a que salga.
—Acomodaremos todo esto en su lugar también, no se preocupe.
—Pagaremos.
—Si, también eso. Disculpe las molestias ocasionadas.
La joven negó más relajada y todos miraron al Sigma arrojando la camisa en dirección a ellos.
—Esa cosa es un asco, no usaré algo como eso.
Sam sonrió con satisfacción, sabía perfectamente que sucedería.
—Discúlpelo, él realmente... —Intentó disculparse Alan con la chica.
—Descuide, si necesitan algo, no duden en llamar.
El siguiente en entregar alguna prenda fue Alan, y el resultado, fue el mismo. Keanu parecía estar en desacuerdo con la mayor parte de ropa que había escogido. Todo sonaba llamativo para él por ser la primera vez en ver algo diferente a lo que usaba comúnmente, pero a la hora de probarse las cosas, la mayoría comenzó a disgustarle en grandes escalas. Ya sea por cómo se veían en él, o que simplemente las prendas dejaban de gustarle a causa de su estampado o color.
—Prueba esto.
Intervino finalmente Kyle alcanzándole un conjunto entero que había estado fuera de la selección del Sigma. Había tenido en cuenta algunos puntos, como el carácter de Keanu, lo que solía usar la mayoría de lobos en su antigua manada, y lo que supuso llamaría su atención.
A los minutos salió con el nuevo conjunto, que constaba de unos vaqueros simples con algunas roturas y un suéter liso algo largo.
—Me quedo con esto.
Dijo al salir, observado con una brillante sonrisa a los demás.
—Afortunadamente Kyle vino con nosotros.
—Iré a dejar esto en su lugar.
—Te acompaño. Kyle, busca más cosas Keanu en lo que nosotros terminamos con esto.
Luego de un rato, pagaron por las cosas y se fueron a la siguiente tienda hasta finalmente completar cada necesidad para el Sigma.
—¿Entonces en el instituto de la manada puedo ir vestido como quiera?
Preguntó Keanu luego de que todos se hubieran sentado en una banca en un parque para tomar helado y descansar.
—No, los niños usan uniforme allí, pero lo venden en la manada, así que lo compraremos luego.
Asintió y apoyó su cabeza en el hombro de Kyle con cansancio. Y eso, fue lo último que recordó antes de dormirse completamente.