Un adolescente en cuarentena (COMPLETA)

Ropa nueva (Día #54)

Con mayo llego el invierno, y con este, se avecinó la temporada fria...
Las chompas, casacas gruesas, pantalones polares y guantes se fueron incorporando progresivamente en nuestro vestir diario..

Solo había una pequeña diferencia (muy obvia, por cierto)... no podía salir a comprar ropa acompañado... no... todo era distinto ahora... la regla era que solo un integrante de la familia haga las compras...

"Yo pensaba que solo era pura habla." - contaba mi tío Rick - "Pero es muy cierto que ahora las cosas han cambiado radicalmente, hijo. Con decirte que una pareja de esposos fue llevada a la comisaría solo por andar de a dos, creo que te digo todo..."

Era todo tan distinto, tan confuso... tan EXTRAÑO...

Por esa razón, tuve que pedirle a mi tío que fuera a comprarme ropa para invierno... la cosa era simple... como te dije en un capitulo anterior, nadie quería agarrar siquiera una gripe en estos tiempos (y con mucha razón, diría yo)...

"Es mejor gastar previniendo que luego hacerlo cuando uno enferma." fue el mejor sustento que pude hallar para convencer a mi tío que me comprara ropa nueva...

Lo que quería era lo imprescindible... ya sabes, medias, pantalones abrigadores, calzoncillos y chompas... no mucho...

Pero bueno, tras una larga busqueda, mi tío pudo dar con muy buenos ropajes... hicimos una videollamada por WhatsApp para que yo pueda ver cómo eran las prendas...
Después de dar mi visto bueno (tanto en la realidad como en Whats, entiéndase como se quiera), mi tío regresó...

Rescuerdo que antes de la cuarentena, comprar ropa nueva significaba no lavar mi ropa sucia (sino solo ponerme la nueva)...

Pero esta vez no fue así... mi antigua técnica ancestral anti-fatiga adolescente no funcionó...
Tenía que... no... DEBÍA DE lavar mi ropa nueva si o si...
De este modo, podría desinfectarla y recién podría disfrutarla después que secara...

El trabajo era obligatorio... era por mi propio bien, así que... tuve que hacerlo... no me quedaba otra...

Así, pude recién probarme mis nuevas prendas... a la verdad me gustaron mucho, y espero que me protejan en este frío invierno que se avecina...

Realmente (y esto es más personal aún) a veces siento pavor de que pueda contraer una gripe... pero debo confiar que Dios tiene el control de todo... aún en medio del caos y la tormenta, Él tiene el control...

Espera en Jehová, alma mía...
Sí, espera a Jehová...