Cansancio hace de las suyas.

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—Dices entonces que ¿ya pusiste la supuesta trampa? — Dio un sorbo a su café mientras lo miraba.

—Si, ahora la cosa esta en no olvidarme que la puse. — Rascó su nuca con nerviosismo.

—Suerte con eso.

Lo miro con detenimiento. Ese día estaba peor que antes; el anaranjado tenia unas enormes ojeras además de que ya estaba empezando a cabecear. Lo tomo por el suéter justo antes de que se cayera de la silla.

—Ve a casa, yo le avisaré al jefe — El contrario negó con la cabeza. —Anda, no desaparecerás por faltar un día.

—Twitter, gracias, pero la respuesta es un no. Tengo mis razones ¿si? — El celeste resoplo frustrado; jamás entendería. —Esta bien Wattypad, de todos modos te aviso que hoy y mañana me voy temprano así que no podre acompañarte a la parada.

—No hay problema.






[......]







Hoy había sido un largo día de trabajo. Ahora mismo se dirigía a la oficina de su padre como de costumbre.

Abrió la puerta con cuidado. Lo primero que vio fue a su padre acomodando unos papeles con una ligera sonrisa. De verdad amaba su trabajo.

—¿Padre? — El mayor lo miro dejando los papeles en su escritorio para enseguida ir a abrazarlo. —¿Cómo te fue hoy?

—Bien, supongo. — Correspondió al abrazo. Su padre se separo de el y le tomo por los hombros. —¿Qué clase de respuesta es esa, hijo mío? Yo no te enseñe eso.

—Lo se, pero podría ser mejor.

—Ya lo creo. — suspiro para luego volver a su escritorio. —De todos modos, hoy tienes un trabajo importante. Como sabrás, tu hermano a estado muy..........irritable; y por el bien de todos los empleados le he mandado a casa temprano. ¿Podrías hacer un chequeo para ver que todo este en orden por él?

—No tengo problema.

—Bien, si es así, nos vemos en el Lobby.




[......]




Todo era tranquilo. En teoría todos ya deberían de estar en su casa; Sin embargo aun había una que otra App por ahí. El seguía recorriendo los largos pasillos y revisando cada sección de ese enorme edificio.

Todo iba normal hasta que........




[.....]




—¿Cuál dices que es el problema? — Dijo su padre mientras lo seguía un tanto confundido. Por lo general no solía haber "problemas".

—Esto — Se detuvo apuntando con sus dos brazos a una de las tantas oficinas del lugar.

El mayor se asomo aun confundido, y pudo observar a cierto anaranjado dormido plácidamente sobre su escritorio. Este sonrió con ternura pero a la vez un poco triste. "¿Tan cansado estaba?" Se pregunto; para luego proceder a moverlo con suavidad.

—¿Wattpad....? Anda, despierta dormilón. — Google al contrario de lo que muchos pensaban; era una persona muy amorosa. Todos le veían con mucho respeto, pues también era una persona muy sabia y comprensiva. Él veía a sus empleados como sus propios hijos; aunque la mayoría no fueran de sangre.

—¿Uhm? — Despertó un poco desorientado. Cuando logro colocarse bien sus lentes y su vista se enfocó casi se muere de la vergüenza. Ante el, su jefe y una de las Apps mas importantes del Internet. —¡Se-señor! Y-yo............

—Wattpad, mañana no vengas a trabajar. — Esto sorprendió un poco al de lentes. —¿Que? Señor, le agradezco pero no puedo hacer eso.....

—No es una sugerencia.

—P-pero!

—No, nada de peros. Te despediré si te presentas a trabajar mañana. — Enseguida dio media vuelta y se marcho. Su acompañante observó a Wattpad por un momento para luego seguir al mayor dejándolo solo en aquella habitación.

Suspiro. Jamás podía ganar contra él.

Hijos del Interneth ||ApphumansDonde viven las historias. Descúbrelo ahora