Creerle o no.

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POV's Narrador

El reloj y su incesante sonido fue lo único presente en el ambiente.

Tik tok tik tok.

Seguían las manecillas del reloj, se podía sentir la tensión en el ambiente al igual que silencio de ultratumba entre Bakugou y Todoroki.

¿Que paso?

Para eso debemos regresar en el tiempo como hace dos horas.

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El timbre de la casa del rubio había sonado indicando visitas, una cosa algo inesperada a estas horas debido a que casi nadie se atrevía a visitar al rubio sin ninguna buena razón, de ser algo importante el rubio no hará más que darte una buena bienvenida, solo por modales, claro sin llegar a ser amistoso solo cortés.

De lo contrario. Solo se puede decir que Kaminari lo aprendió a la mala y cada vez que alguien menciona la casa del rubio cenizo, este saca chispas solo del trauma.

—¿Quien?— Preguntó Katsuki abriendo la puerta de su casa mientras acomodaba su bata, debido al frío del exterior tuvo que ponerse la.

Buenos días, Bakugou-san— Hablo Yaoyorozu con una tierna sonrisa en su rostro, esto congeló a Katsuki quien no se esperaba encontrar a la azabache, en su casa, a esa hora, es decir. Ni siquiera se planteaba volver a ver a la azabache nunca más.

Nervioso, pero firme le invito a pasar a la fémina mientras cerraba la puerta tras de ellos, ¿Por qué estaba aquí? Solo se podía descubrir de una forma.

—¿Necesitas algo de mí?— Sutil.

Oh, bueno.— La azabache se acomodó en su puesto en el sillón frente al rubio mientras pedía de manera tranquila lo que vino a pedir. —A decir verdad yo venía a invitarte a mi boda, en serio, quiero que usted asista a ese momento importante en mi vida.—

Nadie nunca antes en la vida había sentido tal bochorno y honor al mismo tiempo, también sentía dolor, se sentía como aquella Sirena del cuento de Hans Cristian Andersen* que soportaba el dolor de vidrios rotos en sus pies, calla pues ya no tiene voz y el corazón roto al estar presenciando la boda dónde su primer y único amor se casaba con otra persona, ¿Aún seguía sintiendo algo por Todoroki Shoto? Solo el mismo Bakugou Katsuki podría responder.

El no odiaba a la pelinegra, Yaoyozoru era una mujer muy tierna y amable la cual lo salvó del peor de los más inciertos destinos, nadie podía ver el futuro y decir que es lo que hubiese pasado si aquellos aprendices de héroe, esos estudiantes inocentes, ellos que solo eran unos simples compañeros que no tenían ni relación o ni trato, lo salvaron por puro instinto de un héroe genuino.

Se sentía avergonzado por tener que pedir mas de aquella dulce chica, no podría dar nunca la cara si llegase a la boda y ver cómo Yaomomo y Shoto se besaban.

Lo lamento, pero creo que no estaré disponible para esas fechas.— Respondió de manera cobarde, aunque se plantasé la idea de decirle la verdad esa era una opción que le daba miedo, así que se mordió la lengua.

Pero, aún no te he dicho cuando será.— Respondió algo triste, pero rápido busco algo en su bolso, era un sobre magenta con detalles en oro y un lazo plata brillante, cerrado con un sello de cera negra con un símbolo de corona muy elegante, en el interior se encontraba una invitación. —Se que desde que te convertiste en el héroe №2 del país estás constantemente en movimiento, pronto abrirás tu propia agencia de héroe y serás el primero en hacerlo de nuestra generación además del más jóven. Pero quiero que estés allí... Te convertiste en mi mejor amigo después de tu secuestro y tus consejos siempre me dieron la opción correcta, así que por favor. Por favor, ve a mi boda.

Una vida NO tan común y corrienteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora