El libro Yaoi

capitulo 6

me levanto de las caderas hasta que la mitad de mi cuerpo colgaba hacia su espalda y la otra se mantenía al frente

-oye, bájame, puedo caminar- le dije mientras trataba de patearle. sujeto mis pies impidiéndolo y seguí caminando.

levante la cabeza para ver hasta donde me llevaba. estaba en mi propia casa y apesar de eso no lograba definir en donde me encontraba.

me lanzo justo donde estaba el sillón.

estaba acostado boca-bajo y mi torso aun estaba desnudo. note que me veía de pies a cabeza con mucha seriedad, a tal punto de darme vergüenza.

-lamento... lo que te hice- lo mire sorprendido y niquiera pude mostrarle una sonrisa de aprovacion.

-esta bien... bueno... esque, estuvo bien.- esta vez decía las cosas sin pensar. solo echaba en cara lo que pensaba o mas bien lo que sentía.- la verdad me gusto mas de lo que debería- dije mientras me mordía el labio inferior tratando de mantener mi boca cerrada y no decir nada mas.
Me quito u mechón de la cara y me acaricio tiernamente, sin borrar la dulce sonrisa que tenían sus labios
-vasta de cosas de niños, ¿me vas a quitar la ropa o no?- se ruborizó y indio sus dedos en mi cabello dándome un beso desprevenido
-te consta que lo dijiste tu- mi corazón se paró un segundo y luego latió como nunca.
Me quito la poca ropa que tenía y yo se la quite a el.
Me tiro bruscamente a el suelo y me sujeto los hombros fuertemente.
El suelo estaba frío y pegaba directo en mi espalda, por otro lado todo mi cuerpo estaba ardiendo.
Lo metió dentro de mi con fuerza.
Tenía mis brazos enredándole el cuello y mis piernas en sus caderas.
Por mas que pedía no gemir en voz alta y que solo fuera parte de mi imaginación, podía darme cuenta en su sonrisa que podía escucharlos fuerte y claro.
Mi cuerpo contra el suyo hacían un sonido extraño... ¿cómo describirlo?... Como, si estuvieses frotando rápidamente tus manos con agua y jabón, tu sabes, <<swich swish>>
Estaba resbaloso y pegajoso.
El estaba tan duro y caliente que sentía que podría romperme en cualquier momento.
Era insaciable, quería más fuerza , lo quería todo de el.
Sentí como disparo chorros de su se en dentro de mi, como una manguera a precio. Se sentía tan caliente hay adentro. El sudor y el semen decoraban mi torso y por obvias razones hay abajo.
-¿me amas Sonny?- dijo con cara de cachorro
-idiota- le dije suave mientras le daba un golpecito en la frente- si no te amara no lo habrá hecho contigo dos veces seguidas- sonrío ampliamente. No me había dado cuenta de que desde hace ya tiempo sentía como esa sonrisa provocaba energía para mi cuerpo.