El libro Yaoi

Capitulo 1

Nunca me importaron los sentimientos de las personas o si me querían o no. Yo solo buscaba tener sexo.
Ir arriba, abajo, con una mujer, con un hombre. Eso nunca importó.
La campaña había soñado hace unos cuantos minutos.
Yo y un chico, el cual olvide su nombre, nos encontrábamos en el salón de biología.

-haa... quiero... mas profundo- nunca me cansaba de que me follaran. Quería sentir incluso algo de dolor.
El chico comenzó a mover sus caderas rápidamente una y otra vez sin parar.
No paraba de gemir y gritar cada vez que el tocaba mis puntos débiles
-eres muy lindo Hino. Te han follado tanto que tienes un culo muy suave, zorra- dijo él mientras me movía de posición
-si... llámame zorra... mas fuerte!- Seguía en el orgasmo y amaba esa sensación.

Había sido increíble, durante todas las clases me follaron tres veces.
Al salí de la escuela me dirigí hasta mi casa. Casi no había nadie y era mejor para mi.
Mientras caminaba me percate de que ya nadie estaba cerca. Estaba oscuro y las calles estaban muy solas. Las lámparas de calle parpadeaban y una que otra nisiquiera estaba encendida.
Seguí caminando y cabizbajo.
Una mano salió de la nada y me sujeto fuertemente contra la cara un pañuelo húmedo. Era un olor extraño y sentía que mi cabeza daba vueltas, no podía sacarme de la persona que me sujetaba y me dolían los músculos...

Nisiquiera se que paso, pero desperté amarrado en un gran escenario.
Un reflector fue el que me despertó.
Estaba amarrado de las muñecas y los pies. El cuarto estaba oscuro y solo yo me iluminaba, pero podía escuchar comentarios de hombres en el fondo de el salón.
Me sentía exitado sin razón en particular. No podía moverme y sentía que estaba erecto.
Los comentarios me aturdían y no podía escuchar con claridad lo que todos decían.
Un hombre de traje se acercó a mi y corto las cuerdas que me sujetaban a la pared. me cargo en su hombro y yo aun seguía sin saber que pasaba.
Me sentía mareado y apenas alcance a ver que el hombre de traje me subió en un auto negro y comenzó a conducirlo rápidamente.
-¿donde... estoy?- alcance a decir
-te acabo de comprar, tu cuerpo es mío- dijo seriamente
-yo... estaba en la calle... me siento mal- no podía pensar claramente

Al llegar a un penthouse me acostó sobre una gran cama con lindo color azul pastel.
Recobre memoria y me levante de golpe. Las lagrimas salían de mi cara y quería gritar pero no podía.
-¿quién eres tú?- le dije asustado
-Aky, y soy tu nuevo dueño así que me debes respeto-yo no era dueño de nadie. Hacia lo que quería cuando lo quería sin tener respeto ni de mi mismo
Aky se sentó a un lado de mi y metió su lengua dentro de mi boca. Se sentía muy bien así que le seguí el juego y nuestras lenguas se juntaban con nuestros labios pegados.
Aky se desabrocho el pantalón y dejó a la vista su notable elección. inevitablemente sabia que tendría que chuparlo. Me agache y comenze a lamer la punta, luego poco a poco lo sumergí dentro de mi boca hasta llegar a mi garganta. Aquí eyaculo dentro de mi boca y trate de beber todo su semen pero era mucho. Aky se agacho y me miro pícaro
-te ayudare a beberlo todo
Junto nuevamente nuestros labio y su lengua jugueteaba dentro con la mía, se sentía pegajoso por el semen aque pasaba de mi boca a la suya de una manera muy sexy. Me separe de sus labios y me di la vuelta. Me agache en cuatro patas y sujete mi culo abriéndolo.
-¿lo meterías para mi?- le dije riendo.
Sujeto mis caderas y me penetro tan profundo como pudo. Era doloroso, nunca lo había hecho con un pene tan grande. Era delicioso
-amo tu pene... dame mas duro... rompeme Aky- Aky acelero y novia muy rápido las caderas haciéndome llorar como nunca. Podía sentir el calor de la sangre y el semen que salían de mi culo.
-tu pene es tan delicioso...haa... quiero sangrar mas Aky- No se detuvo ni una sola vez. Sentía que moriría y me sentía muy débil, pero era genial.