2. Sin Recuerdos (Saga «La Única»)

#36 Nora

Actualidad – Martes 13 de Noviembre

Estoy muy preocupada. Intento ser valiente por Victor y que no se me note, pero no puedo evitarlo. Saber que estamos bajando por el camino que nos lleva hacia el poblado del clan me pone los pelos de punta. Y además no puedo dejar de pensar en mi madre.

¿Cómo he podido hacerle algo así? Soy cómo ella o incluso peor ya que al menos mi madre me deja una nota cada vez que se va de viaje. Aunque no puedo evitar sorprenderme de que esté tan preocupada como para llamar a la policía... Yo siempre he pensado que no le importo. ¿Mi madre... me quiere? ¿Me quiere como para preocuparse por mí cuando llevo días sin aparecer por casa? Yo pensaba que ni siquiera se daría cuenta, total nunca está en casa y cuando está, no nos cruzamos por tema de horarios, así que ¿cómo sabe que no he estado en casa durante unos días? ¿La han llamado del colegio? ¿Se lo habrá dicho Samantha? ¿Quizás ha ido a verme por no contestar sus mensajes y le ha explicado a mi madre que he desaparecido sin dejar rastro? Entonces... ¿No es que está preocupada sino que simplemente les sigue el juego, ya que no dejo de ser su hija? ¿Le importa siquiera?

Una mano se posa en mi hombro y otra me levanta la barbilla haciendo que mire los ojos más hermosos del mundo.

—¿Estás bien? ¿Necesitas que descansemos un rato?

—No, estoy bien, tranquilo. —No me había dado cuenta de que había frenado ni de que mi respiración se había acelerado. Estaba nerviosa pero no quería que Victor lo supiera así que tragué saliva y le di una pequeña sonrisa.

—¿Seguro? Toma —dice Victor sacando su botella de agua de su mochila y tendiéndomela—, bebe un poco.

Di un trago y luego le devolví la botella. Victor me observa preocupado así que vuelvo a sonreír.

—De verdad que estoy bien, gracias por el agua.

—De nada cariño.

—Venga, continuemos, no vaya a ser que se haga de noche.

—Sí, vamos, aún queda la mitad del camino.

Victor coge mi mano y seguimos andando. Aaron y Karlie están un poco más adelante esperándonos. Retomamos la caminata juntos e intento seguir las bromas de Aaron y la conversación con Victor aunque me cuesta un poco, ya que mi mente vuela hacia otros lugares.

Después de un rato Aaron y Victor se adelantan dejándome algo atrás con Karlie.

—Oye, me alegra mucho que estés con Aaron, tienes que cuidarlo mucho, ¿vale?

—Por supuesto, gracias, Nora. Yo también estoy feliz, Aaron es fantástico.

—Sí que lo es. Es como mi hermano y lo quiero como si lo fuera.

—Lo sé, me lo ha explicado, él también te quiere como si fueras su hermana. Oye, ahora que tú estás con Victor y yo con Aaron, dado que ellos son primos, eso nos hace familia, ¿no?

Me reí al pensarlo.

—Sí, es cierto.

—Será divertido.

Los dos nos miramos sonrientes encantadas de ese hecho pero de repente los chicos empezaron a ponerse tensos y a cuchichear delante de nosotras.

—¿De qué crees que están hablando? —me pregunta Karlie preocupada.

La verdad es que también me preocupa un poco, parece que están discutiendo y Aaron parece algo nervioso.

—No lo sé.