#Prólogo

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Tengo a Nora sentada encima de mis piernas abrazada a mi cuello. Su respiración es tranquila, se siente a salvo conmigo sin saber que la estoy traicionando.

—Te quiero Nora y haría cualquier cosa por ti —murmuro con lágrimas en los ojos antes de que se quede dormida en mis brazos.

La tengo cogida con fuerza y estando a solas lloro. Lloro porque este es el último abrazo, la última vez que estará conmigo, la última vez que la tendré en mis brazos y siento que mi mundo se rompe en pequeños trozos.

Me levanto cogiéndola en brazos y la tumbo en la cama. Le doy un beso en la frente y la contemplo unos segundos. Se me pasa por la cabeza cogerla y llevármela lejos, muy lejos de aquí y empezar los dos juntos de cero. Pero ahora ya es demasiado tarde. 

2. Sin Recuerdos (Saga «La Única»)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora