𝐔𝐧 𝐨𝐦𝐞𝐠𝐚 𝐞𝐧 𝐘𝐨𝐮𝐓𝐮𝐛𝐞 [Rᴜʙᴇɢᴇᴛᴛᴀ]

V.-Capitulum-.

[V.-Capitulum -.]

Seguía viendo la pantalla, esperando...Rubén deja de ser un cobarde, pensé y en ese momento al 5to tono conteste, escuche su voz.- Rub...-sabía que se estaba conteniendo, demasiado y que estaba guardando todo. Lo podía percibir por su voz porque yo también estaba guardándome todo.-Y-Yo...no lo sabía, perdón Sam...-susurré una disculpa, como si tuviera miedo de que con solo mi voz, rompe algo más. Seguíamos en un silencio, que detonaba que si alguno de los dos hablaba tendríamos que arreglar las cosas, juntos.-No Rubén no es tu culpa.-suspiro, como si le dolieran decirme esas palabras.-tenemos que arreglar esto, si o si.-volvió a hablar, se notaba intranquilidad y algo de nerviosismo en su hablar, lo sabía porque ambos estábamos compartiendo las mismas emociones, lo sentía como si estuviéramos transmitiéndonos mutuamente todo lo que sentíamos de la situación. Como si tuviéramos un lazo...

El silencio seguía en la llamada, yo no me atrevía a soltar ni un solo ruido, hasta que decidí que lo mejor era contactar con mi agente, y mencionarle lo ocurrido.-Sam, no te muevas de la casa, voy para allá. Esto es mejor hablarlo en persona.- no le di tiempo a responder, colgué y llame a mi agente, le explique la situación.

Me entendí y me prometió comenzar con los trámites legales sobre la revista o página que había publicado esa noticia, rápidamente las noticias comenzaron a ser baneadas, reportadas o canceladas las cuentas. Cuando podían eran muy efectivo mi equipo, pero sabía que la noticia llevaba tiempo y muchas personas lo vieron, no hablaría sobre el tema, arreglaría las cosas con Samuel y todo será un tema de chismes.

Estuve horas hablando con mi agente y el equipo, arreglando todo y arreglando los papeles que se necesitarían por si se llegaba a un juicio. Toda esta mierda me estaba consumiendo y lo sabía pero intentaba por todos los medios que ni mi manager o el equipo se dieran cuenta de ello.

Me odiaba por tener que volver a cargar con esto, odiaba que hayan arrastrado a Samuel en esto, odiaba todas las cosas malas que estaban golpeando en mi vida. Después de 6 horas podía decir que estaba anocheciendo, Irina me mando mensaje de que llegaría en 1 hora a la estación y yo seguía pensando en cómo lo hablaría con mi compañero.

Salí de mi hogar, necesitaba ir por ambos, sabía que ya no era segura la casa de Samuel, y que Irina venía con intenciones de apoyarnos, lo cual se lo agradecí mucho entre audios y mensajes.

Sería una la de las noches más largas, mucho estrés, ansiedad. Todo se estaba acumulando en mi cabeza y pecho, me sentía encerrado, ahogado y sin intensiones de querer parar ese sentimiento. El dolor de cabeza se estaba volviendo punzante.

Logré llegar a casa de Sam, baje y llame por el comunicador, le explique que era yo y a los segundos abrió y me dejo pasar. Cargaba a Kira, quien maullaba e intentaba llegar a mí. Sam me la paso sin mayores problemas.

.-Sam, lo mejor será que prepares una maleta...-me miro sin entender.- No sé cómo sean las cosas de ahora en más con esto que acaba de ocurrir pero en esta casa ya no estás seguro ni tu ni tu privacidad.-me miro para hablar.- sabes que si me voy contigo, y siguen ahí los fotógrafos, volverán mas chismes y más cosas. Más intentos de meterse en mi vida privada...-se notaban la ansiedad junto al nerviosismo, intente acercarme pero negó mi contacto. Me miro como si fuera la culpa de sus problemas y en parte era cierto, nadie había hecho chismes de él, nadie hablaba de donde vivía o como vivía y ahora llegue yo...y simplemente todo se fue al caño.-Sam...-me interrumpió.- Sam nada, sabes que tengo razón, joder esto es una jodida mierda, sabes cuantos ataques de pánico he intentado evitar todo el día, desde que vi Twitter, como tuve que llamar a mi agencia, a mi manager y a mi equipo. Para intentar buscar una solución, me estado sintiendo un mierda, por un puto chisme de quinta. Y después tú, sabes perfectamente que te volví a llamar más de 5 veces.-estaba llorando, nuevamente volví a ver a ese chico alegre y carismático irse...trayéndome en el proceso al verdadero Samuel De Luque un hombre de 31 años, que tiene tantos problemas como yo, que sabe la constante de la ansiedad y la depresión, sabe los ataques de pánico, de ansiedad y de nervios. Me sentía morir escuchándolo llorar, sin esperar a más. Lo abrace fuerte contra mi pecho, sentía el ligero aroma a Lavanda y Fresas agrio, casi podrido. Eran un olor horrible y desgarrador para sentir, transmitía todas las emociones del chico que abrazaba contra mi pecho. Y sin previo aviso lloré yo también, sentía que había guardado mucho y necesitaba sacarlo, porque me ahogaba día con día con él. Sentía que no quería separarme de ese abrazo, porque al escucharme sollozar, me abrazo por la cintura fuerte, abramos sin saberlo nos estábamos desahogando y consolando mutuamente.