NARRA JUUZOU.
Juuzou: mamá ¿tienes alguna idea de cuanto tiempo llevó aquí?Madame: no lo se Juusito. Perdí la noción del tiempo.
Juuzou: ¿que pasará cuando despierte? Me refiero a que no se cuanto tiempo llevó dormido y cuando despertare.
Madame: haah más pronto de lo que tu crees hijo, pero (me abraza) me alegro de poder haber estado contigo.
Juuzou: también yo, mamá.
Madame: oye, lo que dije antes de morir, no era cierto, yo te amo y siempre lo he echo, tu fuiste mi único hijo y estoy muy orgullosa de ti.
Juuzou: ¿mamá?
Madame: te convertiste en una persona maravillosa y me alegra poder haber visto parte de tu vida.
NARRA JUKO.
Ya pasaron 10 meses después de lo sucedido, mi papá aún no despertaba y Satoshi no tenía indicios de poder cambiar, así que hoy iré con una compañía diferente a la que el espera. Entre y esta vez no me senté.Satoshi: ¿que pasa Juko-chan? ¿ porque no tomas asiento?
Juko: no me vayas a odiar más Satoshi-san, pero traje a alguien diferente para hablar contigo hoy.
Satoshi: ¿mmm? ¿a quien?
Juko: (suspire y luego le dije que pasara)
Satoshi al ver quien entró se sobre exsalto, su cara cambio y comenzó a sudar.
Satoshi: Y-Yuri...
Yuri: Hola... (se sentó frente a el)
Juko: Yuri-san estará vieniendo en mi lugar y nos mantendremos en contacto, sera tu psicóloga y te ayudará con el cambio que quieres.
Satoshi estaba pálido por lo que le dije, el no olvidaba a Yuri-san y ella no lo olvidaba a el.
Yuri: Juko-chan me contó todo lo que has echo, me pone triste y admito que me decepciona un poco.
Satoshi: Yuri yo...
Yuri: pero... Yo te amo y prometiste que te casarias conmigo el siguiente año si seguías con vida así que, te ayudare a cambiar esa actitud y forma de pensar.
Satoshi sonrió y a lo lejos se lograba ver un leve sonrojo en sus mejillas, estaba feliz de ver a su prometida después de tanto. Me retire sin interrumpirlos y fui al baño para lavarme las manos y luego ir por algo de comer. Salí del mismo, fui por algo de comer y luego me fui al hospital, fue triste porque no pudo estar en mi cumpleaños como siempre lo hacia pero me alegraba saber que seguía bien y que estaba respondiendo con los tratamientos. Llame a mi mamá para decirle que me quedaría en el hospital, también le avise a Takaki-kun para que no fuera a casa de por gusto, mañana lo veria pues íbamos a tener una clase de cita. Entre a su habitación.
Juko: Hola papa, ¿estas mejorando? (me senté a su lado) estas helado y tu cabello se ve algo desarreglado.
Tome un cepillo que estaba en la gabeta de la mesita que estaba junto a la camilla, quite sus broches y comence a peinar su negra cabellera. Sentía como lágrimas comenzaban a caer por mis mejillas, ooh no, otra vez no. Odiaba llorar, más si estaba con el. Cuando termine de peinarlo le coloque nuevamente sus broches rojos, guarde el cepillo y me recoste junto a el pues ya era un poco tarde hasta que me quede completamente dormida.
NARRA JUUZOU.
Madame: recuerda lo mucho que te amo mi niño.Juuzou: ¿mamá?
Madame: cuida muy bien a tu familia.
Juuzou: mamá...
Madame: aunque ya no nos volvamos a ver, siempre estaré en tu corazón.
Juuzou: ¿ porque tan derrepente me dices esas cosas?
Madame: (sonrie) llegó la hora de que despiertes.
Juuzou: ¿como dices?
Madame: ya preocupaste demaciado a tu familia, es hora de abrir tus bellos ojos y estar con ellas.
Juuzou: ¿despertare?
Madame: en cualquier momento, es por eso que te digo todo esto, porque se que ya no te volveré a ver ni en tus sueños.
Juuzou: (baja la mirada) me alegro verte de nuevo, me gusta esta tu, te amo mamá, jamás te olvidare.
Madame: ooh ven aquí (extendió sus brazos por lo que yo fui a ella y la rodee de la cintura y ella sobo mi cabello) cuidate mucho ¿si?
Juuzou: si mamá.
Sentí como mi cuerpo comenzaba a pesarme y me comenzaba a desvanecer. Voltee a ver a mi mamá y ella con lágrimas en sus ojos me dio un beso en la frente y me dijo que me amaba, luego, ella desapareció y sabía que nunca más la volvería a ver.
Poco a poco fui abriendo los ojos tratando de enfocar lo que estaba a mi alrededor, trate de moverme pero me costaba trabajo hacerlo, no sabía por cuanto tiempo estuve dormido pero por fin había despertado. Pude abrir mis ojos completamente, estaba en un cuarto de hospital, era de noche, un pequeño aire entraba por la ventana haciendo que las cortinas se elevarán un poco. En la mesita habían flores de muchos colores, creo que las dejaron ahí para mi. Trate de mover mis manos y al hacerlo, sentí a alguien junto a mi, voltee a ver quien era y en la orilla de la camilla estaba mi princesa, descansando, creo que fue a ella a quien preocupe de más. Sonreí al ver que estaba bien aunque, su cabello era diferente, estaba corto pero igual me gustaba. Trate de mover mi mano para poder sobar su corto cabello y hacer que despertara, me costo trabajo hacerlo pero pude llegar hasta ella, era tan suave, llegue hasta su mejilla y la sobe con mi pulgar, se sentía fría, la temperatura de la habitación y del aire que entraban eran bastante helados, a ella la gusta mucho el frío así que supongo que esta bien. Se fue moviendo, indicando que ya iba a despertar, restrego sus ojos mientras se iba sentando en la silla, bostezo y se estiró un poco hasta que abrió los ojos y me vio, se quedó paralizada al verme despierto, sus ojos se llenaron de lágrimas al instante. Sonreí con dificultal y la salude.
Juuzou: hola... Princesa.
