-Y tu pretendes que por el hecho de que te hayas pintado una buena historia en tu cabeza, yo voy a creerte?- dijo mirándome a los ojos.
-estoy siendo sincera, no puedo probarlo usando mis poderes, porque ya no tengo y si los tuviera no tengo ni la mas mínima idea de que carajos hace un Cupido, pero puedes preguntarme lo que sea, sea de ti, de tu hermano, tus padres o simplemente de mi mundo y veras que esto no es una mentira, esta es mi triste realidad.- dije sin despegar la mirada de sus profundos ojos lo cual lo hizo creerme un poco más que antes.
-por dios valentina!- dijo mientras se desordenaba el cabello negro y aun mojado mientras caminaba de una esquina a otra, me percate de que no se había vestido aun así que intervine.
-mejor vístete prometo contarte todo, te espero afuera.- agregue, le di una mirada y salí de la habitación cerrando la puerta detrás de mi.
Yo no tenía idea de como explicarle todo, trate de recopilar toda la información que pude en mi mente sobre él y su familia, en mi mundo ya sabíamos que era una chica la próxima Cupido porque aunque no sepamos quien es si podemos saber quién es el humano y aunque no tuve tiempo de leer completamente su ficha personalizada, recuerdo que por ser chica me tenía que presentar a una materia donde lo único que estudiábamos era sobre él, su familia y su mundo. Que irónica la vida, las veces que preste verdadera atención a dicha materia es porque me interesaba la vida del chico no porque pensé que fuera a ser Cupido, de hecho pensaba que era la que menos posibilidades tenia. Daniel salió ya vestido con unos shorts color crema y una camiseta blanca sin mangas y su cabello aun despeinado. Nada mas su silueta entro a mi campo de visión me levante nerviosa y algo ansiosa del sillón.
- listo? pregunte frotando mis manos.
- creo.- fue toda su respuesta.
Yo debí haber estado más tranquila porque él me estaba creyendo, pero a quien iba a engañar todos sabíamos que ahora empezaba el problema y yo ahora siendo una humana incluso más débil que él era quien debía protegerlo, la vida y sus ironías. al tratar de recordar hace un rato la información sobre Daniel me di cuenta que mi cuerpo también había disminuido su capacidad de recuerdos y de velocidad al pensar, hasta que punto eran imperfectos los humanos, ¿Pero,
hasta ese punto me encanta formar parte de ello?Hola a todos, disculpen la demora. Pero aquí está la conti. Es cortita pero es algo. Esto se pone bueno. Gracias por seguir a Valentina y a Daniel en su historia, voten y comenten. Besos.
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¿Un cupido enamorado?
Romance¿Cómo te imaginas a Cupido? seguramente como el resto de las personas, crees que es un hombrecito con alas, arco y flechas y sus típicos cachetes rosaditos. Pero no es así, cupido es una chica de tan solo 17 años la edad a la que los dioses obtienen...