Alison.
Estaba en mi casa, llorando todo el día por su ausencia. Pero a la vez recordando todos los preciosos momentos que había pasado me ponía feliz, había que saber ver lo bueno de lo que ha pasado y de las cosas que han pasado.
Mi profesora y el guardia (Julián) se iban a casar, y me invitaron a la boda.
Fui, realmente estaban guapísimos todos. Cómo me gustaría tener ahí a Cristian de la mano.
Terminó, y decidí llamar a Emma, para que hablásemos en mi precioso parque. Le conté lo sucedido, realmente ella lamentaba lo que pasó. Después de charlar casi dos horas, ella se tuvo que ir a su casa a cenar, y yo, por la noche, mirando a el cielo, diciendo:
—Te amo, Cristian. Sé que me estás escuchando porque sé que siempre lo has hecho y siempre lo harás. Mi fortuna del querer eres tú. Tú eres una de mis fortunas: conocernos, hablarnos por un trabajo, hacernos amigos y estar enamorados desde el primer momento. Ahora eres tú el que está en mi pensamiento por la mañana y por la noche, te extraño como nunca lo he hecho, empezamos esto por un estúpido trabajo, pero lo que siento por tí nunca terminará. Contigo he descubierto que el verdadero amor sacrificaría su vida por tí, hasta tal punto de perder tu vida por ello. Te amo, te amo, te amo, te amo, aunque me veas llorando diciéndote esto, en el fondo sé que lo hiciste por mí. Te quiero Cristian.
De repente sentí como si él estuviera al lado mía, sé que siempre lo estaría, este sería el comienzo de una nueva vida.
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Las fortunas del querer
Science-FictionDos adolescentes, juntos son uno. Diferentes de sangre, pero destinados a estar juntos. Aventuras, amigos, vampiros y hombres lobo se verán envueltos en esta historia.