LUNES 14 DE SEPTIEMBRE

644 35 3
                                    

Querido diario, estoy nerviosisisíma ¡mañana comienzo en el nuevo instituto! Mi hermano Jaime no parece nervioso pero yo estoy que no quepo de la emoción aunque por el otro lado me lamento de que las vacaciones hayan pasado tan rápido. Pego las etiquetas con mi nombre en los libros y en los cuadernos cuando de repente una llamada inesperada rompe el silencio. -¡Es para ti Valeria!- grita mi madre desde el salón. Salgo corriendo y cojo el télefono, cuando cuelgo no cabía de la emoción. ¡Me habían admitido en el conservatorio! Corro a abrazar a mi madre y ella me abraza fuertemente ¡no me lo podía creer! Empezaba esta misma tarde, demomento solo tendría que ir cinco días a la semana dos horas, no me quedaría mucho tiempo pero era lo que más me gustaba hacer. El día más o menos ha ido tranquilo (por cierto mi primera clase fantástica) ya tengo todo preparado para mañana, me lavo el pelo y cuando me dirigía a la habitación para ponerme el pijama veo una llamada de Jesús. Le llamo y al instante contesta. -¡Guapetona!- sonrío y contesto. -Hola guapo ¿querías algo?- -Sí necesito verte, tenerte aquí ahora y en este momento.- suelto una carcajada. -¿Entonces dónde quieres que vayamos?- me insiste. -En el Parque del agua a las nueve y media.- cuelgo y me empiezo a preparar. Me pongo una falda vaquera con una chaqueta y unas zapatillas, también me maquillo y salgo rápido de casa evitando que mi madre sospeche con quién me puedo ir a estas horas. Al fin llego y corro a abrazarle ahora que esta desprevenido. -Mi niño.- y le doy un beso. -¿Quieres que vayamos a dar un paseo en barca?- tengo que admitir que me daba un poco de miedo pero como se le veía tan emocionado acepté a montarme. ¡Nos lo pasamos genial! Alfinal de la noche nos despedimos pues mañana ya teníamos que madrugar. -Nos veremos mañana en el insti ¿nerviosa?- No lo sabes tú bien. Y nos empezamos a reír. Nos despedimos con dos besos y llego a casa corriendo para no llegar tarde. Cuando me encuentro a Eva y Carlos cenando con mis padres. ¡Me quedo de cuadros! -Hola a todos.- digo tímidamente y les saludo con dos besos. Subo a mi cuarto y le empiezo a contar a Jesús la situación que he vivido, charlamos un rato y le doy las buenas noches. Cierro los ojos y memorizo todo lo que he vivido este verano, como muchos dicen: "Esos dos meses que parecen dos días" Paso las páginas de mi diario y observo que cada vez van quedando menos. ¿Como sería el final de mi diario? Preguntas sin respuesta que se acabarán descubriendo en un futuro pero, cuando me doy cuenta ya estoy dormida...

Diario de una gemelierDonde viven las historias. Descúbrelo ahora