💷 Capítulo 11 💷

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— patético

Una voz lo asustó y levantó la cabeza para ver a un auto frente suyo. Ventana de dicho auto, medio bajada, lo suficiente para ver el rostro y ojos de su ex compañero Ryo. Sus ojos no mostraron algún interés en llevar una conversación con Hoshino así que solo le ignoró.

— a mi no me ignoras -dijo alzando la voz. Se bajo del auto y camino hacia Haru y pese a que el susodicho era comprensiblemente más alto que él no le tenía miedo- ¿quién te crees? -le agarró del brazo y lo zarandeó; haciendo que Haru tratara de liberar su brazo-

— ¡suéltame! ¿Por qué me molestas? somos colegas, me debes respeto -frunció el ceño y logro empujarlo contra el auto-

Ryo enfureció y levantó su mano para dejarla caer sobre la mejilla de Haru; sólidamente. Haru abrió los ojos sorprendido, no esperaba ese golpe.

— ¿respeto? Tú no mereces respeto luego de lo que hiciste. Por poco y dañas mi carrera como hiciste con la tuya -le empujó e hizo que Haru se tambaleara y cayera sobre su trasero en el asfalto; a un lado del banco- me disgustas, Haru

Haru ya lo había aceptado hace ya algún tiempo atrás. Había aceptado de que no era perfecto, y de que las personas solo recordaran lo malo o fallos que haces sin importar lo mucho que ayudaste o hiciste las cosas bien. Era como un mal que tienen los humanos o demás personas. Sus ojos se aguaron y cabizbajo no noto a Ryo volver alzar la mano hacia su dirección hasta que escuchó un ¡BAM! Ambos giraron sus cabezas hacia el estruendo sonido; sorprendidos.

Ahí estaba Daisuke, bajando de su auto (el cuál intencionalmente choco contra el de Hoshino), y caminar hacia ambos seres. Sin palabras que decir, tomó de la muñeca a Hoshino y se la rompió. Eso lo dejará fuera del trabajo por un buen tiempo pensó y Haru abrió los ojos horrorizado.

— ven -Su voz firme (no dando espacio para refutar), dejó que Hoshino se recargara de su auto mientras lloraba por el dolor en su muñeca, y cargo a Haru en brazos a pesar de que este le ganaba en altura; era ligero- te dije que te cuidaría -besó su frente y lo dejó en el asiento del pasajero para abrocharle el cinturón- descansa, te llevaré a casa

Daisuke dio la vuelta al vehículo, se adentró y condujo lejos de la parada de autobuses hacia el apartamento de Haru. Haru sollozó y Daisuke le tendió un pañuelo con sus iniciales DK bordadas en negro.

Haru sorbió por la nariz mientras se limpiaba con el pañuelo blanco ya luego de un tiempo y vio que el auto entraba por su vecindario. Se desabrochó el cinturón cuando el auto se detuvo, pero no se bajo. Daisuke seguía con la mirada al frente. No sabía si preguntar o hablar con temor a que Haru se molestase más con él.

— gracias -murmuro y echo su cabeza hacia atrás para recargarla en el asiento mientras sus ojos miraban el techo del auto- siempre a sido así -soltó- Ryo, desde el accidente que disparé a nuestro objetivo. Desde ese accidente no he podido disparar otra vez, y me echaron de la primera división -cubrió su rostro con ambos brazos para cubrir su vergüenza- pero de seguro que ya eso lo sabes

Daisuke le miró de reojo, asintió levemente. Le era imposible no investigar cuando algo de interés llamaba su atención. Claro que Haru no era ningún objetivo, era alguien muy importante para él.

— lo sabía -medio sonrió- ¿puedo saber por qué lloraste aquella vez en la villa? -preguntó temeroso de saber la respuesta-

Kambe apretó el guíe hasta que los nudillos se tornaron blancos por la fuerza administrada. Suspiro y cerró los ojos para luego abrirlos y girar su cabeza hacia Haru, para mirarlo.

— en ese momento sentí muchas cosas a la vez. Cuando te toque de aquella manera, tú olor, tú piel caliente contra la mía, tus finos labios, los sonidos que emitías, Haru ... -se sonrojó y observó cómo Haru se removía los brazos de su rostro para mirar a Daisuke de vuelta con el rostro en llamas igual- y luego me miraste de aquella forma ... por eso lloré. Nunca me había sentido así con una persona -se sinceró-

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