Euforia

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Conocen esa sensación que te acelera el corazón, empiezas a transpirar, tu respiración se acelera, te dan ganas de gritar, sientes como la alegría sube a niveles inimaginables, te crees capaz de todo; esas sensaciones en mi cuerpo se traducen como  euforia... En este momento estoy eufórica siento que podría volar, pero la lógica me recuerda que no podré pero esa sensación me hace pensar que si, me encuentro exaltada muchos o pocos se preguntarán el porque de ello, la respuesta es fácil acabo de recibir la noticia más esperada de mi vida; ahora la pregunta sería ¿cuál es? Estoy curada, al fin luego de tanta lucha...
¿Lucha? Sería mejor guerra porque fui a la guerra y regrese. Viví una guerra interna con mi cuerpo, mente y sentimientos; un cuerpo que necesitaba de constantes medicamentos, tratamientos y experimentos; una mente que se volvió un  enemigo implacable que busca destruir los cimientos de la realidad, llenándome de pensamientos tortuosos, haciéndome imaginar los peores escenarios; y que decir de los sentimientos son los peores, cambias constantemente de emoción, pero hay uno que siempre está presente es el miedo, sin darte cuenta estás lleno de miles de temores; en esa guerra aprendí tantas cosas, entre ellas: ahora se escuchar mi cuerpo lo que necesita y como lo necesita; se controlar mis pensamientos ya mi mente no tiene control de mi; se identificar mis emociones y explotarlas sanamente.
Toda esta experiencia fue traumante pero me dejó con un aprendizaje inmenso, no soy la misma persona; dicen que todos cambiamos luego de una vivencia así y cuánta razón tienen es imposible volver a ser los mismos.
Por eso en este momento saboreo la euforia con gusto, gritando y riendo, sin intentar controlar ese sentimiento porque vale la pena sentirlo plenamente.

Recopilación de Relatos CortosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora