"I know you want me, let's start talking..."
—¡Sofia!— escuche a alguien gritar mi nombre y al girarme vi a mi mejor amiga Sabrina, acercarse a mi— Tenemos suerte, el profesor Ortega no vino, junto con Rowan, Sarah y China vamos a ir a la cafetería cerca de aquí, ¿vienes?
—De acuerdo, vamos— rio la castaña para después ser jalada fuera de la universidad.
Al llegar a la cafetería las cuatro chicas se sentaron en su mesa habitual y esperaron a que el chico guapo Mitchell les tomara la orden pero esto no sucedió pues quien se acercó fue una pequeña rubia.
—Buenos días, ¿que desean ordenar?— preguntó educadamente la chica.
—Disculpa, ¿y Mitchell?— preguntó Sarah.
—Tuvo unos problemas personales y me tocó cubrirlo— respondió la rubia, observando a todas.
—Entendido— respondió la ojiazul— Soy Sabrina, ¿cual es tu nombre?
—Carpenter...—interrumpió con un regaño la mayor sintiéndose extrañamente nerviosa con la rubia pequeña.
—¿Que?— respondió la otra rubia restándole importancia— Lo mismo hice con Mitchell.
—Me llamó Chloe— respondió risueña la ojiverde— Mucho gusto Sabrina— se dirigió con una sonrisa a la chica.
—Lindo nombre— mencionó la castaña menor— Soy Rowan, ellas son Sarah, China y esta señora es Sofia— señaló a cada una y molestando a la mayor quien no dudó en sacarle el dedo de en medio.
—Solo quiero que se comporten, podría ser incomodo para ella— respondió la ojimarron— Que ustedes sean demasiado sociable no significa que todos sean así.
—No te preocupes Sofia, estoy bien con ello—Chloe respondió con una sonrisa— Pero debo volver a trabajar, ¿quieren algo?
Después de tomar la orden de las chicas, la rubia camino hacia la cocina, dejándolas solas.
—Es linda— dijo Rowan viendo a Sofia— Incluso es mas linda que Mitchell.
—Habla por ti— murmuro Sarah haciendo que todas voltearan a verla— ¿Que?, algún día saldré con el, estoy segura.
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" I already know everything, so why are you hiding. It's written all over your face that you like me"
Dos meses había pasado y Sofia asistía al café muy seguido, consiguió ser más cercana a Chloe, se conocieron más.
Ambas tenía sentimientos la una por la otra pero ninguna se atrevía a dar el siguiente paso pues temían ser rechazadas.
—¡Hey girl!— susurró la castaña en el oído de la rubia que se encontraba anotando algunos pedidos.
—¡Sofia!—medio grito la rubia para después golpear ligeramente a la alta que reía— Me asustaste.
—Ya, perdóname— se disculpó la chica pero al instante comenzó a reír
—No lo sé, lo pensaré— bromeó la rubia para después tomar su libreta y caminar hacia una mesa.
—No, ¿de verdad no me vas a perdonar?— preguntó la castaña siguiendo a la rubia por toda la cafetería— Bueno, dime que puedo hacer para que me perdones.
La rubia pareció pensarlo un momento para después sonreír.
—Cántame algo enfrente de todos— río la ojiverde.
—No hablas enserio o ¿si?— preguntó avergonzada la castaña haciendo que la otra asintiera rápidamente— De acuerdo, pero que quede claro que lo hago por ti, además de perdonarme tienes que aceptarme una cita, ¿trato?
