Bitter & Sweet¦ Tk Ff.

8. lo quieres a él

—¿Y ahora que sucedió?

El de hebras casi doradas negó. No tenía ánimos ni ganas de hablar. En cambio, su pequeña hermana resopló y pico su estomago.

Al ver que su hermano no le diría nada, supo que usaría sus técnicas tramposas. —No te preocupes, no es necesario que me cuentes. Ya sabes, no es como si fuera a sentirme mal o algo así. Entiendo que no quieras decirme, total, las hermanas como yo somos estúpidas y no podemos dar buenos concejos, ¿cierto?

Malvada y manipuladora. —No, no es eso, sabes que te amo mucho. Es sólo que me siento tonto por no hacerte caso. Sé que me dijiste: no te acerques más. — Rio entre dientes el mayor por minutos. —Es lo mismo de siempre, pero ahora estaban juntos. Es obvio que jamás seremos nada pero... tengo esperanzas y verlos tan felices hace que me diga: demonios, deberías dejar de ser un estorbo. Me siento mal. —Común en él, puchereó de forma tierna.

Una mueca se formo en sus labios rosados— Verás que pronto todo esto se arregla. Algún día ese escarabajo-

—¡Hey!

—Si, si, lo siento. Continuó. Verás que algún día ese escarabajo bonito pondrá sus bellos ojos color popo en ti. —Sonrió aún más. Si algo había que le molestará era ver a su gemelo triste.

No obstante, el mayor decidió que no era momento de parar. —A veces deseo que se hubieran fijado en personas diferentes. Se nota a kilómetros que el amor es mutuo.—No quería llorar pero las emociones que sentía eran demasiado para su débil y joven corazón, se abalanzó a los hombros de su hermana menor y lloro poquito.

En ese instante la menor sopesó las palabras del otro. ¿Fijarse en otras personas, eh?— ¡Ya sé!

Se separo de la cama con un brinco y su hermano cayó de espaldas.

—¡Carajo! Tienes a la hermana más inteligente, maldito.

El de cabello rubio le miró con el ceño fruncido.

—¿Por qué me dices eso?

—¿No es obvio hermanito? —Infló su pecho orgullosa. —Nosotros tiraremos de una u otra cuerda.

Oh, seguía sin entender. ¡Sorpresa!

—YoonGi, YoonGi, mi pequeño hermano mayor. Mira, no creo que un amor adolescente sea tan fuerte para que dure demasiado, si movemos las piezas correctas ya verás como nos encargamos de esos dos.

En cambio, YoonGi la miro asustado.—No, no, no. ¡No! No planeo hacer nada ilegal. No otra vez, ¿olvidas la vez que nos castigaron antes de mudarnos? Mamá estaba hecha una fiera. —Tembló ligeramente ante el recuerdo. —Evitemos las cosas ilegales por un buen tiempo.

—No tonto. Lo que quiero decir es que, somos jóvenes y nuestros romances no duran mucho tiempo, menos si conocemos a otras personas, entonces si hacemos que TaeHyung se fije en ti y JungKook en otra persona...— sonrió complice, mas su hermano seguía serio. Entornó los ojos. —Haremos que pierdan el interés el uno por el otro.

YoonGi trato de negar. Todo esto era una locura y los planes de su gemela siempre eran un desastre. 

—No seas gallina. Si ellos se enamoran de otra persona será su culpa, nosotros sólo estaremos ahí. Y vamos, sino funciona y vemos que su amor es verdadero entonces lo dejamos ahí, y mira, eso nunca paso. ¿Sí?

—YoonJi, ya te dije que las gallinas no son cobardes y además, no lo sé... no quiero lastimar a nadie.

—¡Pero no lo harás! Si los sentimientos se pierden al mismo tiempo nadie tiene la culpa y ellos no son algo como para que lo pensemos mucho. Además podemos hacerles un favor. ¿Imaginas que después de terminar juntos se den cuenta que no hay química? Eso sería peor, un completo rompedero de corazones.