Bitter & Sweet¦ Tk Ff.

29. por favor

—JungKook quiere mi ayuda. —YoonJi habla con su hermano, no como antes, pero un poco. —Voy a hacerlo, sólo quería avisarte. Seguramente TaeHyung se entere que te gusta.

YoonGi reacciono mal. —No. No pueden decirle.

—Yo solamente voy a hacer que TaeHyung hable con Kook, lo que él diga no es mi problema.

—Claro que es tu problema. Tú fuiste quien inició esto. No me importa que hagan ustedes, pero TaeHyung no puede enterarse. Somos amigos ahora y no quiero que esté incómodo.

Al pensarlo supo que YoonGi tenía razón. Ella era la culpable de todo esto y lo menos que podía hacer era ayudar a JungKook, pero sin perjudicar a su hermano que no hizo nada. —Veré que hacer.

El mayor no dijo nada. Abandonó su futuro no-cuarto. Había hablado con su padre acerca de que él y YoonJi deberían tener un cuarto para más privacidad, alegando que ya no eran un par de niños. Claro que su padre y madre entendieron y terminaron dándole un cuarto que no usaban.

En cuanto a YoonJi, ella recogió una playera vieja que su hermano dejó por ahí. Arrepentida, abrazo la prenda. Perdió a su amigo y a su hermano al mismo tiempo por un arranque suyo que al final resultó un asco, pero agradecía un poco ya que sin ese incidente no se hubiera dado la oportunidad de conocer a una persona tan maravillosa como JungKook. Y DongMin.

DongMin... Él realmente era un buen chico, muy amable y divertido. También quería mejorar por él y se encontraba a si misma feliz de tenerlo a su lado, después de todo él nunca se fue. Tal vez porque no fue tan afectado, pero esa no es la idea. Se mantuvo firme y jamás quiso dejarle toda la culpa, por eso optó por no contarle a JungKook sobre esa parte. Sí, fue su última mentira.  Aunque técnicamente no era una mentira, sino un dato no contado.

Estaba divagando.

Tenía que pensar en como llevaría a TaeHyung con JungKook y cuándo. Según lo hablado con Gguk, él trataría de hablar con Kim y si éste se negaba; allí entraba ella. Sólo quería que las cosas se arreglaran y así ella podría acercarse de nuevo a Jeon. Si es que la dejaba.

Con eso en mente fue a dormir con la esperanza de no despertar hasta mañana, lunes.

Así fue. Tuvo una larga y buena noche de sueño continúo. Y nuevamente era lunes, lo que significaba el inicio de otra semana escolar.

En un momento ya estaba en la escuela junto a Jeon, que explicaba cuidadosamente lo que había planeado. Le deseó suerte, pues buscaría a TaeHyung y finalmente hablaría con él, explicando que fue lo que pasó. Claro que no olvidó mencionar que por favor cuidara el secretito de su hermano y JungKook, sin importar lo que pasó, acepto.

Lo siguió después de unos segundos, como había indicado.

Por su parte, JungKook estaba nervioso y algo emocionado por lo que podría ocurrir. Sonrió, había encontrado a TaeHyung comiendo con mucha tranquilidad. Tan bonito.

Se acercó y llamó su nombre. Pudo haber esperado un saludo débil o efusivo, pero jamás que lo ignorará completamente. —¡TaeHyung! —Gritó, pero lo único que consiguió fue que se parara de un brinco y se fuera.

Oh no, no la iba a dejar ahí.

Martes.

—¿Debería preocuparme?

—No lo creo, es algo normal. Yo te lo dije. —Le apunta con su lápiz. Estaba haciendo algo de tarea. —¿Por qué YoonJi no ha hecho nada?

—Oh, mira. Ahí está. Ya vengo. —Ignoró completamente lo que dijo, e igualmente TaeHyung lo hizo con él, pero si ayer no se detuvo hoy tampoco, en su vocabulario no estaba esa palabra. —¡TaeHyung habla conmigo!