Tan cerca y tan lejos [Intenabo]

VI - Rivales

Cuatro jinetes, dos ladrones, dos asesinos y tres hermanos oscuros, todos reunidos en el mismo punto, sobre ellos posaba una bella pero peligrosa luna roja.

Auron despertó exaltado ¿En qué momento se quedó dormido? Miro a su lado, vio a Segismundo en una camilla, estaban en el hospital ya que hace dos días el trío sexy se vio envuelto en un problema y tuvieron que desaserce de las pruebas, sin embargo Segis termino por caer a un precipicio junto a un camión de basura.

-Maldición -se quejo por lo bajo mientras se tallaba los ojos para terminar de despertar-.

-¿Un mal sueño? -pregunto Segis notando lo mal que se veía su amigo-.

-Se podría decir que si -dijo a la vez que bostezaba-.

-Supongo que esa silla no es muy cómoda.

-Al contrario, he dormido en lugares peores, incluso en la tierra rodeado de lobos y mons... criaturas salvajes -se interrumpio a si mismo, no quería que Segis descubriera lo raro que era el pueblo de dónde venía-.

-Ya veo, quizás deberías dormir en el departamento -trato de cambiar el tema, noto que su amigo ocultaba algo, pero no iba a presionarlo para que le dijera-.

-No, estoy perfectamente, pero es verdad que debo ir con Horacio.

-Y de paso te quitas ese gorro, te recuerdo que es el uniforme de basurero.

-Si... bueno... me gusta el gorro -sonrie- y me recuerda a alguien.

-¡Oh! Entiendo -sonrie picaro- ¿Novia?

-¿Que? No no, nada de eso, se trata de un chico.

-¿Eres gay?

-¡No! -sonrrojado- es solo un amigo.

-Pues ahora pareces un tomate de los que cosechaba en mi pueblo.

-Ese es un tema complicado, quizás un día te lo diga.

-No es necesario que lo hagas -cierra los ojos- saluda a Horacio de mi parte.

Auron salió del hospital para reunirse con "Horacio", tal parece que su amigo tenía todo un día planeado para pasarla juntos.

En lo que iba de camino al departamento recordó la plática que tuvo con Luzu la otra noche, no se sentía para nada tranquilo con eso.

"-¿Acaso tú tienes algo que ver con mi curación milagrosa?

-¿Que? ¿Porque tendría que ver yo con eso? Te recuerdo que eres un Karmaladiense, aquí tenías una protección otorgada por los dioses.

-Y te recuerdo que yo te di la protección a tí.

-Talvez tus amados dioses no te abandonaron por completo.

-¿Los míos... o los tuyos? Luzu, quiero la verdad.

-¿Y que tiene que yo haya hecho algo? Te salve la vida, acabas de decir que te atropellaron.

-No me gusta que te resguardes con los dioses malignos ¿Que les diste a cambio? Espero que no haya sido nada valioso, porque quiero que me quites la protección.

-Hagamos un trato, te quitaré la protección si en una semana no tienes accidentes graves, y no es necesario que me lo digas, porque yo lo sabré... ¡Y! Si todo sale bien la noche de la luna de sangre.

-¿Luna de sangre? ¿Crees que puede afectarme aún que este aquí y no haya?

-No lo sé Auron, por eso quiero estar seguro, me preocupa tu bienestar.

-De acuerdo, acepto el trato ¡Una semana!"

Su mente paso a la luna de sangre, en el sueño que tuvo hace un momento estaba esa maldita luna, suspiro al pensar que todas las bandas enemigas se reunirían aquella noche para posiblemente partirse la boca a puñetazos.

La luna de sangre en Karmaland era demaciado extraña, pues las noches que la luna tenía ese color carmesí, todos los habitantes del pueblo sacaban a flote toda su locura, aún que ninguna lo quisiera. Mataban, robaban, destruían, pero era algo que poco les importaba, pues aquel pueblo estaba repleto de minas con piedras preciosas, siempre podían reparar lo destruido, y todos eran inmortales al tener la protección de los dioses, razón por la que no había demasiada queja por eso, pero... ¿Cómo afectaría a alguien que no está en el pueblo? Para empezar ¿Le afectaría?

-¿Gustabo? -Perxas estaba frente a él, no supo en que momento había llegado al departamento- ¿Estás bien?

-Perxitaa, tengo que hablar contigo -lo agarra del brazo y lo sienta en el sillón, quedando el de pie- pronto será la luna de sangre.

-Pero... no estás en Karmaland, Luzu solo te dió protección contra accidentes... y te felicito por aún no meterte en un problema.

-Quiero demostrarle a Luzu que no necesito que me proteja, pero si la luna roja me afecta... ¿Crees que suceda?

-No lo sé tío, pero lo mejor será que no salgas, para prevenir accidentes.

-Recuerda que no me controlare, saldré aún que yo no quiera.

-Tratare de tomar todas las medidas posibles... aun que... talvez necesitemos ayuda.

-Solo confío en Segis, pero... puede que no me crea y me odie.

-Habra que arriesgarnos.

-Tuve un sueño de la luna de sangre, ví a todos reunidos.

-¿Todos? ¿Cuántos eran?

-11... 4 jinetes, 2 ladrones, dos asesinos y 3 de la hermandad, estaban todos los grupos.

-¿Cómo es posible que estén todos? A parte... creí que los grupos solo están conformados por los 9 héroes de Karmaland... es imposible que sean 11.

-Yo estuve a punto de formar parte de la hermandad, así que te puedo asegurar que ví a Willy y a Fargan con sus trajes oscuros... pero el tercero... el tercero no era Rubius... incluso... podría asegurar que se trataba de una chica.

-Parece que hay más secretos en Karmaland de los que uno se espera.

-Me pregunto si Los Santos es igual.

-Aqui hay pandillas, ladrones, mafias... digamos que ambos lugares tienen lo sueño.

-Si -suspira con pesar- pero los Karmaladienses son inmortales, estás personas no... tampoco tu -dijo eso último con dolor-.

-Sabiamos a lo que nos enfrentavamos al venir, no nos queda otra opción, si queremos sobrevivir tenemos dos opciones, ser policías o mafiosos.

Auron se puso a pensar en eso, era verdad que en Karmaland era mano derecha del alcalde, por lo cual tenía poder y muchos lo respetaban, excepto Luzu, quién llegó a maldecirlo, quemarle el huerto y casi le calcinaba la casa solo por prender en llamas un árbol, claro... eso le llegó a dar igual, no le importaba.

Pero no se encontraba en Karmaland, y eso no terminaba de superarlo, no sabía que hacer, quizás debería tomar en cuenta formar parte del cuerpo policial.

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Talvez estén pensando... ¿Dónde mierdas está mi Luzuplay o Intendenteplay? ¡Pues calma! En el próximo capítulo aparecerá su superintendente favorito.

Solo hace falta aclarar un par de cosas para que todo tenga sentido, o si no, no se entenderá ni madres.

Los rencompensare, no se preocupen <3