14.

3.5K 319 31
                                    

En cada reunión que tenían Pansy y Hermione la leona se sentía especialmente feliz. Nunca le habia gustado tanto estudiar y eso era decir mucho. Pero aquella aquella tarde de domingo fue diferente.
Ambas chicas estaban en la biblioteca juntas como de costumbre, pero Pansy no hacía bromas, ni le miraba a la castaña como solía mirarle. Y decidió no preguntarle nada.

Era casi la hora de la cena y Hermione estaba esperando fuera del Gran Comedor sentada en un banco cuando llegó Luna.

- Hola Hermione- le saludó alegremente Luna.

- Ah hola Luna ¿podemos hablar?- preguntó una nerviosa Hermione.

- Si, ¿te encuentras bien?- la rubia se preocupó al ver a su amiga tan ida.

- Solo necesita hablar, es que estoy confundida.

- Pues cuéntame- le dijo la águila sentándose al lado de la otra chica.

- Cuando siempre piensas en una persona, cada vez que la ves tú corazón late con velocidad y te sientes feliz, no quieres separate de esa persona e incluso sus imperfecciones te parecen perfectas ¿eso es amor?

- Claro que si Herms, lo has definido perfectamente pero hay algo más ¿no es así?

- Si, es que es una chica y nunca había sentida algo igual ni siquiera por Ron. Y tengo miedo porque creo que sé lo que siento pero a la vez todo es muy confuso.

- Yo no te puedo decir lo que sientes o lo que no, pero si sé que últimamente te he visto muy feliz y la persona que te haga sentir eso te hace muy bien.

- Gracias Luna- dijo Hermione mientras la abrazaba.

- Nos vemos- dijo Luna mientras se adentraba en el comedor y Hermione a los pocos minutos la siguió.

Esperó un rato en la mesa hasta que poco a poco comenzaron a llegar sus amigos. Primero llegaron Neville y Ginny, los siguió Ron y por último un demasiado feliz Harry. En otras circunstancias le hubiera preguntado a este último qué porque esa cara pero no veía a Pansy y eso la hizo alarmarse. Pasaron unos minutos y seguía sin llegar y está estaba perdiendo los nervios. Se levantó y fue corriendo a su habitación, dejando atrás a cuatro chicos muy confundidos. Al llegar como ya esperaba estaba vacía y fue otra vez corriendo a el Gran Comedor.

- Harry ¿me puedes hacer un gran favor?- la chica miró suplicante a su amigo.

- Si claro, ¿que necesitas? - preguntó Harry confundido pero sin quitar la sonrisa de la cara.

- ¿Me puedes dejar la capa y el mapa?- el moreno la miró muy sorprendido - te prometo que te explicaré todo pero por favor déjamelo.

- Eeh si claro vamos a mi habitación- le dijo Harry mientras se levantaba. Cuando llegaron a el cuarto Harry le dio los objetos a la Gryffindor.

- Muchísimas gracias, Harry- dijo mientras salía corriendo dejando todavía más confundido al azabache.

Cuando estuvo en un pasillo vacío, lo cuál era normal debido a que era la hora de la cena, mencionó las palabras para abrir el mapa del merodeador y este se dejó ver. Rápidamente se puso a buscar el nombre de su morena y lo halló en el bosque prohibido. No le hacía mucha gracia tener que ir pero «todo sea por Pansy» pensó Hermione.

Con la capa de invisibilidad puesta se adentró en el bosque, Pansy estaba bastante adentraba en el bosque por lo que le llevó un rato encontrarla. Cuando la vió Hermione no pudo evitar salir corriendo hacia ella. La pelinegra estaba sentada debajo de un árbol, con la cabeza entre las rodillas y llorando desconsoladamente. La leona se quito la capa y se la guardó al igual que el mapa.

- ¡Pansy! - gritó la castaña mientras corría hacia la otra y la envolvía en un abrazo. La morena ni se dió cuenta de que la había llamado por su nombre, debido a su estado.

- Granger yo... - le dijo la serpiente mientras apoyaba su cabeza en el hombro de la chica.

- Shh- le dijo Hermione mientras la abrazaba más y más fuerte. Cuando ya Pansy dejó de llorar se separaron se separaron y se sentaron una enfrente de la otra.

- ¿Qué te pasa? - preguntó una preocupada Hermione.

- Yo... No te merezco tu siempre eres tan buena conmigo y yo te he hecho cosas muy malas. Siempre me ayudas y eres amable. Siempre quise tu amistad, y solo me metía contigo para llamar tu atención, pero ahora que creo que la tengo no creo ser suficiente para tenerla- dijo mientras la lágrimas no dejaban de caer una tras otra.

- Yo soy la única que puedo decidir quién me hace bien y quién no y te puedo decir que tu me haces perfecto ¿entendiste Pansy Parkinson?- la contraria solo asintió- Cuando estoy contigo soy feliz y sé que nunca me harías daño. Eres perfecta ¿vale?

Después de eso les siguió un silencio cómodo donde ambas no podían parar de recorrer sus rostros con las miradas. Poco a poco se fueron acercando hasta que sus caras estaban a pocos centímetros. Ambas se miraban fijamente a los ojos hasta que de pronto la castaña desvío su mirada hacía los labios de la Slytherin. Ese gesto hizo que la pelinegra acortara la poca distancia que había entre ambas y juntara sus labios. Se envolvieron en un beso dulce y tierno. Hermione puso sus manos en la nuca de la otra atrayendola más hacia ella profundizando así el beso y la contraria agarró sus caderas aferrandola más a ella. Pansy pidió permiso para que su lengua entrara en la boca de la Gryffindor y esta se lo concedió. Ambas jugaban con sus lenguas y a la vez exploraban la boca de su amada. No querían que ese beso acabara nunca, ese beso que significó tanto, pero se tuvieron que separar debido a la falta de aire.

- Tu también eres perfecta - le dijo Pansy mirando esos ojos marrones que tan loca la volvían.

Las dos chicas cogieron la capa y volvieron al castillo.


🌹⚡
¿Qué tal? A la vez que me ha encantado también me ha costado escribir este capítulo. Nunca había escrito antes un beso y espero que no se haya notado en exceso.
Y gracias que ya casi llegamos a las 900 vistas :)
Un saludo.

Pd: por si queréis la imagen la imagen sin el letrero os dejo aquí el enlace (https://pin.it/4xZSKj8).

De donde menos te lo esperas » HP ShipsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora